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Los primeros días de un recién nacido por lo general suelen ser una locura total, lloran todo el tiempo, apenas se acostumbran al mundo exterior y a no estar pegados a su padre progenitor, sin embargo el bebé de Seokjin era muy diferente, demasiado, no lloraba mucho, solo cuando tenía hambre y solo dormía con Yoongi por lo que las visitas del vampiro se extendieron por mucho tiempo.

Y esta era una de esas noches en las que Yoongi estaba a un lado de la cama de Seokjin cargando en sus brazos a su hijo mientras se balanceaba de atrás hacia adelante en la mecedora mientras sacaba los gases de ese pequeño cuerpecito.

-Se durmió-dijo al fin después de casi cuarenta y cinco minutos de que Yoongi lo estuvo cargando para que se durmiera.

-Hay algo que no entiendo-quiso saber Seokjin-tú eres Soberano, Namjoon es Soberano y ambos no duermen...entonces, ¿por qué este pequeñín sí?

-No lo sé-respondió Yoongi vagamente-es extraño.

-Ok, puedes irte-pidió Seokjin sin amabilidad a Yoongi.

En realidad estaba algo dolido porque su pequeño bebé prefería la compañía de Yoongi antes que la suya. Se supone que era él el padre y no ese chupasangre y lo peor de todo es que a Yoongi parecía fascinarle. ¿Qué pasaría si este pequeñín empezaba a decirle papá a Yoongi?

-Pequeñín no puedes llevarte tan bien con Yoongi, ¿de acuerdo? Espero que lo molestes como tu hermano mayor lo hacía antes-sonrió al fin acomodándose para dormir, sin embargo no pudo hacerlo.

Desde que dio a luz a su segundo hijo ya no estaba durmiendo como antes, ya no tenía sueño, tampoco se sentía cansado, además la sed de sangre en ocasiones le parecía insoportable.

Poco a poco, Yoongi empezó a darle a beber menos de su propia sangre y empezó a beber sangre humana, la cual no tenía idea de donde la conseguía Yoongi, pero estaba agradecido porque se las llevará en pequeñas fundas para transfusiones de sangre, pese a que su paladar no era exigente con la sangre, aún así Seokjjin se negaba a beber directamente de las bolsas.

-Hola papá-susurró Jungkook entrando a su habitación con su habitual ropa deportiva de las mañanas-¿cómo amaneciste?

-¿Ya amaneció?-preguntó Seokjin al levantarse y descorrer las cortinas para ver el amanecer y sí, era cierto que el sol ya estaba saliendo por las montañas.

Los días parecían correr últimamente

-¿Cómo amaneció mi pequeño hermanito color melocotón?-quiso saber Jungkook tomando a su hermanito de la cama para dejar que su padre fuera a prepararse y ducharse-¿Papá, cuándo vas a nombrar a mi hermanito?

-¡Hoy!-gritó Seokjin desde el baño.

-¿Ya elegiste un nombre?

-Sí.

-Dime cual es, quiero llamar por su nombre a este pequeñito bollo de arroz.

-¡Es una sorpresa!

-Tu padre es un alguien muy malo bebé-dijo Jungkook a su hermanito caminando a la salida para llevarlo a la primera planta junto con la pañalera.

-¿Cómo está el pequeñito?-preguntó Hyung Sik cuando vio a Jungkook bajar de las escaleras junto con el bebé en sus brazos.

-Está muy bien, ya está despierto, ¿quieres cargarlo?

-Sí, dámelo-Hyung Sik tomó al bebé con cuidado bajo la atenta mirada de Jungkook, quien no pudo evitar emitir un bajo gruñido en su pecho-respira hondo Jungkook, no asustes al bebé.

-Lo siento.

-Hoy vas a ser nombrado pequeñín, me pregunto cómo va a ser tu nombre.

Seokjin no había querido decir el nombre que su segundo hijo llevaría a nadie, absolutamente a nadie, quería que fuera sorpresa y cuando fueron a registrar su nombre si que fue una sorpresa en especial para Hyung Sik.

LUNA ESCARLATA (Namjin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora