Capítulo 36

32 7 81
                                    





¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


"No le pongas limites a tus sueños! Lucha por ellos... Tus sueños en acción darán vida a tu vida." Rubén D. Sequera.


Jessamy.

La graduación en la vida de un joven se convertía en unos de los días más importantes y memorables. Era el cierre de un ciclo con el cual han venido lidiando por años, se vuelve un adiós a esa etapa de la adolescencia que nunca más van a volver y un hola al mundo adulto. Mentiría si dijese que no estaba nerviosa ante ese hecho, el imaginarse ser independiente y forjar su propia vida le seguía dando un dolor de estómago que muchas veces no podía tolerar.

Se estaba despidiendo de la mejor época que había vivido para darle paso a una nueva, una donde no sabía que pasaría, pero que debía mantenerse fuerte a como dé lugar. Muchos de sus compañeros irían directo a la universidad, pero ella aún no estaba lista para ese paso. No estaba completamente segura si quería dedicarse a seguir estudiando y no era que no le gustara, pero en su corazón se veía cumpliendo su sueño de ser ciclista profesional. Viajar a nuevos lugares, conocer nuevas tierras y seguir teniendo a las personas que amaba aun a su lado.

Claro que no siempre las cosas salían como lo planeaba. Jasmin estaba irrevocablemente en su contra, ella luchaba constantemente para hacerla cambiar de idea y que se dedicara a algo que verdaderamente le ingresara dinero y tuviese una estabilidad económica solvente. ¿Qué le costaba entender que no quería ser como ella? ¿Tan difícil lo era? Entendía que quería su bienestar, pero empezaba a dudar que se tratara solamente por eso: Jasmin quería convertirle en su clon y no estaba dispuesta a permitir eso.

Por lo tanto, en castigo por su "rebeldía" le aplicó la ley del hielo y no se presentaría a su graduación. Lloró en su dormitorio a solas cuando se enteró, le dolía que su madre, la mujer que le había dado a luz y quien debería estar orgullosa de ella, no estaría presente en ese momento tan especial para ella. Y aunque su tía Isabel tenía miles de responsabilidades en Nueva York, voló solo para poder acompañarla. Eso le daba a demostrar muchas cosas que Jasmin nunca hizo.

A veces deseaba que su tía Isabel fuese su madre.

─ ¿Aquí es donde estudiaré? ─ preguntó un Jeff bastante asombrado cuando entraron al campus del instituto donde se llevaría a cabo la graduación.

─ Si tú quieres, hay otros institutos aparte de este ─ le respondió su padre.

─ Te ves preciosa ─ se acercó a ella su tía Isabel a la vez que le ayudaba a cargar la toga ─. Me encanta ese vestido blanco y el maquillaje.

─ ¿Será porque tú me ayudaste a elegirlo?

─ ¡Oh, con razón! Ya decía yo que era demasiada elegancia para que saliera de ti.

Del cosmos se desvaneció una estrella © (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora