Capítulo 3: Camino Infernal

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   Keyl sostenía al campesino desde el cuello de su camisa con la espalda contra la pared, su mirada de enojo contra él se veía a simple vista, mientras que el hombre tenía una expresión de miedo

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   Keyl sostenía al campesino desde el cuello de su camisa con la espalda contra la pared, su mirada de enojo contra él se veía a simple vista, mientras que el hombre tenía una expresión de miedo.

—¿Va hablar?—le preguntó el agente de cabello rubio de manera directa y amenazante.

—Señor Jaxon, le juro que yo...—intentó hablar, pero Keyl lo interrumpió.

—Usted lo sabía ¿No es así? 

—¿Qué?

—Usted sabía que esas cosas venían aquí por mí, es por eso que no quería que me fuera ¿Verdad?

   Chris no sabía qué decir, lo habían atrapado y no podía defenderse.

—Yo... yo—tartamudeó el hombre.

—¡Señor Jaxon, basta!

   Una voz se escuchó, a voltear Keyl notó de quien se trataba.

—Por favor, suéltelo—habló Katty, quien se acercaba.

   Keyl la vio, mas no le hizo caso. Volvió a ver a Chris y siguió interrogándolo.

—Me va a decir todo lo que quiero saber, si es que no quiere verme realmente enojado—sus palabras sonaban severas y se sabía que hablaba en serio.

—¡Escúcheme, no sé quiénes sean, se lo juro!—soltó el campesino ya desesperado—¡Esas personas nos han encerrado no solo a nosotros, si no varios pueblos, no podemos salir más allá de la zona que está bajo su poder, nadie sabe por qué ni cómo lo hicieron, pero desde aquel día, esas criaturas rondan por todo el lugar, masacrando a todo ser vivo que encuentran!

—¿Pero qué tiene que ver eso con usted?—pregunto Keyl.

—Uno de ellos se me acercó, no vi su rostro, tenía puesto una máscara. Me dijo que muy pronto vendrá el siguiente sacrificio, y si lo ayudaba a él y a sus compañeros me prometería una cosa.

—¿Qué le prometió?

—Libertad.

—¿Libertad?

Niebla del InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora