Ángeles & Demonios || Luzuplay ||

Plegaria Número 32

✧ Malchik Gay✧

Narrador Omnisciente:

Tras ponerle el collar anulador a ambos ángeles, los llevaron hasta una habitación donde los encerraron, dejando así solos a los demonios, teniendo al fin privacidad se decidieron por fin tomar una decisión sobre esta situación, era algo complicado pues en aquella sala existían un par de demonios que sus sentimientos hacían que no pensaran con claridad, su corazón les gritaba que debían confiar en aquellos arcángeles, pero su mente les decía que hicieran lo contrario, desconfiar era el camino correcto ¿Qué debían hacer entonces?.

- Es fácil, los ejecutamos, no podemos dejarlos libres, si son espías dirán que este es nuestro castillo, seguro mañana tendremos a un ejercito de ángeles en la puerta - Comento el de cabellos largos y pecas.

Perxita se cruzo de brazos - Primero les sacaría algo de información, ellos deben saber algo sobre la desaparición de Willy, no sabemos si es que esta muerto -

Ambos pelirrojos voltearon a ver a su príncipe, tratando de buscar su aprobación o si quiera algún comentario sobre lo que estaban proponiendo, sin embargo Auron bajo la mirada, no solo tenía un conflicto interno, que no lo dejaba pensar bien, si no que también estaba pensando sobre lo último que Luzu le dijo "Haría lo que fuera por volver a obtener tu confianza", era todo tan confuso.

- Yo no creo que debamos hacer eso, creo que debemos confiar en ellos - Dijo Ari.

Pronto Lolito frunció el ceño - ¿Estas loca? Si hacemos eso corremos peligro, que todos los ángeles son unos manipuladores -

Ari apretó la mandíbula, eso no era cierto, ella sabía que existían unos cuantos ángeles los cuales habían abierto los ojos y estaban en contra de lo que los dioses dictaban y aun que ella estaba dispuesta en defenderlos, un demonio de gafas le gano.

- No todos los ángeles son así, existen algunos que ... son buenos -

El de pecas lo miro con una ceja arriba - ¿Cómo puedes decir eso cuando hace un rato estabas a punto de atacarlos -

Juan soltó un suspiro por lo bajo - Y aun estoy dispuesto a atacarlos si creo que es lo correcto, pero también creo que lo que dicen es verdad, ellos en verdad quieren cambiar de bando, quieren conspirar en contra de sus creadores.. por eso propongo el aceptarlos pero con precauciones -

Perxita lo miro con atención - ¿Qué precauciones propones? -

- Primero que nada, que tengan el collar en todo momento, así no podrán usar su magia, también tenerlos vigilados 24/7, prohibirles un par de zonas importantes - En número con los dedos.

- Además, contamos con la visión de Ari, si algo malo fuera a pasar en torno a ellos entonces lo sabremos antes - Agrego Biyin.

Perxita veía ambas opciones factibles, el problema aquí era la decisión de Auron, la última palabra la tenía él ¿Qué es lo que harían? La pregunta salió de sus labios tan pronto la pensó, llamando así la atención del moreno, este solo alzo una ceja y les dio una mirada a todos.

Auron estaba en conflicto, en ese estado no podría dar una solución parcial, pensando en la completa seguridad de su reino, sin embargo tampoco era como pudiera pedir tiempo para analizarlo a profundidad, la decisión la tenia que dar aquí y ahora, así que lo hizo eligió una de las dos opciones - Los dejaremos aquí, les asignaremos una habitación especial en donde los podamos vigilar y confiaremos en las visiones que Ari tiene - Dijo por fin.

Había tomado aquella decisión con la finalidad de tener un poco mas de tiempo con Luzu, para tratar de entenderlo, aclarar esas dudas que tenía, ya no solo en cuestión de la guerra, si no también entorno a la relación que ambos tenían, claro que el solo dijo que era una estrategia, así si llegaban a negociar podían usarlos de rehenes o incluso sacarles información sobre los demás ángeles y las debilidades de Staxx.