Dos meses después…
Ubicación Desconocida
Se ve a un pelirrojo cargando varios troncos de árbol, pero su ropa estaba desgarrada con sangre, tenía heridas en su cuerpo donde estaba escurriendo la sangre, tenía signos de desnutrición, ojeras en sus ojos de que no había dormido en mucho tiempo, su cuerpo se veía muy débil, este siguió su caminando dejando los troncos en el lugar que le decían ya que aquel hombre tenía un látigo con los que lo azotaban a los demás incluso a él cuándo lo hacían mal o los desobedecían
Horas después…
El pelirrojo entro a una cabaña que estaba a punto de destruirse donde el aire tan frio entraba incluso había goteras, solo con pedazo de pan muy duro es lo único que le daban para comer, el pelirrojo ya no hablaba, de su boca ya no le salían las palabras.
Tanjiro comenzó a comer aquel pan duro con dificultad ya que estaba muy débil, este vio aquella mochila y aquellas cosas que estaban con vendas recordando a su padre, pero él no sabía el contenido de estas, al igual que estaba en un lugar muy alto que no alcazaba por su baja estatura, este acabo de comer acostándose en el piso sin nada conque cubrirse cerrando los ojos tratando de dormir con dificultad ya que hacia demasiado frio sintiéndolo por todo su cuerpo al igual que le dolían sus heridas y las que había cerrado se volvían abrir
Al día siguiente...
Todos los niños estaban en una fila formados ahora tenían que cargar muchos costales con alimentos cada niño llevaba 10 costales, era tal peso que los hacia caminar lento, uno de ellos cayó al suelo recibiendo varios latigazos para que se levantara, al pelirrojo le temblaban las piernas incluso sus brazos, su cuerpo estaba muy débil que en cualquier momento podría caer al suelo por el cansancio, pero no lo hacía no quería ser golpeado como el primer mes
Señor: ¡Rápido, muévanse que no tengo todo el tiempo! (Dándole un latigazo a cada niño)
El pelirrojo al sentir ese latigazo puso una cara de dolor ya que le habían dado en su espalda que tenía muchas marcas de latigazos incluso unas donde estaba escurriendo la sangre, este casi caía, pero no cayo llevando aquellos costales a donde debían ser entregados, cuando comenzó a llover en todo el lugar, la lluvia era tan fuerte que se volvió una tormenta donde estaba tronando el cielo al igual que caían los rayos
Señor: ¡Sigan no se detengan si no les irá peor! (Cubriéndose para no mojarse)
Todos aquellos niños que era alrededor de 15 estaban bajo la lluvia sintiendo como caía encima, el frio no ayudaba para nada mientras que aquellos hombres los veían con una sonrisa de arrogancia mientras les lanzaban piedras ya que disfrutaban golpearlos al igual que ver aquellas caras de dolor mientras pedían que pararan eran unos desquiciados, la tormenta se intensifico, pero seguían trabajando bajo aquella tormenta.
Todos aquellos niños estaban temblando de frio además que casi un rayo cae encima de ellos, el miedo se podía sentir en aquel lugar, ningún niño mostraba aquella luz en sus ojos solo mostraban un dolor infinito al igual que el pelirrojo el ya no tenia aquel brillo en sus ojos, su sonrisa había desaparecido, el en ese tiempo se había dado cuenta de algo, en su mente solo pasaba aquellas palabras
“El dolor te hace más fuerte, las lágrimas más valiente y un corazón más sabio”
Aquellas palabras solo pasaban por su mente, cada noche que veía la luna llena recordaba las palabras que le había dicho su padre en la última vez que lo vio aquellas palabras fueron
“Te otorgaron esta vida...” “Esta vida porque tú eres lo suficientemente… listo y fuerte para vivirla”
Esas palabras siempre las pensaba porque le habían dado esta vida, acaso hizo algo malo para merecerla, cada día en aquel lugar era peor, era azotado, torturado por aquellos hombres, ya no tenía razón para vivir, las heridas de su corazón no sanaban, su estado emocional como el de ánimo estaban por los suelos, él había llegado a una conclusión la cual era
“Solamente a través de los ojos de otras personas, es que nuestras pequeñas vidas tienen sentido, cuando no hay nadie que te mire o que ni siquiera se voltea a verte es como si no existieras”
Él no tenía un odio hacia nadie, ni siquiera a su familia que le había hecho la vida de cuadritos, él los había perdonado hace tiempo, tampoco aquellos hombres que le hacían cosas atroces, en solo pensaba en
“Con que les sea útil es más que suficiente”
Todos sus sueños habían sido pisoteados, destruidos, ya no tenía nada por lo que esforzarse, su corazón estaba hecho pedazos, aquella llama que lo mantenía para seguir hacia adelante se había extinguido por completo, las heridas de su corazón no sanaban, pero el ya no le importaba eso porque
“A diferencia de una herida en el cuerpo no hay medicina en el corazón y en ocasiones nunca sanan”
Tanjiro siempre se preguntaba ¿La pero forma de llorar?, cual era para las personas, para él la peor forma a de llorar es
“Es en la que no sueltas ni una lágrima, pero mueres por dentro”
Tanjiro quería morirse, aunque ya no le importara lo que hicieran, él quería volver a ver a su padre que había muerto, quería volverlo a ver, quería abrazarlo otra vez, sentir aquel calor familiar que sentía cuando lo abraza, aquella sonrisa que tenía su padre, pero él sabía que
“La gente ve pasar su vida antes de morir para encontrar entre sus recuerdos algo que pueda salvarlos”
El pelirrojo se había encontrado con un demonio, pero no le hizo nada al estar en esa condición aquel pelirrojo, pero le había dicho algo que sabía que era cierto lo cual era
“Un demonio dice, el tiempo Transcurre y las heridas se mantienen intactas”
Y era cierto sus heridas en el corazón estaban intactas, pero solo se generaban más y más, aquel dolor que cargaba en sus hombros era cada vez más grande, ya no tenía nada que perder ni nada que proteger ni por lo que luchar, pero cuando recordaba a su familia siempre se preguntaba
“Porque no fui suficiente”
Esa pregunta nunca le encontraba una respuesta, le daba vueltas aquella pregunta, pero nada, no había nada con lo que responder aquella pregunta estaba vacía aquella pregunta hasta que llego a la conclusión definitiva la cual es
“Estamos hechos de piezas rotas, estamos rotos desde el principio”
