Un nuevo día había llegado en aquella cabaña siguiendo lloviendo, este bajo preparando el desayuno bajando los 17 niños sentándose en la mesa donde les puso un plato para que desayunaran, los niños estaban fascinados ya que las comidas eran en forma de animales.
Tanjiro: Solo esperamos a que pare de llover y los iré a dejar (Viendo asentir a los niños)
Tanjiro: Iré a un lugar, no salgan de aquí (Volviendo a ver a todos asentir)
El pelirrojo salió de la cabaña con su máscara puesta, este comenzó a caminar sintiendo como la lluvia caía en su cuerpo este en sus brazos llevaban un ramo de flores dirigiéndose a un lugar.
Con los niños.
Kanae: Hola pequeños, ¿Saben dónde fue el pelirrojo? (Viendo a los niños)
Niño: Salió de la cabaña, vimos que se fue todo derecho (Comiendo)
La pelinegra agradeció saliendo de la cabaña junto a los demás corriendo todo derecho adentrándose al bosque tardando algunos minutos viendo al pelirrojo enfrente de algo, rápido los siete se ocultaron entre la hierba escuchando lo que estaba diciendo el pelirrojo.
Tanjiro: Ha pasado tiempo hermanos desde la última vez que los vine a visitar (Dejando el ramo de flores)
Los siete vieron una lápida logrando visualizar 14 nombres de puros chicos, preguntándose ¿Quiénes eran?, Kanao supo al instante que eran aquellos niños que le habían arrebatado sin que él pudiera hacer algo.
Tanjiro: Hermanos mate a las personas que nos hicieron la vida un infierno, ahora ya se están pudriendo en el infierno ya que es el lugar en que deben estar (Quitándose la máscara)
Todos los presentes vieron que el pelirrojo se quitaba la máscara levantando su rostro observando como la lluvia caía en su rostro
Tanjiro: “Con pocos sentimientos tengo que vagar, un poder muy dentro me obliga a matar” (Agachándose tocando la lápida)
Tanjiro: “Los vi morir con ese sueño tan puro, viven en mí y eso se los aseguro”, ¡Pero juro que de esta nadie sale vivo! (Cerrando sus puños de ira)
Tanjiro: ¡Peleare solo de uno u otro modo! ¡Matare a ese demonio que causo tanto desastre! (Desfundando su nichirin enterrándola en el suelo)
Nadie tenía palabras para describir aquel momento, ver al pelirrojo mostrar emociones y sentimientos no era algo que pudieran ver siempre, era sorprendente
Tanjiro: No me importa nada solo quiero irme a casa, pero si me voy, ¿A esta gente quien la salva del progenitor de los demonios? (Viendo el cielo)
Tanjiro: “Y yo algo de mi cambio, he sentido la traición, no podrán conmigo y ahora mismo lo repito no podrán derrotarme” ya que “La única solución soy yo o mi hermana, un nuevo héroe seré"
El pelirrojo le llego un recuerdo, las últimas palabras que su padre le dijo antes de morir a manos de las Primera y Segunda Lunas Superiores
Tanjuro: Hijo, este es el último momento en que podremos estar juntos
Tanjiro: Padre… (Llorando)
Tanjuro: Escucha hijo mío, tienes que aprender la respiración solar cueste lo que cueste, tu… (Escupiendo sangre)
Tanjuro: Tu eres la última esperanza para este mundo, con la respiración solar podrás matar al progenitor de los demonios Muzan, ese ahora es tu misión
Tanjiro: Te lo prometo padre que cumpliré la misión que me estas encomendado
Tanjuro: Desde ahora eres “Tsuginiki Kamado Tanjiro el ultimo portador del aliento solar”
Tanjuro: Vive hijo… trae un nuevo amanecer a este mundo (Comenzando a cerrar los ojos)
Tanjiro: ¡No cierres los ojos padre, por favor!
Tanjiro había recordado la misión que su padre le había encomendado, sintiendo las gotas de agua caer en su rostro en aquella tormenta cerrando sus puño.
Tanjiro: ¡Por eso me prometo que no descasare hasta encontrar al responsable de todo esto! (Abriendo los ojos)
Tanjiro: ¡Padre, porque debemos ser devorados, ya no quiero seguir viviendo como ganado!
Tanjiro: ¡Esas malditas lunas superiores acaraban muertas ya que ninguna persona podrá calmar la ira que ahora siento!
Tanjiro: ¡Ahora es nuestro turno padre! ¡Le guerra le declaro a Muzan! ¡Ese maldito quiso guerra con las personas que portan el apellido Tsuginiki! ¡Entonces guerra tendrá!
Una declaración de guerra del pelirrojo para Muzan, era el momento en que el camino de Tanjiro hacia ese nuevo amanecer prometido comenzaba, lo iba a lograr a toda costa no importaba nada “Iba a matar a Muzan”
Tanjiro: “Esa ira debo dominar, esa ira debo controlar, sé que mi cuerpo no aguantara, voy a controlar un poder sin igual, esa ira me domina y me da poder, siento que sube mi fuerza si voy a perder”
El pelirrojo se dio la vuelta poniéndose la máscara mirando por ultimo aquella lapida con los nombres de sus hermanos diciendo algo por última vez
Tanjiro: Mírenme hermanos como traeré un nuevo amanecer y matare a todos los demonios que los mataron, cuando eso suceda vendré de nuevo
El pelirrojo comenzó a caminar bajo la lluvia dejando sin palabras a los presentes al escuchar todo eso moviéndose rápidamente llegando a la cabaña a los pocos minutos el pelirrojo llego.
Horas después…
La lluvia había parado donde partieron todos lo bueno es que todos eran de pueblos vecinos así que fue más fácil, cada vez que iba a dejar a un niño con su familia veía como sus padres abrazaban aquellos niños mientras lloraban, este comenzó a dejar a cada niño con su familia viendo las sonrisas de los niños, hermanos y padres de aquellos miembros de la familia, ver aquella escena de la familia reuniéndose de nuevo haciendo que se sintiera “Bien”.
Fueron dejando uno por uno hasta que terminaron viendo que estaba atardeciendo en aquel pueblo recordando lo que les dijo a aquellos niños antes de ir a dejarlos las cuales esas palabras eran
“Deja que tus sueños sean más grandes que tus miedos y tus acciones más fuertes que tus palabras”.
Este se dirigió hacia Tomioka dejando sus nichirin en el suelo estirando uniendo sus dos manos confundiendo a todos menos a Tomioka
Tanjiro: Estoy listo para ser juzgado, sé que por matar a personas se me juzgara, ya cumplí lo que quería es hora de asumir las consecuencias de mis acciones, así que haz lo que tengas que hacer
El pelinegro asintió sacando una soga amarrando al pelirrojo de las manos agarrando sus nichirin de este dándoselas a Sabito comenzando a caminar siendo seguidos por el pelirrojo diciéndose a sí mismo cuando mato a aquellos hombres
“Jamás creí llegar a agradecerle algo a aquellos que me lastimaron, pero ahora me doy cuenta de que gracias a ellos me volví fuerte”
