Capitulo 26

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— ¿Todo el pelo?— pregunte viendo como Rebeka se acercaba con una mescla en las manos.

—Si— dijo Mike quien ya tenía la pintura en todo el cabello.

—Está bien— dije escuchando la risa de Rebeka quien empezó a aplicar esa pasta rara que tiene en mi cabello y por un momento sufrí por mi cabello como lo estaba haciendo Lucia todo este tiempo.

—El azul no es tu color— dijo Malik desde el suelo de mi habitación.

— ¿a mi como crees que se me vea?— pregunto Mike y Malik lo miro ladeando un poco la cabeza haciendo una mueca.

—Más aceptable— dijo después de unos segundos haciendo que Félix soltara unos sonidos de ternura.

—Eso es amor— dijo Félix— nunca pensé escucharlo decir algo tan lindo a alguien.

—Cállate— le dijo Malik refunfuñando.

—Gracias— dijo Mike con emoción viéndose en el espejo con una mueca.

— ¿Y dónde está tu hermosa novia?— pregunto Mia con diversión sentada en la cama.

—Esta con Marcos creo— dijo Mike sentándose al lado de Félix.

—Llegamos— dijo James con alegría entrando por la puerta de mi habitación con Kyle detrás de él.

—Déjame ver el tatuaje— pidió Félix con emoción acercándose a Kyle quien se alzó un poco la camisa dejando ver una rosa en su abdomen bajo.

—Ahora tengo una puta rosa— dijo Kyle sonriendo un poco.

—Yo tengo un maldito beso— dijo James alzando un poco su camisa dejando ver un beso de color rojo en el mismo lugar en el que Kyle tiene la rosa, reí un poco ante la cara de enfado que tenían los dos.

—Les queda bien— dijo Rebeka.

—a mí me gusta— dijo Mia.

—a mí también— dijo Félix.

—Genial a tu novio le gusta tu tatuaje— dijo James y Kyle rio.

—no creo que tus no parejas te deje por el beso— dijo Kyle con tono burlesco.

—Somos una relación libre— dijo James riendo un poco.

—Claro— dijo Kyle.

Después de un rato Mike y yo entramos al baño para poder lavarnos el cabello mientras escuchábamos como Mia ponía música.

—Listo— dijo Rebeka cuando salimos Mike y yo del baño con el cabello mojado y machando nuestras camisas de tinte azul— ahora deben secarse el cabello— mostro unos secadores, los dos los tomamos y volvimos a entrar a mi baño para cercarnos el cabello, después de todo no fue tan mala idea pintarnos el cabello.

— ¿Qué tal?— pregunte saliendo del baño seguida de Mike.

—No se les ve mal— dijo Mia con alegría.

—El azul es nuestro color— dijo Mike mirándose en el espejo.

—Me gusta— dije peinando mi cabello.

—Genial, porque lo van a llevar así por un tiempo— dijo Rebeka.

—Ahora yo me quiero pintar el cabello— dijo Mia con alegría.

—Aún queda azul— dijo Rebeka pero Mia negó.

—No lo quiero pintar pero lo quiero de otro color— se quejó tapándose la cara con una almohada.

Rompamos la ventanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora