29

597 15 0
                                    

y ¿Cómo es que le pediste que sea tu novia? Conociéndote seguro fue muy cursi y romántico.- dijo mi mamá sonriendo

Mía se puso totalmente roja y yo tenía un nudo en la garganta que no me dejaba hablar.

Tragué duro e intente sonar tranquilo.

- No mamita eso sí que no se lo cuento. Eso se quedará en nuestra intimidad,- dije aguantando las ganas de reír.

Mía me miraba nerviosa y muerta de vergüenza

- vamos cariño cuéntamelo que soy tu madre, no voy a juzgarte.- mire a Mía y me decía que no con la mirada.

- solo puedo decir que estábamos solos, por la noche. Nada más mamita.

- ¿Donde estaban? - la curiosidad está matando al gato y nunca mejor dicho.

- en el departamento de Mia,- dije sonriendo.

Creo que mi madre ya sabía por donde iba la cosa y quería ver hasta dónde yo era capa de hablar.

- y ¿Que hacían? - ella seguía mirándome con una sonrisa

En ese momento mis mejillas se tiñeron de rojo.

Mía se tapó la cara con las manos y mi mamá se dio cuenta de eso.

- Nada mami, ver películas.- conteste lo más calmado que pude.

Mi madre me miró aguantandose la risa, se nota que quiere que hable más pero no lo va a conseguir.
En ese tema no voy a abrir la boca.

- ya... Y estaba interesante la película ¿Verdad? ,- pregunto riéndose.

- mucho - conteste evitando reírme

- tanto que te contesto gritando ¿No?- cuando dijo eso, sentí mis mejillas arder. Mire a Mía y creo que su sonrojo podía superar el mío.

Mire a mi mamá con los ojos abiertos y empezó a reír muy fuerte haciendo que los dos la miremos muertos de vergüenza.

- La verdad que no me contestó gritando - dije aguantando la risa

- Si no fue gritando es que algo no hiciste bien, hijo - dijo riendo. Haciendo que la mirase con los ojos muy abiertos.

- No siempre hay que gritar. Hay momentos en los que hay que hacer las cosas con delicadeza - hablé sonriendo, recordando ese día.

- es una buena historia para contar a tus nietos,- dijo mirándonos aguantandose la risa- pero tranquilos que es normal, no tienen que reaccionar así, es normal que de vergüenza cuando les hagan esa pregunta. Pero eso lo tenías que pensar antes de preguntar en ese momento hijo- dijo mirándome sonriendo

Yo no sabía dónde meterme y Mía estaba aferrada a mi mano izquierda apretándola fuerte para intentar calmarse

- que vergüenza- dijo Mía tapándose la cara con la mano que tenía libre

- No tienes que tener vergüenza Mía, en un tiempo si siguen juntos verás qué es bonito recordar ese momento, ¿Fue la primera vez que estuvieron juntos? - pregunto mi madre mirándome.

Asentí mirando al suelo sin levantar la mirada.

- pues con más razón será bonito de recordar. Fue una pedida original, solo a mi hijo se le ocurre hacerlo en ese momento - dijo riendo- además con vuestra edad eso es normal. Yo no sé Mía, pero por lo menos Christopher es una hormona con patas.- la mire con los ojos muy abiertos y escuche a Mía reír dándole la razón a mi madre- no me mires así que te conozco desde antes de nacer.

Continuamos hablando de otros temas para relajar el ambiente y bajar nuestro sonrojo.
Me gusta mucho la relación que tienen mi madre y Mia, se que llevarán muy bien.

La Chica Del Aeropuerto - C.V  | Corrigiendo |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora