Mom says NO; Quackity & Staxx

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Muchas cosas sucedieron en un año después de que pasaron el 1er año y conocer el ambiente de la secundaria. Quackity se había vuelto un estudiante ejemplar y nombrado con el mejor promedio por encima de los demás cursos en 2do año y ahora lo era en 3er año, seguía los pasos del estudiante Samuel que ya estaba en su último año de secundaria aún manteniéndose como el mejor estudiante –ahora era el mejor de todo el colegio secundario–.

También hubo escándalo al descubrirse que el director se robaba parte del presupuesto del colegio para gastar ese dinero en cosas personales, todo gracias a la carta anónima que llegó a los supervisores y actuaron cuánto antes. Había sucedido porque Luzu y Quackity llegaron a un acuerdo después de que el vándalo le explicara porqué no debían permitir que ese sujeto se saliera con la suya y convencerlo de que juntos reveleran la verdad. Por lo tanto, durante finales del primer año de Quackity y la mitad del siguiente confabularon en contra del director y consiguieron que pagara lo merecido. Claro que no fué muy sencillo de realizar, varias veces estuvieron a nada de ser descubiertos, se arriesgaron bastante, Luzu fué el que tomó más riesgos pero cómo estaba tan dispuesto a hundir al director, el miedo no existía, y Quackity cada día creía que tal vez si era un chico increíble–como decía Lanita–, más también pensaba que le faltaba unos tornillos en la cabeza.

Éste era su tercer año, había escogido junto a sus amigas seguir el bachillerato en ciencias naturales, lamentablemente Rubius ya no los acompañaba porque eligió el bachillerato en ciencias sociales y humanidades junto con un amigo, Mangel. En su mayoría tenían entre 15 o 16 años de edad, encontrándose en el nivel intermedio de la secundaria, porque aquí escogías la orientación de estudio que se acercaba a lo que realmente quieras seguir estudiando después de la secundaria y llegando con eso la pregunta “¿qué vas a seguir estudiando?” o “¿qué carrera vas a seguir?”, desde ahí empezaba el planteamiento de sus vidas. Por otra parte, también estaban pasando por la etapa común dónde se sentían atolondrados, confundidos, extraños y demás, cada uno pasándola diferente pero estando en ese mismo sendero de la vida.

Dentro del grupo de chicas había cierta atención por parte de otros, iban creciendo y con ello se ponían más bonitas de lo que eran a los ojos de los demás. Akira era la chica más bella, seguida de sus amigas y quizás algunas chicas más de otros cursos, pero ellas eran llamativas al verse juntas por los pasillos de la institución. Algunos chicos se acercaban a buscar la atención de alguna y no les iba muy bien que digamos en sus intentos. Para empezar, Akira ignoraba a cada muchacho porque sólo se le iluminaban los ojitos al ver a Samuel y era todo lo que tenía su atención, acercarse a Nieves era imposible con Quackity y Rubius por delante, ninguno la dejaba sola y eso les impedía aunque sea hablarle. Mónica, Kristina y Dulce los mandaban al diablo directamente, siendo la azabache más grosera con ellos, y Lanita no prestaba ni la más mínima importancia al ya tener un chico en su mente. Era un alivio que no fuera cosa de todos los días, sucedía de vez en cuando, sólo que por ahora sería así porque aún les quedaba crecer más.