Capitulo 8 - Piernas Largas

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ALESSA

Le escribo un rápido mensaje a Víctor para avisarle que llegare tarde, ya que Mario quiere aprovechar y pasar a visitar un colega con el cual tiene una reunión pendiente y me ha dejado a mi en el área de espera del edificio casi por tres horas. Espero la respuesta de Vic pero no recibo ninguna, en ese momento veo a Mario salir de la oficina y despedirse alegremente de una mujer alta, casi tan alta como el, es super elegante, con solo verla sabes que va a los locales mas costosos para conseguir su ropa y zapatos, le da un beso casi tan cerca de la boca que tengo que voltear a otro lado para no presenciar aquel show, a que se la folla, y estoy casi segura de que mientras yo estaba esperando como estúpida sentada en aquel lugar esos dos estaban follando, Mario se estaba follando a esa piernas largas y ese pensamiento me lleno de enojo.

—Nos vemos pronto Di Tello

Le dice aquella chica a Mario con su voz sensual, mientras yo al mismo tiempo paso al lado de ellos para dirigirme al ascensor, escucho los pasos de Mario detrás de mi, la sangre me esta hirviendo, pero no se si es a causa de que Víctor no responda mi mensaje, la espera por tres horas o presenciar descaradamente la sexualidad entre mi jefe y aquella piernas largas, lo mas seguro es que este enojada por los tres motivos al mismo tiempo. 

—Ya iremos a la oficina, es todo por hoy. 

Solo le doy un asentimiento con la cabeza, tratando de mantener la calma, porque donde abra la boca se que puedo decir cosas de las cuales después me arrepienta. Luego de unos minutos y bajar desde el piso cincuenta estamos los dos dentro del Tesla y lastimosamente no puedo reprimirlo mas.

—La próxima vez que decidas dejarme a mi tirada por tres horas mientras te follas a una mujer créeme que tomare las llaves de tu auto y te dejare ahí regado Mario Di Tello.

Mario voltea sin entender lo que acabo de decir, veo su cara de sorpresa, pasa a tener ganas de reírse pero cambia rápidamente a un semblante serio.

—¿Y que te hace pensar que me la estoy follando Alessa? Recuerda que soy tu jefe ¿Acaso crees que puedes venir a reclamarme si te dejo esperando o no? Tienes que esperarme así te deje diez malditas horas en un lugar, si estas conmigo esperas y punto.— Ahora si fue la gota que rebaso el vaso.

—¡No soy tu asistente Mario!— Dije con un tono de voz mas alto del que esperaba, estaba cabreada. —Se perfectamente que eres mi jefe y si es algo respecto a un proyecto no tengo ningún puto problema en quedarme sin dormir si es posible, pero yo no era parte de esa reunión que tuviste y me dejaste ahí por casi tres horas sin ni siquiera decirme que ibas a demorar tanto, ¿tengo una vida sabes? y me hubiera gustado mejor aprovechar el tiempo en la oficina en lugar de estar ahí sentada y que se me durmiera el trasero de tanto esperar.

—No vuelvas a subirme la voz.— Se limito Mario a decirme, mirándome con cara seria. 

A partir de ahí hubo un silencio sepulcral, lo cual fue un alivio, porque no tenia las ganas ni la energía para seguir discutiendo y mucho menos con mi jefe en el segundo día de trabajo. 

Después de una hora ya estamos llegando a la ciudad, esta vez tomamos una ruta diferente y vamos entrando por la calle de la clínica veterinaria donde trabaja Víctor.

—Me voy a quedar en esa clínica veterinaria, me dejas ahí por favor. 

—Se supone que vamos a la oficina, ¿Qué piensas hacer ahí?

—Ahí trabaja Víctor, esperare a que salga de su turno para irme con el a casa. 

No me responde pero puedo notar como baja la velocidad para estacionarse un poco antes de la clínica y así bajarme de su auto tranquilamente. 

—Gracias y disculpa haberte subido la voz. 

Volteo mi vista para mirarlo porque Mario no me responde y veo que se acerca al volante intentado visualizar algo que esta enfrente, cuando llevo mi vista hacia la misma dirección que Mario me quedo helada y empieza a acelerarse mi corazón, es Víctor entrando a su auto con una chica. 

—Cierra la puerta.— Me indica Mario pero no soy capaz de mover ni un solo musculo. 

Puedo sentir como Mario se mueve sobre mi para cerrar la puerta con su mano derecha, pone el auto en marcha y cuando estamos mas cerca veo a Víctor besándose apasionadamente con esa chica, siento un frio en el cuerpo y solo escucho a Mario hablar a lo lejos.

—Ese imbécil hijo de puta.

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Te agradezco muchísimo que pases por acá para leer mi historia, espero que disfrutes cada uno de los capítulos

😢😢😢¿Qué opinas de lo que hizo Víctor?😢😢😢

😋😋😋¿Y que opinas de lo que hizo Mario el caliente? Haciendo que a Alessa se le durmiera el trasero de tanto esperar😋😋😋

Besos 😘 nos vemos en el siguiente capítulo.

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