Capítulo 12

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"El miedo ciega." José Saramago.


Jessamy.

El baile de primavera era uno de los mejores que realizaba el instituto cada año, este año sería legendario. Lo presentía. Como la mayoría de estudiantes que buscaban sus vestidos y sus trajes, ellos hacían lo mismo.

El trío de amigos había decidido esa tarde salir a buscar sus atuendos antes que la fiebre del baile arrasara con los trajes, aunque muchos otros estudiantes ya habían empezado a buscar.

Jess esperaba un tanto impaciente a que su amiga saliese del vestidor, ella era un tanto indecisa cuando se trataba de hacer compras, se tardaba muchísimo en decidirse por algo. Al menos tenía el consuelo de tener la compañía de Dick, que parecía estar sumamente concentrado jugando en su móvil.

─ ¿Qué haces?

─ Me han quemado mi casita en Minecraft, ¿lo puedes creer? ─ se quejó ─. Pero me las van a pagar, esto no se va a quedar así.

─ Oh, lo lamento tanto ─ dijo apenada ─. ¿Y qué harás al respecto?

Él tardó unos segundos en responderle.

─ Lo tiraré de un precipicio y tomaré todas sus pertenencias, ya que, el idiota no suele guardarlas en su casa porque varias veces han entrado en ella. Por lo que deduzco que carga con ellas.

Jess no comprendió muy bien a qué se refería, usualmente nunca sabía de lo que él hablaba, pero, de todas formas, le preguntaba para no ser tan mala amiga. Dick era un chico tan dulce y simpático, debido a esos atributos podía comprender de su pequeño flechazo hace un par de años. Y claro, entendía el por qué Mikayla había caído en sus encantos.

─ ¿Qué te parece? He adoptado un perrito ─ le mostró la pantalla de su móvil con una enorme sonrisa ─. Le tomaré captura y sacaré una fotografía para llevarla en mi billetera.

No pudo evitar sonreír ante tal acto tierno.

─ ¿Cuál será su nombre?

─ ¿Sería muy malo si le pongo Mika? Ya sabes, por el personaje de Owari no Seraph...

─ ¿Seguro que es por el vampirito ese? ─ alzó una de sus cejas, burlándose del castaño.

─ ¡Claro que sí! ¿Por quién más sería? Aparte, es mi anime favorito ─ titubeó.

─ ¿No era Darling no sé qué?

Darling in the Franxx ─ le corrigió apresurado ─. No, ahora lo he cambiado. Ya sabes que las personas somos seres inconstantes.

Del cosmos se desvaneció una estrella © (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora