¿Quién eres? [hyewon]

07

Cuando llego al teatro ella ya se encuentra aquí. Está barriendo lo que yo no he terminado de barrer el día anterior. Sus ojos se posan en mi en cuanto cruzo la puerta y deja de hacer lo que estaba haciendo para sentarse en uno de los asientos y dirigirse hacia mi.

- Chaewon- me dice.

Cada vez que me ve solamente dice mi nombre, es como si fuera su saludo. He esperado toda la mañana para llegar al teatro y hablar un rato; lo más penoso es que no sé si es porque quiero hablar con ella o porque quiero hablar con alguien.

Cualquier persona.

- Hyejoo– le respondo yo. La verdad es que he pensado en qué le puedo preguntar, pero no se me ha ocurrido nada. No quiero cagar todo simplemente por preguntar algo que no debería o que es muy personal y ella piense que soy una intrusa intentando meter mis narices en su vida.

- ¿Qué tal estás? - apoya su cabeza en el asiento que está en frente de ella. Sus ojos siguen puestos en mi.

- ¿Esa será tu pregunta de hoy? -alzo una ceja. Ella se ríe y niega con el rostro.

- No, yo te diré cuando la sea.

- Ah.

Nos ponemos a ordenar como lo hemos hecho ayer; solamente que ahora ella está barriendo y yo soy la que está con el paño. Me pongo a limpiar los asientos que están llenos de chicles pegados o salsa de algo.

Prefiero no saber de qué.

Hyejoo se ha puesto sus audífonos y me da risa darle vistazos de vez en cuando porque barre al ritmo de la música. Ella ni siquiera se da cuenta de que yo la estoy mirando.

Me pongo mis audífonos también, cierro los ojos. Limpiar no es tan malo como me parecía hace un día atrás.

Mientras limpio pienso en qué es lo que puedo preguntar a Hyejoo cuando sea el momento de las preguntas; quizás deba preguntarle algo que todo el mundo se pregunta, así no pensará que soy una chismosa o algo.

Quizás deba preguntar cuál es su color favorito, o su comida favorita, o qué nombre le gustaría ponerle a su hija si es que quiere alguna.

Ahora mi canción cambia, me encanta esta canción. Sin darme cuenta, comienzo a menear mi cuerpo al ritmo de la música. Mi mano está limpiando ese asiento como si fuera algún bailarín de algún grupo de baile.

Pronto comienzo a ir hacia adelante y hacía atrás mientras la batería suena en mi cabeza.

Me doy la vuelta y Hyejoo está sin audífonos y riendo. Mis mejillas se enrojecen un poco.

- Es una buena canción- me explico yo. Ella se encoge de hombros.

- No escucho desde acá- dice ella, y comienza a correr hasta el escenario. Abre las cortinas y se mete dentro de la pequeña sala donde se encuentran los equipos de música. Ella asoma su cabeza por la puerta- Dame tu mp3.

Yo sin decir nada me dirijo hasta donde se encuentra ella y saco el mp3 del bolsillo de mi pantalón (si, hoy día ando con unos pantalones ajustados, y el mismo suéter de ayer) y se lo paso a ella.

Nos encontramos las dos en la pequeña, pequeña, pequeñísima sala de los equipos de música. Donde estoy puedo oler su perfume de lavanda y mi mano está rozando su chaqueta. Ella está concentrada buscando el interruptor para prender la luz; una vez que lo encuentra, comienza a toquetear los botones hasta que da con el que prende el equipo de música.

Conecta mi mp3 en uno de los parlantes, y no sé cómo, pero mi música comienza a sonar en todo el teatro. Ella sonríe.

- Bingo- me dice, mirando hacía mi dirección. - me gusta- se refiere a la canción. Yo me quedo quieta donde estoy.