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-¿Qué te pareció Hyung Sik? Espero te haya dado una buena primera impresión mi querido Jhon-habló altivamente su alteza mientras tomaba una caminata junto con Seokjin en los jardines del palacio luego de la cabalgata.

-Es un alfa muy amable-dio su más sincera opinión observando las rosas rojas del jardín florecer hermosamente sin poder evitar alzar una de sus manos para acariciar los pétalos de una.

Al tacto la textura del pétalo de la rosa roja le resultó sedosa, suave y al mismo tiempo delicada, su color rojo de un tono más o menos claro le parecía faltarle color, como si no estuviera completa de alguna forma.

Y mientras Seokjin tocaba los pétalos de la rosa, su alteza siguió hablando hasta que la voz grave de su alteza paró de un momento a otro y solo cuando el viento movió las hojas de los rosales a su alrededor, Seokjin supo que había cometido una falta de respeto a su alteza.

-¿Ensimismado en tus pensamientos Jhon?.preguntó su alteza con un tono amigable, muy diferente a lo que imaginó Seokjin.

-Lo siento mucho-rápidamente Seokjin caminó los pasos que lo separaban del rey-me encuentro nostálgico.

-A todos nos puede pasar-aceptó su alteza sus disculpas para luego seguir caminando con sus manos colocadas tras su espalda-el pasado suele venir en pequeños pasos. ¿Qué es lo que atormenta a mi querido Jhon?

-El pasado, el presente y futuro supongo.

Su alteza rió en carcajadas para luego levantar una de sus manos y tomar entre sus dedos una hoja de un árbol de manzanos al mismo tiempo que suspiraba-mi buen Jhon el pasado quedó atrás, el presente lo estás viviendo y el futuro es incierto, todo depende de las decisiones que tomes, lo que quiere decir que todo lo que puede suceder está en tus manos, no hay de qué preocuparse.

-Hay ocasiones en las que el futuro no es algo que se pueda controlar.

-Pero puedes decidir, siempre hay opciones Jhon y ahora quiero proponerte algo y si lo aceptas o no estaré agradecido de todas formas.

-¿Qué es lo que me quiere proponer su alteza?-preguntó Seokjin con un mal presentimiento.

-Seguramente estás al tanto de los problemas que hemos tenido con los vampiros últimamente-habló con preocupación-han habido demasiados ataques de vampiros sin aquelarre, seres hambrientos que no piensan más que en alimentarse, criaturas salvajes y peligrosas. Todos los territorios están tomando un lado Jhon.

-La posición de los cambiantes debería ser la misma-expresó Seokjin naturalmente.

-Debería, pero no es así. Somos una especie en contra de otra, pero dentro de nuestro círculo hay manadas de diferentes especies, es natural que los alfas de otras manadas quieran extender su poderío, por ello hay que hacer alianzas. Necesito proteger a mi reino y mientras más alianzas tenga más protegidos estarán.

-¿Qué es lo que planea hacer su alteza?

-Como sabrás mi hija es el tesoro más grande que tengo en todo mi reino, por ello quiero que tenga una vida feliz y su felicidad es ser libre como un ave que viaja por doquier, si la obligo a casarse voy a lastimar su alma Jhon.

-¿Qué es lo que desea de mí su alteza?-volvió a preguntar Seokjin con temor a la respuesta, sin embargo la decisión dentro de su corazón ya estaba tomada.

-Necesito que contraigan nupcias Park Hyung Sik y tú. Después de mi hija el mayor tesoro que puedo tener eres tú, nadie sabe las razones por la que te otorgué tanto poder en mi reino pero lo aceptan y por ello eres un miembro importante en la familia real, si te envió a Japón, haremos una fuerte alianza con esa parte de Asia, es una oferta que no puedo desaprovechar.

-Acepto el matrimonio-respondió Seokjin solemnemente sin embargo había un pequeño detalle aún por mencionar-no obstante tengo algo de que hablar con el alfa Park Hyung Sik, a solas si es posible.

