Tus mentiras

Capítulo 14: Culpa

Estaba de camino al despacho de Kakashi-sensei. Esa tarde era gris y muy fría, mis dedos dentro de los bolsillos de mi gruesa chaqueta estaban entumecidos. Maldije por lo bajo, y dejé escapar un suspiro, deseaba volver al laboratorio del hospital, por fin era parte de un extraño caso pero debía acudir a esta entrevista, después de todo era un llamado de su majestad el Hokage.

El edificio lucia igual desde que recuerdo. Tres pisos con forma cilíndrica en color rojo y arriba en el centro el kanji del Fuego. En la parte superior se ubicaba la terraza que daba vista a toda la aldea. A los laterales de la estructura principal se observaban unas pequeñas edificaciones, extensiones de la principal. Detrás de todo se alzaba el Monumento Hokage, que se representaba por rostros tallados de los antiguos y del actual Hokage. Otee impertérrita el inanimado rostro de mi antiguo sensei esculpido en el extremo derecho, a un lado del rostro de mi maestra Tsunade-sama.

Entre y comencé mi camino escaleras arribas hasta la oficina del Hokage. Toque la puerta con mis nudillos y la voz de Kakashi-sensei me invito a entrar.

—Buenos días Sakura-chan. —Kakashi estaba detrás de su escritorio y sobre este tres montañas de papeles le ocultaban medio rostro, esa era la inequívoca imagen de un Kage, siempre rodeados de documentos. Fruncí el ceño al recordar que él, aquel mentiroso también era un Kage. —Sé que no estas feliz de estar aquí, pero ese entrecejo fruncido creo que un poco exagerado.

Yo volví a la realidad y alise las expresiones de mi cara. —Buenos días Kakashi-sen... —me detuve a mitad del honorifico he hice una reverencia. —Kakashi-sama.

—Kakashi-sensei por favor —él se levantó de su asiento y observe que llevaba la túnica blanca del Kage—. Aun si estas enojada conmigo, por favor, llámame Kakashi-sensei. El sama en vez de aumentar el impacto parece disminuirlo. Al menos si lo escucho salir de tu boca o la de alguno de los integrantes del equipo 7.

El equipo siete era en un comienzo nuestro número, Sasuke, Naruto y yo. Luego de que el primero desapareciera Sai se unió a nuestra escuela y lleno el puesto vacío en nuestro equipo. Fueron muchas las peleas que debatimos Naruto y yo contra el artista, en una ocasión lo golpee de tal modo que hasta el sol de hoy me sigue doliendo la mano.

—Está bien, lo haré —acepté la petición del hombre.

—Gracias —sus ojos expresaron agradecimiento, y su boca se curveo detrás de la máscara en una sonrisa. —Por favor siéntate, y disculpa el desorden. —Yo obedecí y él me entrego unas diez páginas dentro de una carpeta—. Sakura el documento en tus manos es un convenio en el que las cinco naciones hemos estado trabajando duramente. Tenemos un acuerdo de compartir métodos en diferentes ámbitos, algunos en la parte de educación, otros en la de ingeniería, arquitectura, biología y por supuesto medicina. Hay muchos motivos por el cual hacer esto, pero los dos más relevante son fortalecer nuestros lazos y aprender mutuamente. Estoy convencido que esto puede ser el principio de una era sin guerras, donde logremos sentarnos a dialogar.

—Suena como un bonito sueño —yo leía los documentos rápidamente. — ¿Cree que las otras naciones serán tan abiertas como usted Kakashi-sensei? ¿No cree que este convenio podría usarse para motivo de espionaje?

—Claro. Todas las posibilidades están abiertas. Nunca descarto el riesgo de ser traicionado. Pero Sakura-chan si vivimos en suspicacia no avanzaremos. ¿Si me niego a abrir la puerta cómo sabré si las demás naciones realmente piensan en el bienestar de un convenio que beneficie a ambas partes? —una fracción de sus palabras me punzaban en un costado, él no solamente hablaba de la villa sino de mi actual circunstancia. —Veo que terminaste de leer. Para resumir todo lo indicado en el informe, se han escogido estudiantes de diferentes años más algunos profesores, para ser enviados a seminarios impartidos en las cinco naciones. —Mi ceño se volvió a fruncir. —Por favor no me veas así. No te enviare a Suna. Tsunade-sama te ha sugerido para ser enviada a la Aldea de la Roca y luego a la Aldea de la Lluvia.