Nevermind ✅

~Sí, él lo dijo...~

La revisión había concluido y felizmente no era nada grave, solo un cuadro de estrés que terminó por afectar mi estómago. El doctor me brindó unos medicamentos para regular el malestar por hoy, pero debía continuar la ingesta por una semana.

-Señorita Manobal esto es consecuencia de sobreexigencia física... ¿Alguna preocupación extra quizás?-preguntó. Trague duro mirando a mis padres a un lado. 

Ellos no eran conscientes de mi discusión con Jeon, mucho menos de nuestra relación por lo pronto, aunque estaba segura de que sospechaban de ello. Negué rápidamente.

-Es la primer competencia a la que asisten mis padres, tal vez me presione demasiado para que todo salga perfecto.-conteste. 

-Lo sentimos cariño, no pretendíamos ponerte en una situación así.-dijo mi madre con culpa. Jodida mentirosa Lisa...

-No por favor, ustedes no tienen la culpa. Fui descuidada.-mentí. Aunque era cierto que me exedi en los ensayos para mantener mi mente ocupada.

En cuanto salimos del consultorio, mi padre fue a pagar la consulta mientras que mi madre fue por bocadillos para nuestro largo camino ya que definitivamente había perdido el micro de traslado. Me encontraba de camino a la salida cuando de repente refregué mis ojos repetidas veces ¿será efecto del medicamento? Mierda, no puede ser.

Jungkook estaba allí, parado frente a mi en la entrada del Hospital. Agitado, con gotas de sudor en su rostro y cuello, su ropa parecía sucia por alguna razón. Corrió directo hacia mi en cuanto me reconoció. Me congele cuando me atrapo entre sus brazos, su pecho agitado golpeaba en mi rostro, escuchaba sus latidos descontrolados mientras me apretaba con fuerza contra él.

-¿Estas bien? ¿Qué sucedió?-preguntó entre jadeos mientras me inspeccionaba.

No lograba reaccionar. Pestañeó repetidas veces sin creer que realmente estuviera aquí conmigo. 

-¿Qué estas haciendo aquí?-solté apartandome de su agarre.

-Jennie dijo que estabas en este hospital y simplemente tomé mi motocicleta de inmediato.-jadeó.- Creí que había sucedido algo malo...-habló preocupado. 

Mi corazón latía descontrolado por ver nuevamente su rostro tan cerca luego de dos jodidas semanas distanciados. Estaba enojada con él, pero el solo hecho de escuchar su voz me hacía estúpidamente feliz. 

-No era grave.-contesté con frialdad.- Solo un malestar estomacal, me recetaron un medicamento.-levante la caja en mi mano. Asintió.

-Bien...-murmuró cabizbajo. Rápidamente mire hacia otro lado, porque mi estúpido corazón era vulnerable a su mirada. A su presencia, a él...

-Lo siento mucho Lisa.-habló.

Sentí su mano tomar suavemente mi mano, pero la aparté de él. Con ese simple toque mi piel se erizó completamente, mierda. Comencé a caminar hacía el estacionamiento ignorando sus palabras, necesitaba escapar antes de desmoronar mi barrera de cristal.

-¡Lisa, bebé. Espera por favor!- corrió tras de mí, tomó mi brazo y me giro para que terminara en sus brazos.

-¡Jeon, no!-puse mis manos en su pecho escapando de su agarre.

Él miró mis ojos con dolor, con uno que estrujo directo mi corazón. Mordió sus labios con fuerza ya que este comenzaba a temblar debido a la presión que hacía para no llorar. Nuevamente baje la mirada, no podía mirar sus ojos, esos que me arrastrarán por completo hacía él.

-Muñeca lo siento.-hablo.- Soy tan mal novio.- dijo con voz estrangulada.

Quería llorar al escuchar eso, porque no era cierto. Era un novio maravilloso, amaba como era conmigo, lo amaba todo de él, lo amo demasiado. Pero...

-No soporto que no mires mis ojos Lisa.-sollozó.- Creí que te había sucedido algo grave por mi culpa.-suspiró frustrado.- Te amo muñeca, no te das una idea de cuanto lo hago. Desde cuando...-añadió en un susurro.- Comprendí que te fallé, que te decepcione y por eso no me puedes mirar a los ojos.-pensó.- Lo siento tanto Lisa, no te das una idea de cuan arrepentido estoy por haberlo jodido todo, por no haberte dicho lo de Nayeon cuando comenzamos a hablar o siquiera cuando ella me lo tiró en la cara ese dia.-bufó.- Actúe infantil, por no haber aceptado que en ese entonces no querías nada conmigo... comprendo que no fue una broma pesada, fue un error por completo.- admitió.- Los sueños y deseos son lo más sagrado que tenemos y yo jodi el tuyo. Lo siento tanto.-sollozó.

Mi agitado corazón galopaba descontrolado por cada palabra que salía de su boca, por cada lágrima que estaba derramando. Finalmente comprendió lo que hizo, él fue un idiota pero estaba sinceramente arrepentido, deseaba besarlo y secar sus lagrimas. Alce la mirada por primera vez, e iba hablar cuando él decidió continuar.

-Lamento haberte decepcionado.-miró mis ojos.- De camino aquí pensé lo peor, y no me importo nada más que verte bien... Estoy feliz de que sea así.-sonrió.- Estas semanas me sentí de mil demonios por pensar en que estabas sufriendo, que estabas lastimada y todo era mi culpa. Solo mía, porque Nayeon solo fue un instrumento...-murmuró bajando la cabeza.

Mi corazón se detuvo por un momento. ¿Acaso él va a ...?

-No quiero causarte más daño, por eso comprendí que debo hacer. Lisa...-respiró hondo y alzó nuevamente la cabeza.- Terminemos.-concluyó.

Sí, él lo dijo. 

Gaby :)