Al fin viernes, cuando me acuerdo que el Domingo es la final me pongo nerviosa.
El entrenamiento ya estaba casi terminando, Javi me dijo que me podía ir antes si quería y bueno si me lo dice así, me re fui.
Guardo mis cosas y salgo de la oficina, pero de la nada siento un pelotazo, miro para dónde vino esa pelota y era Exequiel.
- Chango la puta madre. - él se ríe.
- No pensé que te iba a pegar, buena puntería tengo. - me acomodo la mochila.
- Ya que están acá, a la noche hago asado en casa, los espero a los dos y decile a Cande, porque no la ví por ningún lado. - me dice Rojo.
- Dale, tenemos que llevar algo?.
- No.. - dice dudando. - Bueno, si quiere algo para tomar, pero si quieren. - con Exequiel nos reímos.
Los dos jugadores se van a los vestuarios y yo me voy a mi casa.
| Luis |
Escucho que Marcos iba a hacer un asado a la noche, nos invitó a todos, y algunos iban a ir con su familia así que porque no ir con Brunella.
- Che Marquito. - él me mira.
- Que pasó Luisito?. - dice mientras se ponía la gorra.
- No te molesta si voy con mi novia, no?. - veo que sonríe.
- No, para nada amigo. - dice y yo asisto. - Traten de no llegar tan tarde, por favor.
- No te prometo nada. - dice Pol.
- No te dejo nada de comida, gil. - Pol se ríe. - Más vale que llegues temprano.
- A las 17:00 de la tarde ya podemos ir a tu casa?. - dice Toto y reímos.
- Tampoco tan temprano, onda entre las 19:00 y 21:00 ta bien. - todos dicen bueno. - Seba, vos también podés ir. - le dice a Battaglia.
- Te agradezco la invitación Marquito, pero tengo cena con mis suegros.
- La próxima te esperamos entonces. - Sebastián asiste sonriendo y se va.
De a poco fuimos saliendo del Predio, estaba bastante cansado la verdad, cada vez nos mataban más en los entrenamientos.
Llegó a casa, meto el auto en el garage, y mi hermanito corre a abrazarme.
- Ma, ahora viene Brune. - ella asiste sin mirarme. - Ya se que no te gusta que hayamos vuelto pero me dijo que estaba arrepentida y me pidió la última oportunidad. - deja lo que estaba haciendo y me mira.
- Vos sos feliz, Luis?. - le digo que si, con la cabeza. - Y eso es lo único que me interesa. - sigue con lo que estaba haciendo.
- Que feo jugar con los sentimientos de alguien hermanito. - dice Flor entrando a la cocina.
- No jugué con los sentimientos de nadie. - ella levanta una ceja.
- Ah, no?. - niego. - Y Alaska? Que es de piedra? Ella no tiene sentimientos o que? - solo la mire. - Ella sabe que volviste con tu ex?. - me quedo callado. - Lo supuse. - sonríe y sale de la cocina.
Suena el timbre, voy a abrir y era mi novia. La saludo con un beso y me corro para que entre a la casa.
- Buenas. - dice pero nadie le contesta.
- Hola. - dice mi mamá, sonríendo. La conozco y sé que está forzando esa sonrisa.
- A la noche tenemos un asado, amor. - le digo y me mira. - En la casa de un amigo y vas a venir conmigo.
- Va Alaska también?. - me pregunta Flor mirando el celular.
- Quien es Alaska?. - pregunta está vez mi novia.
- Mándale mis saludos si la ves. - me mira sonríendo. - Y Alaska es, bueno, iba a ser mi cuñada pero siempre tiene que aparecer alguien a arruinar todo.
- Florencia, basta. - me está haciendo enojar, ya se que no le cae bien Brunella pero tampoco para que la trate así.
- Pero tu hermano está conmigo, Florencita.
- Si y que lastima. - vuelve a mirar el celular. - La verdad hermano, haces mejor pareja con Ali. - dice y se va al patio con Maxi.
- No le hagas caso. - le digo, me mira y se sienta en el sillón, acto que yo también hago.
| Alaska |
Ya estábamos yendo a la casa de Marcos, íbamos en el auto de Cande, igual ella se está quedando conmigo porque tuvo un problema con la madre y bueno.
Llegamos a la casa, linda casa por cierto. Todos los jugadores de Fútbol tienen unas casas re lindas.
Tocamos timbre y nos abre Euge, la esposa de Marcos.
- Hola. - sonríe. - Ustedes deben ser Alaska, Candela y Ova, no?.
- Así es. - dice Cande sonriendo.
- Pasen chicas. - se hace a un costado así pasamos. - Un gusto, Euge. - sonríe otra vez. - Sientanse cómo en su casa.
- Gracias. - le digo. - En dónde puedo dejar esto?. - le digo mostrándole la bolsa y me lleva a la cocina.
Ova se va con las hijas de Marcos y algunas/os nenas/es más a jugar y yo salgo al patio con Candela y Euge.
- Así que sos la novia del 38 y no nos dijiste nada. - me dice Marcos sonríendo y yo lo miro sin entender.
Le iba a responder pero escucho una voz muy familiar. Me doy vuelta y lo veo entrando de la mano con una Rubia.
Y me cayó la ficha de porque estaba tan distante conmigo, se puso de novio.
Toto me agarra y me tira para atrás haciendo que me pare al lado suyo y yo miro a Marcos que no sabía en dónde meterse.
- Hola, gente. - dice sonríendo. - Ella es mi novia, Brunella. - la señala y la chica sonríe.
Luis los fue nombrado uno por uno y cuando me nombró a mí, la chica clavo sus ojos en mí y me miro de arriba a bajo.
Le pregunto a Marcos en dónde está el baño y él se da cuenta y me sigue la corriente. Salgo del lugar y entro al baño, apenas cierro la puerta me tapo la cara.
Al ratito escucho que tocan la puerta.
- Ya salgo. - digo.
Tiro la cadena cómo para disimular un poco después me lavo la cara. Abro la puerta, eran Toto y Exequiel.
- Te juro que no sabía nada. - dice Exequiel.
- Estás bien?.
- Si, está todo bien. - sonrió. Tratando de convencerlos a ellos y a mi misma.
- No hace falta que finjas que está todo bien, te conocemos y sabemos que te dolió.
- Pero no puedo hacer nada Toto, él ya eligió y yo no soy nadie para reclamarle algo. - Exequiel me abraza.
Al rato bajamos, porque sino iban a sospechar y yo voy a la cocina con Euge.
- Y Ali?. - escucho que Cali les pregunta a los chicos.
- Está en la cocina con Eugenia. - responde Toto.
Me quedo hay con ella, con la excusa de que la estoy ayudando, aunque no era una excusa, tenía que hacer muchas cosas y sola no podía, igual después llegaron los otros jugadores que faltaban y entre todas las mujeres terminamos de hacer las cosas.
°°
Jejee ojalá les guste!