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10 minutos después de la llamada de Chris, tenia un coche rojo con los cristales tintados parado frente a mí.

No le presté atención puesto que no veia a la persona que había dentro.

Bajé la vista a mi móvil sin hacer caso al coche y escuché a alguien hablar.

- Buenas tardes bella, estoy buscando a una chica rubia, muy linda, de ojos color cielo. No sé si usted la ha visto por aquí.

Levante la mirada sonriendo y me encontre la imagen más sexy que han visto mis ojos a día de hoy.
Un Christopher Vélez dentro del coche rojo, vestido todo de negro con unas gafas de sol oscuras bajadas a la punta de su nariz mirándome risueño.

Me quede embobada mirandolo hasta que decidí seguirle el juego.

- No, no he visto a ninguna chica con esas característica. No he visto a ninguna chica linda por aquí. Rubia si, linda no lo sé.- dije sonriendo.

- vamos, no seas payasa y sube .- dijo riendo.

Subí al coche y antes de ponerme el cinturón Chris se acercó a mi y me saludó con un beso en la mejilla.
Con el mi cuerpo no reaccionaba.

- Hola bella.- me quedé mirándolo, tenia algo que hacia que no pudiera apartar la mirada de el.

- Hola bello.- saludé sin quitar la sonrisa de mi cara.- donde me vas a llevar? - pregunté cómo niña pequeña

Y ahí otra vez su risa que me encanta, no puede ser que alguien se enamore de la risa de una persona. ¿O si?

Puso el coche en marca sin dejar de reír y me dio una mirada rápida que me hizo sonreír como tonta.

- a comer. ¿No tenías hambre?

- uff, no sabes cuánta, llevo desde las 10 de la mañana en ese estudio metida. Sin comer desde ayer porque según Kevin mi tripa se tiene que ver "bien". Odio eso de que las mujeres tienen que salir perfectas en las fotos

- Es algo que yo tampoco nunca entenderé. La mujer es perfecta tal cual es, no tiene que hacer sacrificios para verse bonita.

- bueno, gracias por la parte que me toca,- dije mirándolo con una sonrisa.

- de que era la sesión de fotos?- preguntó curioso.

- de trajes de baño.- conteste levantando los hombros, quitándole importancia.

Se quedó mirándome fijo cuando llegamos a un semáforo en rojo.

- Que pasa Chris?.- pregunté dudosa.

- yo quiero ver esas fotos, soy un chico muy curioso sabes?.

- ah sí? Cómo de curioso si se puede saber? .

- pues mucho, muchísimo más si es algo que me encanta.- me quedé mirándolo con una ceja levantada, sin entender que había querido decir.

- me gustas tú y me gustan los trajes de baño, es la combinación perfecta.- la luz del semáforo se puso verde y miro al frente para continuar conduciendo.

Creo que nadie nunca ha conseguido que tenga tantos sonrojos en un día.

Desde que conozco a este chico hace que mi barriga parezca que tenga un zoológico dentro.
Nunca he tenido esta sensación con nadie.
Tengo 22 años y es el primer chico que causa esto en mi.

Aparté la vista de el y miré por la ventana, mirando los edificios con una sonrisa en la cara.
Su cercanía me ponía nerviosa, que me diga esas cosas me ponía nerviosa, pero no podía evitar sonreír cuando estaba con el.

Mi cabeza iba a explotar en cualquier momento, miles de cosas pasaban por mi mente en esos momentos.

El no puede ser como los hombre que decía mi madre.

Estando a su lado empiezo a cuestionarme muchas de las cosas que metieron en mi mente desde pequeña.
Se que mi madre lo ha hecho por un motivo y por protegerme.
No conozco mucho a Chris pero por lo que veo, puedo saber que no es igual a ese señor que nos jodió la vida.

Fuimos en silencio el resto del camino, un silencio cómodo. De vez en cuando cantaba alguna canción que salia en la radio y me sentia bien a su lado.

10 minutos después llegamos a un McDonald's. No mintió cuando dijo que me traería a uno y eso me encanta, comes mucho y por un buen precio.
Se podría decir que una hamburguesa con patatas, refresco y un helado es mi comida favorita.

Entramos a McDonald's en silencio, ninguno había dicho nada desde que dijo que le gustaba.

Íbamos acercándonos al mostrador a pedir , pero se paró en seco y se quedó mirandome.

- ¿Que quieres comer? Yo invito.-

- No Chris yo te dije que tenía hambre yo invito. Tú me has traído, yo pago.-

- Mía, no seas cabezona, o me dices lo que quieres o pido por ti lo que se me antoje y si después no te gusta no te quejes.- me miraba de brazos cruzados esperando mi respuesta.

No puedo decirle que no cuando me mira así.

- No tengo problema, lo que sea, pero que sea grande con patatas y refresco.- le dije riéndome

- creo que cada vez me gustas más.- hablo mientras caminaba de espaldas a mi, para pedir la comida.

Me quede de pie en el mismo lugar, mirándolo como tonta.
No puede decir esas cosas y esperar que mi cuerpo no reaccione de ninguna manera.

Cuando quise darme cuenta lo tenia frente a mi con el ticket de compra en la mano guardando su cartera en el bolsillo trasero de su pantalón.

- Vamos a sentarnos, lo llevan a la mesa.-

Nos sentamos en una mesa al fondo, lejos de las ventanas.

Aunque aquí en Miami puede ir más tranquilo porque no lo persiguen tanto las fans, siempre es bueno prevenir cualquier inconveniente y que no salga mañana en la prensa como la nueva conquista de un integrante de CNCO.

Una vez sentados se quedó mirandome fijamente sin decir nada, al igual que hizo en el coche

- ¿Que pasa Chris? Me pones nerviosa cuando me miras asi.- dije agachando la mirada.

- ¿Puedo ser totalmente sincero contigo?.- su mirada era seria.

- por supuesto, es lo que más deseo, me gusta que le gente sea sincera.-

- a ver cómo empiezo sin que parezca que estoy loco.-

- eso está difícil, pero continua, porfavor.- dije riéndo

- Mía esto es serio.

- perdón, perdón, continua, porfavor.-

- El otro día cuando te vi en el aeropuerto, me llamaste muchísimo la atención. Te estuve mirando desde que recogiste tus maletas, nose a quien buscabas porque mirabas como buscando a alguien y te fuiste sola. Después en la calle esperando al taxi te paso igual, seguías buscando a alguien. Me llamaron por teléfono y ya no me di cuenta que pasó, justo cuando te volví a ver ya estabas por subirte al taxi y fue ahí cuando me miraste y sentí algo que te juro que no se que es.

-No querrías saber que estaba buscando.- hablé con una sonrisa tonta

- Luego me dices lo que es porque de verdad que sí quiero saberlo.- y ahí su pequeña sonrisa otra vez- De ahí fuimos directos a las oficinas de Sonymusic, una reunión para hablarnos sobre el casting de las modelos para el vídeo. Nos mostraros las fotos de las chicas por si teníamos alguna preferencia y .. ahí estaba tu foto. Te juro que no fue mi intención pero Erick la vio y fue el quien dijo que te quería a ti de modelo. Erick se dio cuenta de lo que me pasó en el aeropuerto y para acercarme a ti finjimos grabar para Instagram.

Mi cara era de sorpresa total, no sabía que decirle, eso sí no me lo esperaba.
Ahora entiendo porque decia que era un asunto serio.
No me gusta que me den un trabajo así.

Justo nos trajeron la comida en ese momento y preferí esperar a que la chica se fuera para contestar pero paso algo que no me hizo gracia.
Esa chica se quedó mirándolo con una sonrisa coqueta, como si yo no estuviera ahí, no se iba y me estaba molestando.

La Chica Del Aeropuerto - C.V  | Corrigiendo |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora