Nunca te dije adiós 🌙 [Caché]

[Epílogo] "Adiós Londres"

Pov. Calle.
Londres - Inglaterra

2 semanas después...

ꟷBien esa es la última caja ꟷanuncia Poché soltando la cinta adhesiva y sonrío.

Su carita estaba llena de polvo y con su cabello sujetado en una trenza con una pañoleta, era la viva imagen de lo que se esperaba de una mudanza.

Ella me mira y luego se estudia a si misma ꟷ¿Tengo algo?

Asiento y avanzo a su lado solo para acunar su rostro en mis manos y plantarle un besito suave.

ꟷTienes que te ves preciosa ꟷdigo y ella me pone los ojos en blanco.

ꟷPor Dios, mi vida. Estoy hecha un desastre, toda sudada y llena de cosas.

ꟷUshh entonces que dirás de mi ꟷme burlo mirándome también. Mi overol de mezclilla estaba asqueroso y no me quería ver el pelo.

ꟷAmor, tú puedes ponerte hasta una bolsa de basura y seguirías siendo la mujer más impresionante del mundo ꟷresponde poniendo los ojos en blanco.

ꟷay por Dios... Poché ꟷsonrio mientras siento las mejillas quemarme ligeramente y niego con la cabezaꟷ lo dices solo porque me amas.

ꟷ Sí, te amo. Pero no estoy ciega, mujer ꟷme responde firme acercándose y poniéndose de puntitas para darme un pico fuerte para luego volver a ordenar las demás cajas que teníamos amontonadas por la sala.

Hoy sería nuestra última noche aquí y debíamos dejar todo desocupado. Yo por suerte no tenía muchas cosas, pero me tocó ayudar a mi novia a organizar lo suyo.

Estábamos agotadas, pero felices de comenzar una nueva vida en un lugar más libre. Sabía que sería como comenzar desde cero otra vez, pero no me importa. Ya lo había hecho una vez y lo haría las veces que fueran necesarias.

ꟷAmor, por cierto. Encontré tu carta de aceptación. Ya la guardé en mi maleta con los documentos importantes ꟷle aviso y ella me mira aliviada.

ꟷPor eso te amo ¿Dónde estaba?

ꟷDebajo del mueble este de la sala ꟷle indico un repostero del centro y ella asiente.

ꟷseguro se cayó por detrás y no nos dimos cuenta ꟷsonríe y yo asiento.

Esa carta de aceptación era la puerta más importante que se le pudiera haber abierto a alguien que quiera dedicarse a la danza. Eran tres semanas de entrenamiento en Juilliard para coreógrafos de todo el mundo y después del centenario, la habían elegido a ella.

Y aunque debido a eso tuvimos que cambiar un poco nuestro plan inicial, Yo estaba que no podía más del orgullo.

ꟷnecesito una ducha ꟷse queja ella y sonrío de lado.

ꟷVe mientras yo preparo la comida ꟷle digo y ella me sonríe de regreso, acercándose para darme un besito rápido y yo me voy a la cocina.

No había mucho. A decir verdad casi nada ya que no habíamos visto necesario hacer más compras. Solo una solitaria caja de macarrones y un par de vasitos con condimento.

Sonrío, tomando la caja y recuerdo la primera vez que estuve en este pequeño, pero acogedor departamento. Estaba muerta de miedo y aún así todo había resultado bien.

Sin saberlo, ese momento se convirtió en el desicivo para estar donde estoy ahora. Si no me hubiera dejado llevar ahí, quién sabe dónde y cómo estaría.

Pongo el agua a hervir y cocino la pasta, mientras me lavo las manos y la cara. Estaba también muy sudada y necesitaba una ducha.

Ver el departamento vacio, me causaba cierta nostalgia. En estos meses lo habíamos ido llenando con recuerdos nuestros, fotos que ahora estaban acomodadas en nuestras maletas y una que otra chuchería que habíamos ido guardando como recuerdo de nuestras citas no citas.