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Me abrazó por la cintura poniendo su cabeza en mi pecho, la rodee con mi brazo y la pegue más a mi.

- Amor estoy cansada de dramas hoy.- suspiro escondiendo la cabeza en mi cuello.

- Es normal, llevamos un día de locos. El cumpleaños más completo de la historia- dije riendo, acariciando su espalda

Nos quedamos un rato así sin hablar.
Ella con su nariz en mi cuello y yo acarciando su espalda con una mano y la otra acariciando el brazo que tenía sobre mí abdomen abrazándome.

Siempre hace lo mismo, cuando está nerviosa, estresada o cansada, pone su cabeza ahí y se relaja oliendo mi cuello.

Podría pasar horas así con ella, me siento en paz, tranquilo, no necesito nada más.

- Amor.

- Uhmn.- contesto sin moverse de mi cuello

- Nunca te he visto hablar ni reaccionar como lo has hecho con Ali, dabas miedo- dije riéndome.

Movió un poco su cara para poder hablar bien, apoyando su mejilla en mi clavícula , mirando al frente.

- siempre intento controlarme Chris, poca gente conoce ese lado mío. cuando me enfado mucho no controlo los actos y eso no sería bueno para nadie. Solo una vez en mi vida he perdido el control y no quiero que vuelva a pasar. Por desgracia Ali hoy me ha dicho muchas cosas y si sumamos todo lo que llevamos hoy pues... No he podido más amor, si no apareces no se que hubiera pasado, creo que ella quería provocarme y lo estaba consiguiendo.

- La verdad si parecía que quería provocarte. Su nariz te va a recordar por dias. No quiero verte nunca así, capaz y me pegas y todo. -Dije riendo flojo

- Pues que no se metan con lo que es mío y yo estaré tranquila. Y su nariz está bien, ni moratón le saldrá. Ha sido una advertencia. - contesto tranquila cerrando los ojos.

- ¿Hay algo que haya dicho Ali que yo no sepa? Porque si dices que no se metan lo que es tuyo... Algo de esa conversación me he perdido.

- No necesitas saberlo amor, quedate con lo que has escuchado y ya está. Lo demás no importa. Me importa una mierda lo que me digan los demás, yo sé quién eres y de quién me he enamorado. Solo necesito pedirte algo

- Dime amor

- No me dejes perder el control, porfavor.

- ¿Porque lo dices Mia? Me estás asustando. ¿Hay algo que yo no sepa de ti y deba saber?

- Aún hay cosas que no sabes de mi - dijo riendo - pero algún día te contaré. Solo no me dejes perder el control. No sería bueno para nadie. Aunque ahora que lo dices, si hay algo que debes saber.

- El que? - pregunté nervioso.

- que te amo con mi vida.

Baje mi cabeza besando su cabello, con una sonrisa.

- Eres muy tonta. Yo también te amo mi rubia.

- Chris...

- dime amor.

- ¿Me cantas?.- con esto me confirma que realmente está muy estresada.

Cada vez que terminaba una semana agotadora de rodajes, fotos para firmas de ropa, de estar de un sitio a otro, cuando teníamos un ratito siempre me pedía lo mismo.

- Eres luz en mi ventana. A cualquier hora del año. Quiero besos pa'desayunar. Con tu cariño es mas bonito despertar. Eres tú la brisa fresca, tu sonrisa me alimenta. Se me acaban las palabras. Pa' escribirte poesías. Y sin tu amor yo me asfixio. Eres mi aire, eres mi agua, eres mi vicio. Tan sencilla y discreta eres perfecta para mí
Primera cita ya me enamoré de ti. Qué le hago yo el amor es así. Primera cita ya me enamoré

Cuando termine de cantar se incorporó un poco y me besó, fue un beso corto, suave y muy lento, pero lleno de sentimientos.

- ¿Porque siempre me cantas la misma?

- Porque es mi historia contigo- dije acariciándo su mejilla- eres perfecta para mi y en la primera cita ya estaba perdidamente enamorado de ti.

Nos quedamos viendo sonriendo como tontos enamorados hasta que se acercó a besarme.

No me cansaría nunca de esos labios, dulces, suaves, esponjosos y esa lengua que entra a mi boca delicadamente pero hace maravillas.

Soy adicto a esto labios.

Cuando Mía estaba rompiendo el beso le agarre el labio inferior con los dientes y no dejaba que se moviera. Me miraba con los ojos abiertos, dándome manotazos en el pecho para que la soltara.
Cuando la solté me dio un golpe en el hombro y empecé a reírme

- Eres muy tonto Vélez,- dijo riendo mientras pasaba su lengua por su labio inferior.

- voy a comprar pegamento y te voy a pegar a mi, para tenerte cerca siempre- dije mientras la atraía hacia mí en en abrazo.

- deja de decir tonterías y vamos anda, que es tu fiesta y no estás.- se levantó y tiro de mi para levantarme

La abracé por detrás con mis manos en su cintura y fuimos con el resto de la gente.

Estábamos riendo y jugando con los chicos cuando se acercó mi mamá que quería hablar conmigo.

Fui con ella y nos sentamos.

- cuéntame mamita bella- dije pasando mi brazo por sus hombros pegando su cabeza a mi

- Mía ¿Está bien?

Me sorprendió que preguntara eso.

- si, ya si, ¿Porque preguntas mami?

- los vi antes, pasaron por aquí - señaló al frente- con ella de la mano, iba muy seria y no te miraba.

- ya hablé con ella - dije restándole importancia

- mi amor ¿Te das cuenta de lo que has hecho?

Moví cabeza para poder verla, no se que he hecho.

- ¿He hecho algo mal?.- mi cara era de miedo.

- No mi amor, al contrario. Has hecho muy bien. Le has dado su tiempo, la importancia que merece. Te ha dado igual estar en tu fiesta de cumpleaños que te has apartado y hasta que todo ha estado bien no has vuelto.

- No me he dado cuenta de eso.

- Yo si me he dado cuenta Chris,- dijo girándose e incorporándose un poco para mirarme a la cara.- eso me ha demostrado la clase de hombre que he criado. Y me ha demostrado lo que sientes por ella.- dijo acariciando mi mejilla

- yo no puedo estar pensando en divertirme si veo que ella está mal. No me he dado cuenta que he dejado a todos para irme con ella pero lo volvería a hacer sin pensarlo si la veo mal. Al igual que si te veo mal a ti mami.

- estoy muy orgulla de ti Christopher- me abrazo fuerte, necesitaba mucho los abrazos de mi madre- eres una gran persona mi niño.

Se separó del abrazo y me besó la frente sonriendo.

Estuve un rato más hablando con mi madre, riendo con ella, necesitaba estos momentos.

Hasta que los chicos me llamaron para ir a bailar.

Mi mamá no quiso ir, diciendo que eso era para jóvenes, por mucho que lo intentamos no pudimos convencerla.

Fuimos cada uno a cambiarnos de ropa y quedamos en encontrarnos en la puerta de la discoteca.

Cuando estuve arreglado baje por las escaleras al departamento de Mia.

Entre con mis llaves por si aún no había terminado, la busqué por el departamento y la encontré de espaldas a la puerta de la habitacion, colocándose unos pendientes.

Llevaba un vestido corto, rojo y muy ceñido.
Marcaba muy bien sus curvas ese vestido, unos zapatos negros de tacón muy altos que estilizan sus piernas, el cabello lo había recogido en una cola alta para dejar su cara libre.

Me recargue en el marco de la puerta de la habitación siguiendo todos sus movimientos con mis ojos.

La Chica Del Aeropuerto - C.V  | Corrigiendo |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora