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Ya estaban todos en la mesa, en la larga mesa.

Voy a buscar a Ova así se lava las manos y se sienta a comer pero no la encontraba por ningún lado, entro a la casa para buscarla adentro y cuando entro a la cocina me chocó con alguien.

- Perdón. - era Luis.

- No pasa nada. - sonrío. Iba a seguir caminando pero me detiene.

- No, no me estás entendiendo. - mira para afuera. - Perdón. - y ya entendí a lo que se refería.

- Luis, está todo bien de verdad. - le sonrío.

- Si te lastime, no era mi intención, jamás lo fue. - le pongo un mano en el brazo.

- Tranquilo, está todo bien. - le vuelvo a decir. - Lo que paso entre nosotros ya esta, quedó atrás. Vos sos feliz con tu novia, no hace falta recordar algo que ya está atrás. - le digo.

Miro para un costado y la veo a Ova que me estaba buscando. Salgo de la cocina y voy atrás de Ova.

- Vení, Ovi. - le digo y se acerca. - Te lavaste las manos?.

- Sii. - me las muestra.

- Sentate acá al lado de Coco, Ovi. - le dice Toto. Ella asiste y se sienta al lado de la hija de Toto.

- Che Toto. - me mira. - Y solcito?. - se ríe.

- Está viniendo. - me muestra el último mensaje que le mando.

- Anda a esperarla afuera, boludo. - lo empujó. - Dale, Toto. - se ríe y sale afuera.

- Es tu hija?. - me pregunto la novia de Luis, mirando a Ova.

- No, es mi hermana. - sonrió.

- Ovita. - la saluda Luis.

- No sabía que ibas a venir. - dice  sonriendo.

- Si, vine con mi novia. - la señala. - Brunella se llama. - Ova la mira de arriba a bajo. Y le sonríe.

- Bueno gente, les presento ahora sí oficialmente a Sol, mi pareja. - dice Toto con una rubia al lado.

Fui la primera que la saludo, ella ya sabía de mi, eso me dijo. Nos acomodamos en la mesa y empezaron a servir el asado.

- Un aplauso para el asador. - grita Cali y todos aplauden y algún que otro grito cargandolo a Marcos y silvidos. Poco escandalosos son.

Cenamos entre mucha charla y risas. Nos fuimos conociendo, a algunas de las esposas ya las conocía y a otras no, las estaba conociendo ahora.

Me incomodaba que Brunella me este mirando todo el tiempo, sentía su mirada y me ponía incómoda, porque me mira tanto?.

Con Euge, Ceci, la esposa de Agus Almendra y Cande fuimos a buscar el postre, había de todo, Helado, Flan, Chocotorta, Tiramisú, etc. Una variedad de cosas había.

Llevamos todo porque no sabemos que iban a comer, así ellos elegían. Les servimos a todos, bueno a casi todos.

- Quiero ir al baño. - me dice Ova y la llevo al baño. Ella solita entra, yo la espero afuera.

- Así que vos sos Alaska. - dice Brunella apareciendo de la nada. Se me para enfrenté. - Luis es mío y siempre lo fue. Si tuviste algo con él o si te iluciono con que algo iba a pasar entre ustedes, olvídate de eso chiquita, no va a pasar nunca. - me mira con una sonrisa y se va.

La miro cómo se iba caminando y luego vuelvo a mirar para la puerta que se abre.

- Lista?. - le pregunto sonriendo.

- Sii, ahora cuando bajemos me servías helado?.

- Obvio, mi amor. - sonríe.

Agarró una compostera, le sirvo a Ova y ella se sienta al lado de Coti.

- Son re lindas. - dice Sol, mirándo a Cande y a mí. - Toto me mostró fotos de ustedes y son mucho más lindas en persona.

- Gracias, vos también lo sos, la verdad que Toto tiene buen gusto. - ella sonríe.

Nos cagamos de risa casi toda la noche, no nos queríamos ir pero ya nos tenemos que ir yendo, los chicos tenían que viajar a Córdoba.

Subo a buscar a Ova a la habitación de More, se me durmió, se canso de jugar.

Abro la puerta despacio, me acerco a la cama y me agachó.

- Ovi, vamos. - la muevo. - Gorda, dale despertate. - la muevo otra vez. - Ova. - la muevo más fuerte.

- Alaska. - me asusto el pelotudo.

- Que pasa?. - me acerco.

- No quiero que quedemos mal, podemos ser amigos?. - dice y yo miro a Ova que se movió.

- No estamos mal, Luis. Y si, podemos ser amigos. - le sonrío.

Cómo iba a ser amiga de alguien que estoy enamorada y cada vez que lo veo me enamora más pero no puedo hacer nada, si él quiere eso, así va a ser.

Me abraza, no me lo esperaba, pero lo abrazo también.

- Nos vemos dentro de un par de horas. - riemos bajito. - No sé despierta. - dice mirando a Ova.

- No, tiene el sueño re pesado.

- Es igual a vos en eso. - me mira sonríendo.

Basta Luis, no me la hagas más difícil.

- Si, es verdad. - digo y él se va.

Cuando logro despertar a Ova, bajamos y la llevo directo al auto, le pongo el cinturón y le hago una almohadita con las camperas así no se desnuca.

- La próxima es en la casa de Luis. - dice Marcos y todos se la siguen.

- Veremos. - dice Luis.

- Dale, Luisito ponete la 10. - dice Cali.

- Te lo está pidiendo en Capi titular. - dice Marcos señalando a Cali y reímos.

- Vos vendrías a ser el suplente?. - le pregunto.

- Si, y después está Frank que es mi suplente y el suplente de Frank es Toto.

- Mira vos. - digo riendo.

- Bueno pero Luisito va a poner casa la próxima. - dice volviendo al tema.

- Les aviso. - dice Luis saliendo de la casa.

- Ese les aviso ya lo conozco. - dice Exequiel y todos reímos.

La que no sonreia mucho era su novia, casi toda la noche sería estuvo.

Quedaban pocos jugadores así que nos despedimos de todos los que quedaron, me tocaba manejar a mí así que me subo y arranco viaje para casita.

Después de un rato, guardo el auto en la cochera y Candela agarra a Ova, apenas entramos la despierto así se bañaba porque estuvo jugando y estaba toda transpirada y su ropa están toda sucia de tanto jugar.

Le prendo la calefacción un ratito así no pasaba frío, igual después la apagó porque ya le da mucho calor.

Le dejo una luz prendida, apagó la otra luz y salgo de su habitación. Entro a la mía y Candela ya estaba acostada.

- Vos estás bien?. - asisto mientras me cambiaba. - No sirve mentirme, te conozco mejor que nadie. - me acuesto. - Es un pelotudo.

- Quedamos cómo amigos.

- Pero vos no queres ser su amiga. - niego.

Nos pusimos a hablar envés de dormir.

°°
Espero les guste! ♡

Poca Fe - Luis Vázquez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora