Mi Última Razón ©✓.

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Erick Dagher...

Ya estábamos a sábado, Aibek nos había invitado a una fiesta en su casa, el calor estaba demasiado fuerte el día de hoy. Decidí por ir al hotel donde se encontraba la novia de Cris.

Me subí a mi auto y conduje hasta el lugar, puta madre, tenía nervios y no sé porqué. Dijo que eran hermanas una en la diecinueve y otra en la veinte.

Subí por el ascensor y fui a la habitación veinte, golpeé y sale una chica rubia.

— Hola. — dice nerviosa.

— Soy Erick, ¿y tú eres?. — pregunté y mira sorprendida.

— Emm, soy Ámbar. ¿Que necesitas?. — me miraba de manera embobada, aparentemente le guste o eso creo por la manera en que miraba.

— Buscaba a una chica, pelo castaño y tez blanca. Siempre viene con un chico.

— Es de la habitación de al lado.

— ¿Tú eres su hermana?.

— No, su cuñada.

— ¿Qué haces acá Erick?. — dice alguien desde adentro de la habitación diecinueve.

— Venía a verte, es que siento algo raro contigo. Hasta tu voz se me hace conocida.

— Si se entera Cris, te va a matar.

— Déjame verte.

— En algún momento me animaré.

— Está bien. Nos vemos luego. — me fui de ahí pero fuera del hotel me quede dentro del auto.

Habrá pasado aproximadamente media hora y una chica sale del hotel, estaba sola, pero espera, se parece a Ashley, la hermana de Cristián. ¿Ashley?. Si es ella, porque tiene su pelo negro, no puede ser.

Tenía razón Emily cuando decía que estaba viva, pero, ¿será Ashley verdaderamente?.

Estaba confundido, quería bajar y preguntarle. Es demasiada coincidencia que haya venido por una persona cualquiera y me la encuentro. ¿Sabrá de esto, Cris?. Mi mente no dejaba de pensar cosas.

Volví a mi casa y poder prepararme para la noche.

Emily Kelley...

Luego de que Erick vino buscando mi habitación, todavía no lo podía creer, o sea no puede estar buscando verme y hablar conmigo.

Hoy a la noche tendremos fiesta en la casa de Aibek, ya no tendré miedo a que sepan de mi existencia, se que tendré sentimientos encontrados, ojalá no me sienta confundida.

Cris aún no sabe que nosotras iremos, le dijimos que no íbamos pero será una sorpresa.

Estábamos terminando de arreglarnos con las chicas, de mi parte estaba más que nerviosa y las chicas intentaban calmarme, tal vez Erick no esté, pero tal vez si.