Breaking-off [Vminkook]

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Hace algunos años atrás.

—Supongo que vas de camino a tu cita con el tipo que conociste en el metro y que probablemente podría ser alguna clase de secuestrador que te tuvo en la mira durante meses — murmuró Suga, su hermano, desde lo alto de las escaleras, con aire severo.

¿Esa no había sido una descripción demasiado fatalista? Jimin rodó los ojos con exasperación, su hermano estaba volviéndose mucho más creativo de lo que fue en la cena de anoche...comenzaba a superarse.

—No es una cita — aclaró. Lo mejor era ignorar sus descabelladas especulaciones sin sentido.— Sólo voy a devolver esto — señaló la chaqueta entre sus manos.

Le había explicado esto antes aunque en realidad no habría tenido que hacerlo, pero Suga insistía obstinadamente en que se trataba de una cita y Jimin comenzaba a sentirse nervioso cada vez que pensaba de esa forma en su reunión.— No hay nada por lo que debas preocuparte.— o nada que le dé un motivo para perder la cabeza.

—Estas usando tus jeans nuevos, te peinaste diferente... te ves precioso — Suga lo miró inquisidor.

Jimin supuso que pensar que simplemente estaría satisfecho con sus respuesta evasiva era demasiado ingenuo. Estaba hablando de su extremadamente sobreprotector hermano mayor después de todo.— ¿A dónde vas a ir después de devolver eso? ¿Tienes planes?

—A una exposición en el museo nacional, te hablé de eso antes — Suga abrió la boca para hablar, obviamente todavía no estaba satisfecho, pero Jimin se le adelantó.— Si, voy a ir solo — el mayor volvió a abrir la boca, ya sabía lo que debía estar pensando.

Era dulce a su exasperante manera, pero ya no era un niño pequeño, podía cuidarse solo y encargarse de sus asuntos por sí mismo.— Y no, no tienes que acompañarme, antes dijiste que tenías planes.

El mayor frunció los labios y golpeó el suelo con el pie en un gesto extremadamente infantil. No iba a iniciar con una rabieta ¿Verdad?  Porque parecía que estaba apunto de hacerlo.

—Pero, Jimin — susurró con ojos suplicantes, similares a los de un cachorro abandonado.

Había decidido cambiar su táctica de último momento al parecer...fuera como fuera no iba a funcionar de todos modos.— Hace tiempo no pasamos tiempo juntos, soy tu hermano mayor, también necesito atención y cariño.

No respondió y siguió su camino con un suspiro. Eso probablemente no iba a terminar pronto. Sabía que su hermano no iba a dejar de insistir sin importar lo que le dijera, era ese tipo de persona y la perspectiva de que alguna vez tuviera una pareja nunca lo entusiasmaba.

También sabía que, afortunadamente, no se atrevía a seguirlo, su papá le había hecho jurarlo y nadie contradecía a su Kim SeokJin, ni siquiera su padre.

Debería estar bien si conseguía un recuerdo para él en el museo como disculpa ¿No? Entonces podría olvidar el asunto una vez el mayor se percatara de que no volvería a ver a Taehyung.

Salió. Afuera hacía tanto calor como últimamente lo había hecho en la ciudad, el termómetro no había cambiando mucho desde la última vez y fue realmente un calvario tomar el metro hasta su destino, especialmente a esa hora del día.

El verano no era su época del año favorita, no era gran fan del calor ni de la sudoración, pero, sorpresivamente, ni todo el bochorno o la molestia que supuso viajar en un medio de un transporte que lo sofocaba, arruinó su estado de ánimo.

Estaba nervioso y no quería admitirlo, pero también podría sentirse un poco entusiasmado por esa reunión.

—Hola — le saludó Taehyung, quien se encontraba sentado en la misma mesa donde se vieron por primera vez.