Ángeles & Demonios || Luzuplay ||

Pecado Número 23

✧ Te tienes que entregar ✧

Narrador Omnisciente:

Antes de que Rubius llegará nuevamente al palacio en donde vivían, Luzu se encontraba en su habitación, releyendo la historia sobre aquel ángel que se había enamorado de un humano y por un Demonio "peco", pues pensaba que si lo volvía a leer entendería un par de cosas, sin embargo cada vez que lo leía le surgían nuevas dudas.

Tras leerlo un par de veces más dejo el libro sobre la cama y mientras hacia su cabello hacia atrás soltaba un suspiro lleno de frustración - No lo entiendo, pensé que si buscaba en el pasado encontraría una manera de evitar está guerra, lo único que encuentro son incógnitas - Después de hacer eso tomo su cabeza, sacudió su cabello y soltó un grito.

- ¡Joder, si tan solo el ángel hubiera entregado al demonio nada de eso hubiera pasado! - Una vez dijo eso, la frase que Nia le dijo tomo un poco de sentido en su cabeza - El que no conoce su historia está condenado a repetirla - El castaño hizo una pausa para ver su teléfono, el cual había recibido una notificación de Auron.

Luzu tomo el celular con ambas manos, miro la notificación, era un mensaje del demonio, quien le decía que no se estresara, que tomara un breve descanso y después siguiera con la investigación, el de ojos azules miro un par de segundos más el mensaje mientras tragaba en seco, antes de que escribiera su respuesta, su puerta había sido abierta.

- ¿Luzu? ¿Se encuentra bien? - Lo llamaba un ángel de bajo rango.

Pronto el castaño bloqueó el teléfono y lo guardo, tratando de aparentar estar calmado le contesto - Claro que estoy bien ¿Por qué la pregunta? Es más ¿Por qué no tocas antes de entrar? -

El ángel quien aún estaba tras la puerta ocultandose se disculpó - Lo siento mucho, es solo que estuve llamando a la puerta un par de minutos y no recibí respuesta, solo estaba algo preocupado - Hablo con timidez.

El castaño soltó un suspiro y alzó una ceja - ¿Y bien, que necesitas? -

- Los dioses están llamando a los arcángeles, es una reunión de último minuto -

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- ¿Reunión de último minuto? - Pregunto aquel arcángel de ojos verdes esmeralda.

El ángel encargado de dar el mensaje asintió con la cabeza - Sí, los dioses requieren la presencia de todos los arcángeles, hasta la suya mi señor -

Aquel arcángel de cabellos negros soltó una gran risa - Diles que si quieren decirme algo ellos pueden contactarme personalmente, no iré a ninguna junta -

El ángel frente a él sacudió la cabeza en forma de negativa y con un tono algo débil replicó - Pero ... Los dioses los quieren a todos reunidos -

Una vez más el arcángel se negó - Aún que yo asista, no van a estar todos los arcángeles, va a faltar uno -

- ¿Faltará uno? ¿De quién se trata? -

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- ¿Y Rubius? - Pregunto el castaño quien había llegado a la sala de reuniones hace unos minutos.

Nia quien acababa de llegar puso sus manos tras la nuca - No lo sé, también falta Staxx y se supone que esto es una reunión para todos los arcángeles, de haber sabido no habría venido - Termino de hablar con cansancio.

Los dioses no tardaron en llegar, nada más se hicieron presentes, explicaron que Staxx no iría pues estaba ocupado con una misión especial y a Rubius nadie lo podía encontrar, por lo que le pasarían el mensaje en cuanto llegará, fue así que la junta se haría con ellos dos nada más.