¿Quién eres? [hyewon]

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Despierto de golpe. Es el sonido de mi celular que no deja de sonar, qué fastidio. Miro la hora y son las diez de la mañana, demasiado temprano para levantarse el primer día de invierno del año.

Tuve un sueño muy raro en el que comía una pizza de pepperoni y de la nada se comenzaba a transformar en una pizza con piña. Más bien no fue un sueño; fue una pesadilla. Menos mal que desperté, porque pensándolo mejor, no me hubiera gustado seguir comiendo una pizza que no tuviera esos círculos rojos que me encantan.

Estiro los brazos. Mi celular suena otra vez pero ahora es un mensaje de texto; suena de nuevo y de nuevo y cinco veces más después de esa.

Apenas puedo abrir bien los ojos todavía.

Deslizo la pantalla de mi celular para ver quien molesta tanto, con la esperanza de que esas impertinentes interrupciones sean de Hyejoo. Todavía puedo sentir en mi nariz su perfume; lástima que duró lo que duró la canción, y luego todos tuvimos que volver a clases. Si hubiera sido por mí, me hubiera quedado hasta la madrugada, y probablemente ahora no estaría recién despertando en mi cama, estaría recién despertando en el techo del teatro con Hyejoo a mi lado y su chaqueta tapándonos los cuerpos, o sus brazos haciendo fricción en los míos.

Unas mariposas me recorren el estómago y sacudo mi cabeza, un poco sonrojada. El nombre de Kim Lip aparece en la pantalla junto con una foto que me acaba de enviar.

La abro. Hay una chica sacando una foto con el teléfono celular en frente de un espejo, tiene el cabello negro y algo corto y... Un momento, ¡esa es la cara de Kim Lip!

Me restriego los ojos un poco con las manos y los abro bien. Si, es ella, es su cara, el maquillaje que suele ocupar siempre, la misma playera que lleva a la escuela y estoy completamente segura de que ese también es su baño. Los mismos adornos; todo igual.

Leo los mensajes que vienen junto con la foto:

"¿Qué tal se ve?"

"¿En serio, tan mal que no respondes?"

"¿Estás durmiendo?"

"Despiertaaaaaaaaa necesito que me digas que te parece ahora mismo"

"Chaewonnnnnn por Dios"

"Chaewon, ¿estás ahí?"

"Se ve horrible, ¿no? Di la verdad, no me enojaré"

"Dime que me queda bien o te voy a partir la cara Chaewon, te lo juro"

Sacudo el rostro un poco anonada. Estoy escribiendo que se ve genial, aunque todavía no lo sé, ese color no pega mucho con ella, pero no se supone que se lo diga, ¿o sí?

Antes de enviar el mensaje mi teléfono comienza a sonar, pero es el tono de llamada. El nombre de Kim Lip aparece en la pantalla. Deslizó para contestar; ella está con la respiración algo agitada.

-Al fin, Chaewon- suspira ella, aliviada de que por fin respondí - ¿qué te parece?

Me quedo dudando durante unos instantes; este es el momento exacto en el que elijo si ser una buena amiga y decirle que me gustaba más su cabello rubio o ser una pésima amiga y decirle que me encanta.

Prefiero no ser ninguna.

- ¿Qué pasó con el rubio? - preguntó algo confundida. Kim Lip suelta un quejido.

- Me tenía aburrida y ya lo llevaba mucho rato- explica.

- Te lo cortaste- prosigo.

- Solo un poco, es lo que se lleva...- dice, esperando que yo le diga algo más. Me quedo en silencio.