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Había sido su primer día, la noche ya estaba con ellos y era hora en la que debían de dormir. Debido a que jamás se esperaban su llegada, sólo tenían una habitación y por lo tanto una cama, así que los tres se encontraban en el mismo sitio durmiendo, o al menos era lo que TaeMin había hecho, el menor se encontraba sentado en la cama y MinHo simplemente pensaba en su futuro.

Tenían la ventana abierta por lo que una ráfaga de viento había entrado, provocando que les diera un poco de frío, sin embargo no podían cubrirse bien con los cobertores debido a que el niño se encontraba en medio y sentado.

-Tae...tengo frío.

El mencionado solamente se cubrió por sí solo, aún con los ojos cerrados, MinHo soltó un suspiro y delicadamente ayudó al niño a acostarse en la cama y taparlo con los cobertores para que de esta forma él mismo pudiera eliminar el frío que tenía.

Cerró lentamente sus ojos listo para dormir, sin embargo, escuchó que alguien se encontraba sollozando en silencio, y así mismo sintió como de nuevo sentía frío porque alguien lo había destapado. Abrió sus ojos viendo que el niño se encontraba sentado, pero está vez se frotaba los ojos.

MinHo simplemente dio un suspiro y trató de dormir con eso, poco a poco el llanto del niño comenzaba a hacerse más notoria, provocando que TaeMin despertara por el ruido.

-¿Qué tienes pequeño?.-Mencionó con un pequeño bostezo abrazando al menor y eliminarle las lágrimas que tenía este.-¿Descuida si? Papá Min y papá Tae estamos aquí para ti.

Dicho aquello, acercó sus labios para besar la frente de su hijo, había sido la primera vez que lo hizo, por lo cual también dejó caer una lágrima.
Sabía que el niño pasaba un momentpo difícil, por lo que no soltó el abrazo que le estaba dando y permitió que continuará llorando para que se deshagora completamente.
MinHo simplemente escuchaba sin decir o mencionar alguna palabra para evitarse el contacto con el niño.

De poco a poco, el ruido fue disminuyendo, el pequeño se había recostado en la cama y su padre lo cubrió para besar su mejilla, abrazándolo. Cuando MinHo escuchó el silencio se giró para poder verlos, deslumbradosé al ver la escena de su marido con su hijo juntos abrazados mientras dormían, aquello le hizo entender que el niño tenía la culpa de nada y MinHo solo estaba en un caprichoso.

Dicidió darle una oportunidad al pequeño y también intentó abrazarlo para dormir.
De esta forma el menor sintió calidez por parte de ambos adultos y pudo descansar tranquilamente, MinHo seguía sin poder analizar la situación, le era difícil de dirigir.

Al amanecer sintió ligeros dolores en su espina dorsal, despertó el mayor mirando que tenía una de las piernas del niño en su espalda, lentamente acomodó al menor a una posición más normal, TaeMin estaba a su lado dormido por lo que el mayor se dedicó a observar a los dos cuerpos presentes, sin pensarlo esbozó una sonrisa al encontrar similitudes físicas.

El niño se removió por la cama y abriendo sus ojos lentamente miró a MinHo quien lo observaba de manera nerviosa. Aquel somnoliento simplemente permaneció en silencio mirando al chico a su lado observándolo fijamente y provocando que los nervios del mayor aumentaran.

-¿Quieres comer algo?.-Preguntó intentando romper el hielo, el mejor asintió y extendió sus brazos para que lo cargarán.

MinHo lo intentó, siendo algo torpe con su manera de sostenerlo, el mejor aún tenía sueño, por lo que no le importó dejar caer su cabeza en el pecho del mayor.

"me vas a llenar de mocos y lagañas"
Pensó el moreno.

Era difícil cocinar teniendo al pequeño en sus brazos, por lo que lo sentó en una silla y comenzó a buscar en el refrigerador algo para comer.

-¿Huevos?

El menor asintió sin importarle mucho, por lo que MinHo comenzó a cocinar siendo un poco torpe, esperaba que el sabor fuera lo más rico posible para el niño.
Al terminar lo sirvió en 3 platos y se dirigió en ir a despertar a su marido.

-Cariño, tu hijo y yo ya vamos a comer. ¿Nos acompañas?

-Es nuestro, ya sabes, nuestro hijo, si iré.

MinHo simplemente le dio un corto beso en sus labios y juntos se dirigieron a la cocina, el menor ya estaba comiendo sin esperar a los mayores, el mayor simplemente veía con decepción todas las migajas que caían del plato. Como no tenían palillos entrenadores, aquel había comido con las manos.
Sin pensarlo decidió comenzar a limpiar aquellos restos tirados, siendo algo inútil, pues el niño seguía tirando. Al final decidió rendirse y procuró ponerse a comer antes de que su desayuno se terminara.

Cuando el pequeño terminó silenciosamente dejó su plato en el lavadero y se volvió a sentar en su silla.
El pequeño miró que sus manos se encontraban sucias por la comida y justo iba a limpiarse en la ropa cuando su padre Tae le ofreció una servilleta, pero este no sabía usarla correctamente, por lo que su padre pacientemente le ayudó.
Acto seguido le prendió el televisor para que el pequeño fuera a buscar entretenimiento, y acertó.

-¿Ya le comentaste a tu familia sobre él?.-Preguntó MinHo de forma seria y un poco cortante.-Dijiste que lo dejarías con tu madre.

-No... Realmente no sé qué es lo que diré, solo sé que se burlaran de mí y sí, de seguro ella querrá cuidarlo.

-Entonces diles que es adoptado.

-¡No!, es mi hijo, tiene mi sangre.

-Pero no tu apellido, está registrado como Koh SeungCheol.

-Koh SaeBom. S-A-E B-O-M.-Repetía como cuando un niño aprendía a pronunciar y saber diferenciar las vocales.

MinHo claramente no repitió el nombre de niño y simplemente continuó esperando una respuesta a su pregunta.

Por lo que TaeMin miró al menor y soltó un suspiro decidido en ir a contarle a sus padres acerca de su nieto que no sabían que existía.
Solo tenía que idear un plan de cómo hacerles llegar la noticia.

Pero cómo siempre, no suele tener buenas ideas, había decidido dar una pequeña visita a la familia Lee.
No quedaba tan lejos de su departamento, así que podrían ir caminando sin ningún problema para el infante.
Solo esperaba una aprobación de su madre y la burla de su hermano hacia él.

MinHo, Tengo Un Hijo... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora