Pecado Número 15

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✧ Secretos ✧

Narrador Omnisciente:

Juan llevo a Rubius hasta un lugar muy alejado de la ciudad, sin embargo aún estaba dentro del territorio de Auron, era un lugar entre el inframundo y la tierra, por lo que el lugar era una combinación entre la tierra y el inframundo.

Conservaba el tiempo y la luz de la tierra, pero tenía la flora del inframundo, árboles y flores en tonos fríos, sin embargo aún tenía uno que otro tono rojo, aquellas flores y plantas emitían cierto brilló que las hacían más especiales y bonitas.

- Este lugar... Es... Hermoso - Dijo Rubius con cierto brillo en los ojos.

Juan sonrió y empezó a caminar por el lugar - Si, es un lugar bonito, nadie lo conoce, vengo aquí para calmarme y relajarme, cuando quiero desconectarme de los demás -

Rubius sonrió y también camino por los alrededores, mirando las flores con curiosidad, en el cielo no habían lugares así - No sabía que el inframundo tenía flora - Dijo mirando una flor.

Juan sonrió - Claro que lo tiene ¿Creíste que era un lugar desolado? -

Rubius soltó una risa por lo bajo - Algo así, el cielo no tiene nada parecido -

Pronto el de lentes de sentó en el suelo mientras miraba el cielo - Te ves más animado.... Un Ángel bonito como tú se ve mucho mejor con una sonrisa que con una mueca -

Cuando Rubius escucho eso le surgió un leve sonrojo en las mejillas, sacudió un poco la cabeza y de sentó a su lado - Solo por haberme dicho eso no te mataré hoy - Dijo con seguridad.

Juan soltó una risa por lo bajo - Emm ¿G-Gracias? .... Supongo -

Rubius volvió a sonreír - Pero ya enserio, gracias... Por traerme hasta aquí, debo admitir que me subiste un poco el ánimo -

- De nada - Hubo un breve silencio hasta que Juan volvió a hablar - Puedes venir a este lugar cuando quieras, podemos compartirlo -

- Gracias, me encantaría compartirlo contigo - Dijo con media sonrisa.

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Unas horas antes:

Habían pasado un par de horas desde aquel encuentro con los arcángeles, ahora todos los Demonios habían regresado al inframundo, con los ánimos un tanto bajos pues - a petición de Juan - Perxita había contado que Auron ya se había encontrado con Luzu solo que en forma de humano, eso era algo que lo había dejado en shock.

Perxita solo contó lo básico, no incluyó que Auron estaba sintiendo cierto interés por Luzu, eso fue algo que se guardo.

Al llegar todos se dispersaron, ahora solo quedaba esperar, no asesinaron a Auron y ellos no habían asesinado a ningún Ángel ¿Como iban a reaccionar los dioses? ¿Qué harían para desatar la guerra que tanto querían? Mientras esperaban una respuesta ellos se quedarían ahí, pensando las posibles respuestas.

Todo el ambiente estaba un poco tenso ¿Cómo iban a actuar? ¿Cómo iban a enfrentar a alguien a quien no podían hacerle daño? ¿En verdad iban a sacrificar a su príncipe? Los días pasaban y no tenían respuesta para ninguna de esas preguntas.

De mientras, tenían encerrado a Auron, no dejaban que volviera a poner pie fuera del inframundo, sabían que ahora mismo estaba en busca y captura, solo que ya no estaba tras él un arcángel, ahora eran todos y estaban seguros que uno que otro Ángel de bajo rango.

Sin embargo, apesar de mantener encerrado al moreno, los demás si subían, ellos debían seguir con su trabajo, tenían que estar alerta de todo, estar al tanto de todo lo que iba pasando haya arriba, para así poder proteger a Auron.

Y aún que el moreno estuvo encerrado un buen rato, llegó el día en el que se desespero y trato de escaparse, después de todo el no podía quedarse quieto mientras los demás salían a arriesgarse por él.

Así que mientras nadie lo miraba, salió del inframundo, todos estos días de encierro pensó en algo, iba a atrapar a Luzu y lo haría hablar, le sacaría toda la información que pudiera y después el mismo lo asesinaría, iba a aceptar la guerra que se vendría después de ello, pensó que era mucho más importante la libertad de todos los Demonios que su capricho de no lastimar a un Ángel como lo era Luzu.

Auron se encontraba fuera con su apariencia humana, tenía puesto un pantalón negro de mezclilla, un suéter rojo con mangas grises, tenía puesto el gorro de su suéter para ocultar su cabello y que no lo reconocieran tan fácil.

Y aún que Auron creía que debía encontrar a Luzu para atraparlo, ese día no tenía ganas de verlo, primero quería sentir de nuevo el aire del mundo humano, solo quería volver a salir, quería terminar de prepararse mentalmente para poder asesinar al castaño.

Caminó por todas aquellas calles que alguna vez cruzó con Luzu, fue solo una coincidencia, sus piernas lo habían llevado por esos lugares y no terminaba de entender el por qué, algo le decía que sus instintos aun buscaban a Luzu y no se equivocaba.

La noche caía, la ciudad de iluminaba de luces de muchos colores, era un paisaje hermoso, sin embargo a ojos de Auron era algo nostálgico y triste; Él moreno camino un poco más hasta llegar hasta el bosque en el que alguna vez estuvo con Luzu, soltó un suspiro, tal vez estar en su lugar seguro lo ayudaría a calmar su mente.

Por lo que entró al bosque, camino un par de minutos, hasta que llego a su lugar seguro, el último lugar en el que estuvo con Luzu, Auron soltó un suspiro y tras patear una piedra escucho un quejido.

Al moreno le tomo eso por sorpresa, pues nadie más que él y Luzu conocían ese lugar, se acercó hasta unos arbustos, el lugar donde surgió el ruido y al llegar se encontró con cierto castaño quien tapaba su boca, estaba tratando de no hacer ruidos.

- ¿Luzu? ¿Qué haces ahí escondido... Con la boca tapada? - Pronto le surgieron un par de malos pensamientos al moreno.

Luzu se dio cuenta de lo que Auron pensaba y se apresuró a desmentirlo - ¡No estoy haciendo nada pervertido! Solo trato de ocultarme de ti - Dijo casi gritando con un sonrojo en las mejillas.

Auron pensó que seguir molestándolo sería divertido - Si, claro, solo siento tristeza por las pobres plantas del alrededor -

Luzu aún mas sonrojado volvió a negarlo - ¡Qué no estoy haciendo nada! - Dio un paso hacia delante para salir de los arbustos, sin embargo al hacerlo con rapidez este dio un mal paso, ocasionando que esté se cayera.

Auron noto eso y trato de evitar que Luzu cayera, tomo su brazo, sin embargo el peso le ganó, ambos cayeron sobre el pasto, por suerte, Auron pudo servirle de colchón a Luzu, pues el castaño cayó encima de este.

Una vez en el suelo, no paso ni un par de segundos cuando Luzu noto que estaba arriba de Auron, miro hacia arriba encontrándose con la mirada del moreno de perforaciones, si el castaño tenía un gran sonrojó, este empeoró al encontrarse en esa situación.

- ¡Lo siento! - Dijo mientras se levantaba con rapidez, aún bajo la mirada del moreno.

Auron también se levantó y se quedó sentado en el pasto - No .... Te preocupes por eso -

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N.T:

Seeee cortemos el capítulo hasta aquí xd xd la conversación de ese par en el siguiente capítulo xd xd uwu

Ángeles & Demonios || Luzuplay ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora