Me Enamoré - C.V (Segunda temporada N.E.E)

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Marta

- Amor necesito un baño - dijo en voz baja.

Eleve mi cabeza que descansaba en su pecho y me miraba con pena. Avergonzado.
No se de qué tenía vergüenza.

Me levanté de la camilla y extendi mi mano hacia el.

- Vamos. Yo te ayudo - dije sonriendo.

Me miró fijamente y se quedó en silencio. Pensativo.
No se qué pasaba por su cabeza en ese momento. Peor estaba segura de que no era nada bueno.

- Chris. Vamos - repetí

- Yo puedo solo - respondió incorporándose para quedar sentado en la camilla.

Lo mire negando con la cabeza y me quedé a su lado.
Yo esto ya lo veía venir. Era un terco, orgulloso que no dejaba que lo ayudara.

Bajo los pies al suelo y se quedó mirando sus pies, sin moverse.
Respiraba rápido y en su frente comenzaba a verse algunas gotas de sudor.
Tenía miedo, estaba muy asustado.
A mí no me gustaba verlo así.

- Puedes dejar de ser tan terco porfavor? - extendí la mano hacia el, de nuevo

Levantó la cabeza para mirarme y seguía en silencio. En momentos como ese pagaría lo que sea para poder saber en qué carajos piensa.

Suspiro y agarró mi mano fuerte.

Se puso en pie y enseguida se agarró a la camilla con miedo.
Sus piernas temblaban y su respiración estaba acelerada.

Pase un brazo por su cintura, agarrandolo con fuerza y puse su brazo por mis hombros. Enseguida se agarró a mi camiseta.

- No me sueltes porfavor - suplico con miedo

Un nudo se había formado en mi garganta. Para el debía ser muy duro esto. Se le veia realmente mal.

- Jamás - respondí sincera, apretando más mi brazo en su cintura.

Si el caía, yo caía con el. No lo iba a soltar nunca.

En cuanto dio el primer paso, su pierna fallo y rodee su cuerpo con mis dos brazos para que no cayera.

- Tranquilízate mi amor. Vamos poco a poco - dije intentando calmarlo.

Se había puesto aún más nervioso.

- Me duele - jadeo con los ojos cerrados y pase una mano por su cara, tranquilizandolo.

- Yo se. Son 5 pasos hasta el baño. Si no puedes. Te acuestas de nuevo. No pasa nada.

- Yo tengo que poder. - respondió con rabia y se volvió a poner en pie.

Fue a dar un paso y otra vez ocurrió lo mismo. Sus piernas no respondían al caminar. Se podía mantener en pie con algún punto de apoyo, pero en cuanto iba a caminar, fallaban.