¿Quién eres? [hyewon]

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El concierto fue tal y como lo imaginé; podía sentir el brillo de mis ojos al escuchar la melodía de los violines sonando al ritmo del piano. Tuve que mantener mis manos quietas para no aplaudir cada vez que una nueva canción comenzaba a sonar, ahí sentada sentía que nada podía ser más perfecto.

Lo mejor era que Hyejoo estaba a mi lado para compartir todo momento a excepción de unos diez minutos que ha salido a toda prisa para ir al baño. Y además, a pesar de que su mirada estaba más puesta encima mío que en el enorme escenario, sentí que lo disfrutó casi tanto como yo.

Ella no dijo ninguna palabra en todo el concierto y yo tampoco; ambas nos concentramos en la música.

Bueno, al menos yo lo hice.

Nos subimos de vuelta al auto cuando son las siete y cinco. Hyejoo enciende la radio después de subir de su lado y ordenarme que me abroche el cinturón de seguridad.

No tengo palabras en este momento para agradecerle lo que acaba de suceder, así que simplemente me inclino un poco hacia ella en el auto y le doy un beso en la mejilla.

Inmediatamente me separo y ella fija la vista en mi como si estuviera completamente sorprendida. Una enorme sonrisa se expande por su rostro.

- Me estás matando Chaewon - dice, abriendo un poco su ventana.

El cielo también ha colaborado; afortunadamente, no hay señal de que haya llovido y las nubes no me indican que vaya a suceder.

- ¿Matándote? - pregunto, alzando una ceja.

Hyejoo vuelve a girar su rostro a mí y fija sus ojos en mis labios durante varios segundos; luego mira hacia todos lados como si alguien nos estuviera espiando y rápidamente toma mi rostro en sus manos para besarme.

Me ha tomado por sorpresa así que me alejo un poco al principio, pero luego de un segundo también tomo su rostro en mis manos y le sigo el beso.

Si alguien me preguntara alguna vez cómo se siente besar a Hyejoo, entonces yo diría que es la sensación de estar en el paraíso. Es la sensación de querer hacer algo durante toda tu vida sin parar. Es la sensación de felicidad, de amor, de adrenalina y miedo.

Miedo. Eso es lo que siento cuando estoy besando a Hyejoo.

Tengo miedo de amarla; tengo miedo de llegar a amar a Hyejoo.

Mierda, estoy asustada a más no poder.

Ella es una chica diferente, todo el que la conoce dice que no trae nada más que problemas, como si se llevara consigo todo y a todos.

Ella es capaz de derribar esquemas, de hacerte creer en los cambios, de detener tu corazón solamente con una mirada, de poner tu mundo de cabeza solamente con decir tu nombre.

Ella es genial y todo el mundo lo sabe, todos quieren hablar con ella. Todos tienen algo de curiosidad de saber quién es realmente, todos quieren intercambiar una palabra para saber que se siente.

Hyejoo es un mundo alterno a todo el resto; es un planeta que trae consigo estrellas fugaces del espacio, pero sólo consigue llevarse meteoritos.

Es buena. Yo lo sé.

Simplemente lo sé; pero tengo miedo.

Tengo miedo de que ella se vaya o de que yo decida hacerlo, de descubrir algo que no debía o que me diga cosas que no quería escuchar.

Pero por sobre todas las cosas, me da miedo llegar a amarla.

Y aquí estoy; cada día más encantada con ella. Más amante de su mirada o de la manera en la que hecha su cabeza hacia atrás cuando algo le da mucha risa; fanática de la ropa que nunca parece quitarse y de su caminar pausado trayendo ambas manos en sus bolsillos. Amante de la manera en la que se pone el cigarrillo en la boca y lo deja ahí cuando está haciendo otra cosa en vez de tirarlo al suelo; de su mirada siempre seria y el hecho de que nada parezca preocuparle demasiado. Estoy rendida ante sus labios pronunciando palabras que no siempre comprendo y su voz tarareando las canciones de la radio; que me encanta que me tome la mano de vez en cuando, que me llame con sobrenombres y que le hable de mi al chico de primaria que tiene de vecino. Me declaro amante de su perfume y el hecho de que le ponga miel al café. Que adoro cuando se distrae en los semáforos en rojo, solamente por estar mirándome y que sea la única persona que conozco que pueda hacer que todos se callen y desaparezcan solamente con cruzar miradas.