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Emily Kelley...

Luego de que salimos, mi novio me dejó en el hospital donde estaba mi madre y él fue a nuestra casa. Mi papá estaba con Ashley sentados afuera de la habitación.

— ¿Mi mamá? — pregunte desesperada.

— Parecen que son los últimos minutos con ella. — dice mi papá.

Enloquecí y entre corriendo a la habitación, empecé a hablarle y abrazarla pidiendo que por favor se quede, no quería perderla realmente y ella se despierta lentamente.

— Mamá, por fin. — suspiré abrazándola.

— Gracias hija. — dice y entra el doctor.

— Emily, debo comunicarles algo. — dice y entra mi padre con Ashley — le detectamos cáncer de utero y está muy avanzado, puede empezar con sus tratamientos pero hay que ver cuánto tiempo aguanta el procedimiento y si llega a la cura.

Simplemente la abrace llorando desconsolada.

— ¿Y ahora no puede salir del hospital?. — pregunta mi papá.

— Si, porque no despertaba porque inhaló mucho en el fuego y le afectó bastante, pero puede ir a descansar.

La ayude a levantarse y subimos al auto de mi papá, todo iba en silencio y al llegar a mi casa ambas bajamos pero Ashley se fue con mi papá. Entramos y aparece Erick ayudando a mi mamá.

— Mariana, puede quedarse en la habitación de acá abajo. Hasta que mañana podamos subir tus cosas a la habitación.

— Me quedaré acá abajo si me lo permiten.

— Claro, dónde te sientas más cómoda mamá. — exprese y subí a nuestra habitación.

— ¿Qué sucedió amor? — me abraza mientras lloraba.

— Mi mamá tiene cáncer y por más que haga los tratamientos no sabemos cuánto va a sobrevivir.

— Ay, mi cielo. — me contiene con más amor — Ashley, ¿Cómo estaba? ¿Dijo algo?.

— Ni siquiera se acercó, es una desagradecida, mi padre se preocupo más que ella.

— ¿Crees que aún hay algo entre Germán y Mariana?.

— Por mi mala experiencia preferiría que estén separados — me reí ante lo dicho.

— Tranquila, estará con nosotros al igual que mi mamá. Yo mañana tengo que averiguar por Santiago y aparte ya se acerca navidad y año nuevo. — dice acariciando mi trasero.

— Te acompañaré, no quiero que estés solo y que te pase algo. — saque su camisa lentamente — ¿Pudiste hablar con tu mamá?. — dije mientras sacaba mi blusa y mi sostén.

— Si amor, tal vez faltaron algunas cosas pero dentro de todo hablamos de las cosas más importantes. — dice y comienza a lamer mis pechos.

Gozaba demasiado ante su acto, sentía la máxima excitación en mí, procede a bajar mi pantalón y mis bragas para introducir sus dedos mientras sigue lamiendo mis pechos. Baja lentamente y comienza a lamer mi parte, sentía perfectamente el contacto de su lengua y sin darme cuenta llegué a mi orgasmo y él sonríe al sentir todo mi orgasmo en su boca. Sube lentamente dejando besos en mi cuerpo y acomoda su miembro en mi entrada, va metiendo despacio hasta sentirla completamente.

Mi Última Razón ©✓.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora