[Capitulo 54] "Horizonte"

3K 206 24
                                    

Pov. Calle.

—————⋋✿ —✿⋌—————

Mi querida Daniela,


En esta carta, me gustaría explicarte algunas cosas que seguramente te estás preguntando ahora.

Lo primero y antes de cualquier cosa, quiero que sepas que jamás dejé de pensar en ti. Cada día de mi vida he rezado porque crecieras bien, porque fueras feliz y dentro de todo fueras muy fuerte y valiente.

Lamento mucho haber estado ausente en tu vida y sé muy bien que no fue fácil crecer sola y en esa casa llena dolor, pero por favor entiéndeme. Tu hermana estaba indefensa y yo necesitaba protegerla. 

Cuando ella nació, su madre quedó muy mal por el abandono. Tu padre, no supo de ella hasta que después de dos años me animé a contárselo en una carta y tu abuelo la encontró. Me amenazó con desaparecerla si seguía interviniendo así que no me quedó más opción que protegerla con mi propia vida y ocultarnos de tal manera que él no pudiera hallarnos hasta que tuviera fuerzas para defenderse por si misma.

Algunos años después me enteré de tu nacimiento y el corazón se me llenó de alegría. Rogué porque tú caso fuera diferente, pero cuando me dijeron que regresaron a Londres, supe que no sería así.

En ese momento no pude hacer nada más que empezar a forjar un fondo en el que tanto tu hermana como tú pudieran sostenerse en el futuro. Sé que no es mucho pero al menos podrá ayudarte por un tiempo.

Espero que alguna vez puedan perdonarme por demorarme tanto en presentarlas. Tenía miedo que ambas sufrieran de más si lo hacía en el momento incorrecto.

Juliana es un ser maravilloso con una increíble capacidad de amar y estoy segura que tú también, sé que ella cuidará bien de ti. Y aún sin derecho a pedirte nada, te ruego que cuides de ella también por favor.

Ahora que no estoy, solo se tienen la una a la otra.

Te quiere, tu abuela

—————⋋✿ —✿⋌—————

Una semana después aún me costaba procesar todo. Esa carta de la abuela aunque escueta, explicaba muchas cosas. No podía culparla por huir lejos, menos si la razón de hacerlo era proteger a mi hermana.

Sí, yo había crecido sola. Pero al menos tuve la protección de una casa y un nombre con el que nadie podía hacerme daño. Claro, nadie más que mi propia familia. Pero ella... Ella sin la abuela hubiera crecido en un orfanato, con muchas carencias y el dolor de un abandono completo.

Lo único que le envidiaba un poquito era el haber disfrutado del amor de la abuela. Un amor que yo nunca conocí ni podré conocer. Pero gracias eso, estábamos juntas. Y como bien dice la carta, solo nos teníamos la una a la otra.

Juliana en tan poquitos días me había demostrado que en verdad estaba dispuesta a quererme. A aceptarme y a cuidarme. En una semana había logrado que bajara todas las barreras con ella y me abriera a tal punto de reconocer mis propios fantasmas.

Era como si nos conociéramos de toda la vida. Como si siempre hubiese estado ahí conmigo siendo mi cómplice y mi compañera, ganándose mi alma y corazón.

Nunca te dije adiós 🌙 [Caché]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora