E-2

289 66 12
                                    

Después de la tan esperada boda, cada uno regresó a su propio reino. Por lo que Hyungwon regresó a su reino con su padre, igualmente, se enviaban cartas e incluso se visitaban.

Sin embargo, después de un mes de la boda, y de organizarlo todo, y con mucha insistencia, Wonho consiguió convencer a su hermano Saur, que tuviera una luna de miel con su esposa, quien desde la boda se quedó a vivir en su reino, siendo nombrada reina a partir del matrimonio.

Finalmente, Saur e Ivrisia se fueron de viaje no por mucho tiempo.

Tiempo en el que Wonho sería el “rey” hasta su regreso. En esos momentos que se encontraba solo, Hyungwon decidió ir a para ayudarle en las gestiones y también para estar con él.

Wonho era una persona más de estrategias, de estar con los soldados, no estaba hecho para estar en un despacho con papeles que firmar, a diferencia de su hermano y de Hyungwon. A pesar de que Saur le había dejado todo prácticamente hecho y organizado se agobiaba rápido. La ayuda de Hyungwon le resolvió muchos posibles problemas que hubiera provocado.

En una de las últimas noches que Wonho actuaría como “rey”, ambos príncipes se encontraban en la habitación de Wonho después de una jornada larga de asuntos que atender. Hyungwon había estado allí muy pocas veces, pero al ver el lugar con más detenimiento se convenció de que reflejaba la personalidad del dueño.

En silencio Wonho se deshizo de un par de sus prendas externas para aligerar su cuerpo y se sentó sobre la cama con cansancio, acción que fue imitada por el príncipe quien se había mantenido en silencio y quietud desde que habían ingresado al lugar.

—Hyungwon... —le llamó Wonho justo después de dejar caer todo su peso sobre la cama. —Hay algo que pasó durante la guerra y no puedo olvidar.

Hyungwon simplemente lo miró con curiosidad por lo que tenía que decir y después de un poco de duda también se dejó caer sobre la cama y se acomodó para estar acostado de lado y poder ver a Wonho con más comodidad.

En realidad Hyungwon también tenía cosas que quería decir acerca de la guerra y acerca de su futuro juntos. Durante las noches anteriores habían tomado parte de su tiempo para estar contándose historias, planes o deseos personales, pero no siempre tocaban el tema de su relación ya que en algún punto los dirigía al callejón sin salida de que formaban parte de la familia real y que todo lo bonito que estaban viviendo podría ser sólo una ilusión que se vería obligada a terminar algún día.

— ¿Quieres contármelo? —preguntó en un susurro.

El capitán asintió, se incorporó y se levantó de la cama para acercarse a la cómoda de su habitación, de la cual sacó un papel algo sucio y ensangrentado. Al ver las manchas de sangre, Hyungwon no pudo evitar preocuparse así que también se incorporó y se sentó sobre la cama al mismo tiempo que Wonho volvía.

— ¿Qué es? —preguntó con un tono de preocupación en su voz.

Wonho suspiró con pesar y se sentó junto a él.

—Es una carta de uno de mis hombres que murió en la guerra... —explicó con tristeza. —Cuando lo encontré se estaba desangrando y le prometí que le daría esta carta a su esposa. —Wonho sintió un nudo en su garganta al recordar aquel momento, pero se relajó un poco al sentir el brazo de Hyungwon rodeándolo por los hombros en un intento por consolarlo. —Me dijo que ella estaba embarazada… y él quería conocer a su hijo.

Su voz se entrecortó en la última frase y guardó silencio porque no sabía si sería capaz de retener las lágrimas. Entonces Hyungwon hizo que Wonho lo mirara y colocó ambas manos en su rostro, a la vez que le limpiaba las lágrimas que ya habían empezado a salir de sus ojos.

Timeless Donde viven las historias. Descúbrelo ahora