La mañana había llegado a la Finca Mariposa donde Nezuko volvió al cuarto donde estaban sus amigas con ayuda de las trillizas con una sonrisa ya que había arreglado las cosas con su hermano, quitándose una carga de encima al saber que la había perdonado donde ya estaban desayunando entrando Tamayo, Shinobu, Kanae, Kanao, Mitsuri, Makomo, Aoi, Sabito y Tomioka ya que venían a ver como estaban sus otros dos compañeros de la respiración de agua.
Sabito: ¿Y Tanjiro?
Kanae: Salió a una misión ayer en la noche y vuelve mañana (Sentándose)
Shinobu: Bien, ¿Cómo se sienten chicas? (Viendo a las cinco)
Nezuko: Mejor, ya me dejo de doler el cuerpo (Sonriendo)
Ino: ¡Estoy listo, para superar a Nekuko! (Alzando sus brazos en forma de puños)
Zenko: Bien, ya las heridas están cerrando (Esposando una sonrisa)
Yuki: Bien, aunque me siguen doliendo un poco los brazos (Sonriendo con una cara apenada)
Yuna: Si, aparte estoy aliviada de poder encontrarme con Tanji de nuevo (Sonriendo viendo que todos se sentaban)
Yuki: Bueno supongo que vienen a que les contemos todo, ¿Verdad? (Viendo asentir a todos)
Yuki cerro sus ojos respirando profundamente tranquilizándose hasta que volvió abrir los ojos volteando a ver a su amiga Yuna viendo que esta asentía esta volvió su mirada a las chicas
Yuki: Bueno nosotras nos llevaron junto a nuestros hermanos cuando ya estaba Tanjiro junto a otros doce niños, a nosotras nos separaron de ellos llevándonos dentro de la cabaña encerrándonos en una habitación y a ellos a otro lugar donde estaba en malas condiciones.
Yuna: Pero nos dejaba ver a nuestros hermanos siempre y cuando ellos obedecieran a todo lo que ellos les ordenaba, a los dos meses de estar ahí conocimos a Tanjiro que tenía la misma edad que mi hermano, Tanjiro y mi hermano eran los mayores de aquel grupo de chicos.
Yuki: Siempre nos llevaban sus comidas para que comiéramos incluso Tanjiro que a veces ellos no comían para dárnoslos a nosotras, los segundos se volvieron minutos, los minutos en horas, las horas en días y los días en meses hasta que paso medio año en aquel lugar
Yuna: Fue cuando comenzamos a ver a los quince chicos con heridas, quemaduras, con dolores en su cuerpo, con quemaduras en su cuerpo, así fueron pasando los días viéndolos más heridos con muchas vendas en sus cuerpos, pero aún los seguíamos viendo con esas sonrisas.
Yuki: Pero mientras más pasaban los días empeoraban su estado, pero el hermano de Yuna y Tanjiro eran los más heridos que el de mi hermano, ellos dos tenían quemaduras graves, les faltaba pedazos de su piel, mi hermano me dijo que el hermano de Yuna y Tanjiro les dijeron que les hicieran lo peor a ellos, pero a que lo más pequeños no les hicieron nada de eso.
Yuna: Ellos aceptaron comenzando las torturas donde les rompían los dedos de las manos y de los dedos los pies siempre, mientras ellos disfrutaban de los gritos que soltaban, nosotras escuchábamos desde el cuarto en que estábamos aquellos gritos llenos de dolor.
Con cada cosa que las chicas decían, los presentes se tapaban la boca entendiendo porque era así Tanjiro, al igual que entendieron por qué los mato sin dudar y sin remordimiento.
Yuki: Pero poco a poco se intensificaban rompiéndoles las costillas, los huesos de los brazos, de las piernas, les enterraban cuchillos complétate calientes en su cuerpo, incluso les inyectaban acido en su cuerpo mientras disfrutaban de las caras de dolor de los dos.
Yuna: Los golpeaban con enormes rocas, las heridas de su cuerpo cada vez empeoraban, les echaban acido en partes de su cuerpo, los electrocutaban, pero antes de hacerlos les echaban agua muy caliento aun con sus heridas abiertas y sin pedazos de carne mientras les daba latigazos.
Yuki: Así los meses se volvieron años donde cada uno fue muriendo hasta que solo quedaban nuestros hermanos y Tanjiro, cuando vino la peor parte para ellos, no se mucho sobre eso ya que lo único que nos alcanzaron a decir nuestros hermanos antes de morir fue que…
Todos vieron que las chicas tragaban saliva viendo que de sus ojos se llenaban de lágrimas viendo sus manos que estaban temblando notándose la voz el miedo en aquellas palabras
Yuna: Ellos comenzaron a “EXPERIMENTAR” con nuestros hermanos y con Tanjiro, pero nuestros hermanos no aguantaron aquellos experimentos muriendo en los brazos de Tanjiro, cuando solo quedo Tanjiro “Seguían experimentando” con su cuerpo, volviéndolo una rata de laboratorio.
Yuki: Hasta que nos dijeron que nos venderían en el Distrito Rojo, pero Tanjiro escucho eso, el hizo todo para sacarnos de aquel lugar…
Recuerdo…
Se ve a un pelirrojo con las ropas desgarradas, estaba atardeciendo donde Tanjiro apenas se poda mantener de pie mientras dejaba un camino de sangre con una cara de dolor donde escucho “Que las hermanas de sus hermanos iban a ser vendidas al Distrito rojo mañana mismo”.
El pelirrojo rápido corrió sin importarle el dolor dirigiéndose a donde se quedaba con sus hermanos antes que estos murieran, sacando algunas cosas dirigiéndose a otro lugar.
Al día siguiente al atardecer
El pelirrojo se había escabullido en aquella cabaña dirigiéndose al cuarto donde estaban las dos niñas abriendo la puerta con algo que había creado
Yuna/Yuki: Tanji (Corriendo abrazar al pelirrojo)
Tanjiro: Rápido no queda mucho tiempo, las sacare de aquí (Viendo asentir a las dos chicas)
El pelirrojo agarro a las dos chicas de las manos corriendo escondiéndose de no ser visto yendo detrás de la cabaña corriendo rápidamente llegando a un rio que por lo que investigo ese rio los llevaba al pueblo más cercano cuando escucho a los hombres acercarse rápidamente, así que había creado un bote.
Tanjiro: Rápido suban, los llevara al pueblo más cercano (Viendo a las niñas)
Yuna: Ven con nosotros Tanji, por favor (Llorando viendo al pelirrojo)
Tanjiro: No puedo, si lo hago nos seguirán y nos atraparán, yo conseguiré tiempo (Limpiando las lágrimas de las dos chicas)
Yuki/Yuna: “Por favor prométenos que nos volveremos a encontrar y nunca nos separaremos” (Viendo al pelirrojo)
T
anjiro: Se los prometo (Esposando una sonrisa)Las niñas rápido se subieron al bote donde el pelirrojo comenzando a empujar viendo salir a los hombres del bosque, este reunió todas sus fuerzas empujando el bote con una gran fuerza viendo que este se alejaba de su posición viendo a las niñas perderse.
Las niñas lo último vieron fue al pelirrojo siendo golpeando con varias rocas
Fin del recuerdo…
Yuna: Fue la última vez que lo vimos, y cuando nos fuimos alejando vimos sus labios moverse diciéndonos…
“Aférrate a luchar siempre. No dudes ni retrocedas ante cualquier batalla que se te presenta en la vida”