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MinHo y SaeBom habían sido los primeros en caer dormidos, así como también, fueron los primeros en despertarse. Ambos se encontraban desde muy temprano en la recámara del menor preparando algunos osos de felpa y una prenda de emergencia para llevarse con la persona que lo cuidaría aquel día.

-Bien SaeBom, recuerda, el tío DaeHyun quiere un hijo, pero la tía SeolYeon dice que aun no esta lista, entonces, trata de ser lo más adorable qué puedas, para que ella pueda convencerse así misma a ser mamá.-Aquella era su excusa perfecta, en colaboración con su amigo universitario, ya que, en la realidad, simplemente quería un tiempo a solas con su marido.

Con la llegada del niño, ya no tenían tanta intimidad y tiempo a solas como antes, por lo cual extrañaba esos momentos.

TaeMin había sido el último en despertar, comenzó a hacer un desayuno, y antes de irse comieron tranquilos juntos.
Al terminar SaeBom recibió un abrazo de despedida de su padre Tae y tomó la mano de su papá Min quien lo llevaría a casa de su amistad.

-¡Tae! Recuerda, tardaré treinta minutos, quiero que estés preparado.

Mencionó con una sonrisa ladina esperando que su esposo se preparara de la manera más sexy posible.

TaeMin por su parte solamente había reído, tomó asiento recordando lo que  la chica le dijo y volvió a caer en la duda, aprovechó qué su marido se había salido de casa y comenzó a buscar en el Internet imágenes de mujeres, las veía y después veía si tenía algún efecto en su cuerpo, después hizo lo mismo pero con hombres y analizaba su resultado, detuvo una imagen en un cuerpo grande y musculoso, de piel morena, por un momento imaginó el rostro de su marido y comenzó a observar qué su entrepierna se había emocionado.
Dicho experimento, soltó un suspiro relajado, y decidió correr al baño a llenar la bañera, añadió aromantizantes, sales, y se retiro su ropa por completo, se dirigió a la cocina y en dos copas sirvió algo de vino qué habían estado guardando para un momento especial, llevándolo al baño a esperar a su marido y darle aquella sorpresa que tanto anhelaba.

MinHo en el recorrido a llevar a su hijo, iba tranquilo relamiendo una qué otra vez sus labios imaginando en que locura podría estar planeado su marido cuando este llegará a casa.
Sus pensamientos se interrumpieron cuando el menor mencionó una palabra.

-Papá.

MinHo lo miró por el retrovisor esperando que mencionara alguna otra palabra, qué no artículo alguna otra, por lo que, decidió detener el auto en algún estacionamiento de alguna tienda de convivencia y se dirigió a la parte trasera del coche.

-¿Qué ocurre Bom? ¿Superamos el miedo que tenias verdad?.

El menor asintió y señaló el cinturón de seguridad, MinHo lo retiró, sin entender las acciones del menor, este al sentirse más libre aprovechó la cercanía con su padre que decidió darle un abrazo.
El mayor solamente se sorprendió ante tal acto, pero todo había sido un truco para que SaeBom lo bajaran del coche.

-¿A dónde quieres ir?

MinHo seguía con el pequeño en brazos, este le señaló la tienda, por lo cual ambos se adentraron a esta, pasearon por algunos pasillos, hasta que el menor se detuvo al ver unos jugos con el empaque de un personaje reconocido por todos los niños que sale en televisión, lo señaló.

MinHo simplemente soltó un suspiro y decidió llevar uno, al caminar cerca de la caja de cobro, observó algunos condones, surgió un pensamiento de quererlos llevar, pero no lo hizo al recordar que el menor estaba presente.

-Qué adorable niño, se ve que ama mucho a su papá, ¿no es así?.-Mencionó la cajera adolescente qué cumplía con su trabajo de medio tiempo, esto se sabía debido a que a lado del escaner para checar el código de barras de los productos tenía algunos cuadernos, parecía que hacía alguna tarea escolar.

SaeBom simplemente ocultó su rostro en el gran pecho de su padre, ya que, no le gustaba que la gente le dijera cosas, por más lindas que eran, la cajera soltó una pequeña risa.

-Qué tierno.-Mencionó, después cobró, la chica miró en su cuaderno qué tenía algunos stickers del personaje que estaba en el jugo y decidió tomar uno.-Toma, es para ti.

Le ofreció con una sonrisa la chica el sticker al menor, SaeBom lo miró, lo tomó y de nuevo se ocultó. Su padre agradeció por el gesto y se dirigieron al auto.

Mientras, MinHo le colocaba el cinturón de seguridad a su hijo, pero este solo sonreía mirando el sticker y su jugo.

-SaeBom, deberías ser más amable con la gente que es agradable.-El menor no le colocaba atención, por lo cual MinHo tomó el sticker y volvió a repetir su oración.

Dicha acción provocó qué el menor se enojara con su padre, pero a MinHo no le importo aquello, de esta forma tomaron rumbo a la casa de DaeHyun, pero SaeBom al estar enojado no quería dejar el coche, quería de vuelta su sticker.

SeolYeon trató de ir por el niño con sus dotes de amabilidad femenina, pero este solo había comenzado a llorar.
MinHo pensaba que lo llevaba bien, sin embargo, se estaba descontrolando todo y estaba perdiendo la cordura.

Tomó su movil y llamó a su marido.

-¿Ya vienes?.

-Tenemos un problema.-No fue necesario mencionar el motivo de la situación debido a que de fondo se escuchaba el llanto del menor.

-¿qué le hiciste? ¡Ya voy! Espera, estoy desnudo, me tardaré un poco.

-¿Desnudo? ¿Qué hacías desnudo?. -MinHo intentó cambiar la conversación.

-¡Choi MinHo!, no es el momento, dime, ¿qué le paso a SaeBom?

-Nada, solo le quité un sticker, y ahora no se quiere bajar del coche.

-¿espera que?.-TaeMin ya se encontraba colocándose su ropa de nuevo y se detuvo.

Fue en ese momento en que sabia que TaeMin podría molestarse, y no le daría cariños como deseaba, por lo tanto decidió devolverle el sticker al menor, de esa forma calmó el llanto, pero ahora anhelaba a su papá Tae, debido a que mencionaba la palabra "papá" pero negaba al ver el rostro de MinHo.
El Moreno le dio su jugo y poco a poco comenzó a calmarse el menor, además habían colocado la llamada en alta voz para que el menor pudiera calmarse al escuchar la voz de su progenitor.

-Tae, lo tengo todo bajo control, te veré en la casa dentro de poco.

Gracias a las palabras de TaeMin hacia el menor, este había logrado bajarse del auto y permanecer un tiempo con los amigos de sus padre.

Cuando MinHo llegó a casa observó a TaeMin con ropa para nada excitate.
A MinHo no le importó y lo primero que hizo él fue retirar sus prendas en frente de su marido, Con aquella acción, TaeMin sonrió acercándose a su marido, le abrazó, colocando sus manos en los bolsillo traseros de su pareja, sintiendo una bolsita dentro, lo sacó y sonrió.

-Sabor fresa chocolate, quiero probarlo.

Sí, de regreso, MinHo había pasado a otra tienda para cumplir aquel pensamiento que había tenido anteriormente.

DE esta manera habían logrado ambos lo que tanto querían, unirse de nuevo a uno solo. Entre besos, acaricias y placer.

No importaba la hora, ellos querían disfrutar todo el día para ellos mismos, si SeolYeon o DaeHyun les hacía alguna llamada, estos contestaban pero colgaban de inmediato, o simplemente no contestaban en señal de lo ocupados qué ambos se mantenían.

MinHo, Tengo Un Hijo... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora