Leyendas Del Rockolimpo

Chismes, fiesta, juegos y varios idiotas.

Los chicos tienen aproximadamente 27 años y son unos chismosos.

...

— ¿Te enteraste? — Preguntó Corey a su esposa mientras esta se cepillaba su corto cabello por última vez antes de dormir.

— ¿Ahora de que, metiche? — Laney lo miró desde el espejo.

— ¿Por qué eres así? Yo sólo te quiero contar algo de lo que me enteré — La miró con el ceño fruncido, jalando las sábanas de la cama para poderse acostar. Luego miró brevemente a su hijo en la cuna.

— Mira Core, yo sé que estás metido en esto de que somos esposos y que debes de contarme todo pero sinceramente, si no afecta a ninguno de nosotros, mejor no quiero saber nada — Le sonrió levantándose de la silla y caminando hacía la cama para quedar de lado opuesto al hombre que ya estaba acostado.

— Pero es realmente grande, no creo que pueda contenerme de decírtelo — Habló con un puchero.

— De acuerdo, dime que pasa — Suspiró rendida acostándose y apagando la luz de la mesita de noche.

Cuando Corey no habló por unos segundos, la pelirroja pensó que simplemente había olvidado el tema y cerró los ojos para acurrucarse a su lado.

— Nick y Mina se van a divorciar —.

Laney se levantó de golpe encendiendo la luz de nuevo, ahora con una expresión de sorpresa.

— ¿¡QUÉ!? —.

Seguido del grito de Laney, el llanto del bebé en la cuna hizo que Corey se quejara.

— Ya lo había dormido — Se tomó el cabello cansado por no haber dormido en dos días.

...

Un celular comenzó a sonar en medio de una obscura habitación y una mano entre las sábanas, salió para tomarlo con un gruñido.

— ¿Qué? —.

— Kin, tenemos preguntas — La voz de Laney sonó al otro lado de la línea, lo cual desconcertó a Kin.

El hombre de lentes trató de enfocar su vista, sentándose en la cama y tomando sus lentes que estaban junto al reloj de su mesita. Se colocó los lentes para mirar la hora.

— Es la una de la mañana, ¿El bebé aún no los deja dormir? Ya le dije a Corey que lo ponga en una tina y lo... —.

— ¿Puedes dejar de insinuar un homicidio hacía nuestro hijo? No te llamé para eso — Al fondo, un llanto de bebé hizo que Kin levantara una ceja — Bueno, el bebé ya no nos dejará dormir pero como dije, no es eso —.

— Entonces, ¿Para qué es? —.

Junto a Kin, una mujer se movió y abrió un ojo para mirar a su esposo con molestia.

— ¿Quién es? — La voz de Kim se escuchó ahogada por el colchón ya que estaba boca abajo.

— Laney —.

— Mándala al carajo, mañana es la fiesta de Meredith y no pienso lidiar con niños hasta dormir lo necesario — Se movió para volver a dormir.

— Hola a Kim, también — Gruñó Laney en la otra línea — Como sea, quería saber si no has hablado con Nick en estos días —.

— ¿Con Nick? Si, ayer, ¿Por qué? —.

— ¿No te dijo algo fuera de normal? Algo que tenga que ver con Mina, tal vez —.

— No que yo recuerde, sólo hablamos de sus últimas vacaciones y sobre el cumpleaños de Meredith. Dijo que haría pastel — Se alzó de hombros mirando hacía el techo para recordar. Algo en la conversación hizo que se preocupara — ¿Pasa algo? —.