Capítulo 29: Casería Entre Cazadores

4 1 8
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

   Keyl caminaba por el parque para analizar su situación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

   Keyl caminaba por el parque para analizar su situación. Había poca gente en el lugar, parejas que sólo querían pasar el tiempo, personas trotando y haciendo ejercicio o simplemente gente que caminaba sin rumbo fijo, así como él.

   El sonido de su móvil interrumpió su caminar, al notar que era su compañero, respondió al instante.

¡Keyl! Te tengo buenas noticias—su amigo parecía animado y muy alegre.

—Sí, sí, no empieces y solo dime—tuvo que interrumpir la conversación, odiaba cuando su amigo se pone así en estos momentos.

Qué aburrido eres, pero bueno... ya encontré el lugar del torneo.

—Y bien ¿Dónde es?

—No me la vas a creer... en medio del océano—Keyl, al escucharlo, optó por una cara de pura confusión.

—¿Qué?—fue lo único que dijo.

—Así como lo oyes, pero no como lo piensas—James empezó a contar—todos los concursantes subirán a un buque, éste se dirigirá a una zona apartada y dentro de ese enorme barco se hará el torneo.

—Tenemos que hallar la forma de infiltrarnos—propuso el rubio.

Se aceptan sugerencias—le dijo su amigo.

   Keyl empezó a pensar en una solución, pero de repente, el sonido rígido de un arma cargando resonó en el lugar, seguido de los gritos despavoridos de las personas que empezaron a correr de un lado a otro en busca de refugio. Keyl se quedó quieto por un momento, y luego de suspirar le habló a su compañero.

—James, te hablo después, tengo que encargarme de algo.

Oh, siempre te toca la mejor parte, bien cuando te desocupes comunícate.

—Lo haré—Keyl colgó. Pudo ver por el reflejo de la pantalla de su móvil lo que tenía a sus espaldas.

   Estaba siendo apuntado con arma por un sujeto que ocultaba su identidad con un pasamontañas, ninguno de los dos hablaba, las personas corrían despavoridas por todo el lugar al momento de ver la pistola, hasta que finalmente toda el área fue despejada.

Niebla del InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora