𝐒𝐄𝐂𝐎𝐍𝐃 𝐋𝐈𝐅𝐄

2

Kai corrió hasta su universidad lo mas rápido que pudo ya que era demasiado tarde. De todos los días tuvo que llegar quince minutos tarde justamente cuando era semana de exámenes. Una semana de fastidio para todos.

Este seguía corriendo por todo el campus universitario. Al momento en que vio el salón de inmediato toco la puerta y pidió disculpas por llegar tarde, teniendo todas las miradas de los alumnos en él. El profesor le advirtió que no volviera a suceder y kai asintió avergonzado mientras se acercaba hasta su asiento.

─¿Por qué llegas a esta hora? ─preguntó Jisung, su amigo.

─Mi despertador no sonó. ─susurró Kai dejando sus cosas a un lado.

─¿Y eso? ¿No la pusiste?

─No, ayer estuve revisando algunas solicitudes de trabajos por internet y no me acorde.

─Ah, cuéntame de eso mas tarde. ─susurró Jisung al recibir el examen.

El examen fue entregado y Kai agradeció que fuera fácil. En estos días había estudiado demasiado a tal punto donde ni siquiera tenia tiempo para dormir o salir. Él usualmente no estaba acostumbrado a estudiar y lo dejaba a la suerte, pero cuando entró a la universidad todo eso cambió drasticamente.

En cuanto el examen dio por terminado este lo entregó con el profesor para después salir del salón ya que la clase había finalizado. Recargo su cuerpo en la pared en espera de su amigo, inhalo y exhalo mientras se daba ánimos de que lo había hecho bien.

─Llegabas dos minutos tarde y perdías el examen ─dijo Jisung saliendo del salón para acercarse a él ─. Tuviste suerte.

─No es algo de lo que este orgulloso.

─Antes habías dicho del trabajo. ¿No te interesaría trabajar en la biblioteca de aqui?

─La paga es malísima.

─Pero la comida lo recompensa. ¿Por qué estas tan desesperado por un trabajo? Desde ayer estas asi, creí que tus padres te ayudaban con los gastos.

─Por eso mismo. Ya casi cumpliré veinticuatro y aun mis padres me ayudan...¿no debería darme vergüenza?

─No, es normal. Muchas personas desearían tener la ayuda de sus padres a tu edad. ─ambos comenzaron a caminar hasta su siguiente clase─. ¿Qué trabajos encontraste?

─Mande algunos de mis partafolios a empresas vinculadas con la universidad y ninguna me ha contactado, bueno...en realidad solo una pero no tenía nada en común. Es una academia de idiomas.

─Al menos te aceptaron en algo. ─dijo su amigo─. ¿Qué harás hoy en la noche?

─Creo que estaré estudiando o viendo alguna pelicula.

─Perfecto, me uniré contigo.

─ ¿Y eso? ─preguntó Kai confundido. No se sorprendió ya que algunas veces ambos se juntaban en la casa del mayor ya que vivía solo y a Jisung le gustaba aprovechar eso para estar lejos de sus padres.

─Mi hermano acaba de llegar de un viaje y va a quedarse en casa. No quiero tener que aguantarlo, siempre nos peleamos y mis padres se molestan diciendo que somos una familia y bla, bla. Es horrible tener que aguantarlos.

El mayor negó con la cabeza sonriente. Pero después susurro un "claro".

Kai observó la hora en su celular y notó que ya casi iba a oscurecer. El chico vive en unas pequeñas casas de bajo costo en un lindo vecindario. No eran un gran lujo pero tampoco eran tan malas. Él era muy ordenado y trataba de hacer que su hogar tuviera un toque de él para que cualquier invitado se sintiera cómodo.

Saludo a su vecino con amabilidad al llegar a su hogar. Lo que agradecia era que casi la mitad de las personas que vivían ahi estaban en su vejez y era silencioso el vecindario. Odiaría tener vecinos adolescentes que quisieran tener fiestas toda la noche o que hicieran demasiado ruido. Tan solo pensarlo le dolía la cabeza.

Este subió las escaleras y se sorprendió al ver una caja de cartón frente a su casa, probablemente alguien de paquetería lo había dejado despues de irse esta mañana. Kai se agachó para observarlo con detenimiento y la abrió sin siquiera ser delicado, arrancó la cinta a su vista hasta poder abrirla. Lo primero que pudo ver fue una hoja con algo escrito, este la tomó.

"Hola hijo, se que los exámenes podrían dejarte cansado y debes estar muy estresado. Te hice algo de comida y también te di algo de dinero. Por favor llámame en cuando te llegue esto. Te quiero mi bebe"

Era de su madre, conocía su letra. Kai sonrió y tomó la caja en manos para después levantarse y sacar las llaves de casa. Estaba apunto de abrir la puerta pero un maullido lo detuvo.

─Oh, Mimi. ¿Qué haces aquí tan tarde? ─preguntó al ver a la gatita saltando una pequeña barda y colocandose frente a el─. ¿Vienes a cenar? Dame un segundo.

Mimi era un gato callejero que siempre vagaba por el vecindario. Usualmente solo visitaba a Kai para ser alimentado y después se iba.

Él dejó la caja en la mesa y buscó la comida para el gato. Minutos después salió y le dejó la lata de comida de gatos que siempre compraba para ella. Mimi de inmediato comenzó a comer mientras que Kai se agachó para acariciarla.

─Mimi, mañana no podre alimentarte. Tengo que temprano al restaurante, es mi ultimo día. ─contó mientras acariciaba su cabecita─. Debe ser genial ser un gato, solo comes, exploras el mundo y duermes.

El gato maulló como si se quejara y siguió comiendo. Kai soltó una risa ya que le dio ternura.

─Lo siento, no debería de juzgar tu vida. Hasta los animales deben de tenerla difícil...

Sin mas dejó al gato comer sólo y se adentro a su casa para después acomodar la comida que su madre le envió. La madre de Kai vivía en un pequeño pueblo en boseong-gun. De vez en cuando le mandaba dinero y comida, aunque su hijo siempre les reclamaba que no era necesario.

Kai llamó a su madre por un rato para después meterse a bañar y esperar a que Jisung llegara. Por mientras se puso a estudiar por horas hasta que su cerebro y su energía no diera para más.

Volviendo a quedarse dormido en su escritorio.

(fotito de kai)

(fotito de Jisung)