-No te preocupes, tendrás tu tiempo a solas con mi buen amigo-aceptó su alteza la petición de Seokjin rápidamente y luego de un momento de silencio prosiguió-Jhon, te agradezco infinitamente este gesto, has salvado a mi hija de diferentes maneras y no estoy seguro de si alguna vez podré pagarte lo que has hecho por mi familia, ahora y en el pasado.

-El silencio de su alteza es más que suficiente.

Después de todo su alteza había guardado silencio respecto a su identidad, aunque en realidad no sabía quien era, su rostro nunca lo había visto y su nombre era diferente cuando se presentó y aún así no hizo ninguna pregunta y lo acogió en su reino dándole poder y autoridad, además de protección y un lugar donde quedarse.

-Quisiera saber algo más-detuvo Seokjin a su alteza que estaba pronto a retirarse-¿cómo es que no tiene una alianza la manada de leopardos con la de tigres si sus gobernantes son buenos amigos?

-La amistad no tiene nada que ver cuando se trata de negocios mi buen Jhon-respondió su alteza con una sonrisa para luego regresar por el mismo camino por que el que llegaron dejando a Seokjin en medio del jardín únicamente con sus pensamientos.

Seokjin pensando en las palabras de su alteza y en su agradecimiento y en la propuesta de matrimonio, decidió tomar asiento en una banca bajo una estructura de cristal en medio del jardín.

Las rosas resplandecían con la luz del sol y los manzanos con frutos rojos brillantes moviéndose despacio por el viento lo dejaron en blanco por un momento. Su mirada se posó en un pájaro a lo lejos, tenía plumas negras y a la luz del sol cuando las tocaba emitían un brillo verdoso azulado, luego de un momento el pájaro voló por los aires para posarse en uno de los rosales y aunque las rosas tuvieran espinas aquel pájaro se posó en medio de sus ramas para picotear algunos insectos de las flores.

Por un momento se vio a si mismo siendo aquel pájaro que aún teniendo alas para volar decidió apresarse en medio de espinas atraído por la belleza de las rosas o tal vez por lo que había a su alrededor. Tal vez estar en esta situación era su culpa, él había sido el que decidió entregar su corazón aún sabiendo que podría resultar herido.

-Su alteza me dijo que Jhon estaba esperando por mi aquí-habló Hyung Sik al llegar donde se encontraba Seokjin.

-Hay algo que debe saber antes del matrimonio Señor Park-dijo Seokjin sin voltear a mirar al alfa leopardo observando con atención al pequeño pájaro que seguía comiendo los insectos que encontraba en el rosal.

-Es extraño que me hable tan formal cuando vamos a ser esposos Jhon.

-Lo prefiero de esa manera si no le molesta.

-Haré lo que le parezca más cómodo, lo que menos quiero es incomodar.

-Estoy embarazado de mi segundo hijo y tengo un hijo mayor de quince años, ¿aún le parece bien contraer nupcias con ese inconveniente?-preguntó directamente Seokjin sin rodeos.

-Tenía el conocimiento de su primer hijo, sin embargo lo de su segundo hijo es una sorpresa-rió Hyung Sik suspirando-y ya que usted es tan directo supongo que se lo debo. Quiero ser honesto con usted Jhon así como lo es usted conmigo y la verdad es que vine a la India con el propósito de rechazar la propuesta de matrimonio de su alteza.

-Supongo que cambió de idea al estar aquí-afirmó Seokjin levantando su cuerpo para ir en dirección a un manzano cercano-Seguramente su alteza le ofreció una propuesta que no pudo rechazar, suele ser muy generoso.

-Fue usted Jhon, cambié de idea por usted.

Park Hyung Sik dijo la verdad de su corazón y al mismo tiempo el pájaro que estaba observando Seokjin pisó accidentalmente una espina, lo que provocó que saliera volando por el aire despavorido.

LUNA ESCARLATA (Namjin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora