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La mañana calurosa de verano nunca se sintió tan pesada como esté día en particular, ni siquiera fue capaz de comer bien sin tener que recordar esos días de secundaria junto a Mikey, estaba tan absorto en sus pensamientos que apenas notó cuando el...

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La mañana calurosa de verano nunca se sintió tan pesada como esté día en particular, ni siquiera fue capaz de comer bien sin tener que recordar esos días de secundaria junto a Mikey, estaba tan absorto en sus pensamientos que apenas notó cuando el teléfono comenzó a sonar. Hoy tenía que abrir el taller más temprano, ya que había mucha demanda por las pandillas juveniles, aunque no eran tantas como en su época pero había suficientes para saturar su taller de pedidos.

Inupi era una gran ayuda, pese a que estaba algo nervioso de trabajar a solas con un omega, pero al final resultó no ser tan mala idea siempre y cuando ambos respeten el espacio del otro; Draken veía al rubio como un gran amigo y una excelente ayuda, Inupi sentía lo mismo y ambos al final pudieron entablar una buena amistad. 

Regresando por un momento a la realidad, el hombre toma el control remoto y enciende la tele para ver las noticias.

«En otras noticias, a pesar de los grandes esfuerzos que ha hecho la policía hasta ahora, se ha decidido dar por finalizada la búsqueda al joven Takemichi Hanagaki, de quién se especula ha sido raptado por la organización criminal Bonten y posteriormente privado de la vida...»

Ni siquiera se molestó en ver completo el boletín, inmediatamente cambió el canal en busca de algo más agradable para ver.

Ay Mikey... — exclamó con fastidio el alfa. — de todas las atrocidades que has comentado hasta ahora ¿Por qué Takemichi? — se preguntaba al sintonizar un canal infantil; aún a la fecha le costaba asimilar que el que fue su mejor amigo, la persona que se molestaba si los Taiyakis de agotaban o si el menú infantil no venía con banderitas, podría ser capaz de hacer algo así.
Quería pensar que todo era amarillismo de la prensa y Takemichi simplemente huyó, pero tratándose del Mikey de ahora ya no sabía exactamente qué pensar.

El día que Takemichi desapareció recordaba haberlo visto algo nervioso, en aquella ocasión tuvo un repentino interés por saber algo de Mikey, y aunque no entendía porque de la nada deseaba tanto saber, decidió ayudarlo con lo poco que sabía; si tan sólo hubiera sido un poco más inteligente se habría negado y lo persuadiría de volver a casa, pero ahora ya no está.
No quería creer que Mikey pudiera ser capaz de hacerle algo tan horrible, considerando que aunque al principio fueron amigos por capricho del rubio, finalmente su amistad se volvió sincera y llegó a escuchar a Mikey decir algunas veces que él era su persona. Pero con todo el historial de crímenes que tenía encima ya no sabía si creer en el Mikey de hace doce años o en lo que la prensa local dice del nuevo Mikey.

𝓓𝓮́𝓯𝓮𝓬𝓽𝓾𝓮𝓾𝔁 - 𝓣𝓸𝓴𝔂𝓸 𝓡𝓮𝓿𝓮𝓷𝓰𝓮𝓻𝓼 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora