Mom says NO; Quackity & Staxx

15

Era un día muy alborotado, había una discusión afuera de la oficina del preceptor entre los estudiantes de 3ra A y de 3ra C debido a un accidente en el receso, un chico del A fue golpeado por un balón que le pertenecía a los chicos del C dejándolo con una naríz sangrando, tremendo balonazo recibió el pobre. Akira estaba ahí siendo sujetada por Rubén y Kristina ya que quería aniquilar con sus propias manos a los chicos descuidados porque el que había sido el desafortunado fue Quackity, quién estaba dentro de la oficina siendo atendido por la enfermera que llamaron y el preceptor. Entre forcejeo y forcejeo Akira se soltó del agarre de sus amigos, empujó a sus demás compañeros para ponerse delante de Alexa y darle un puñetazo al chico que discutía con ella, al instante de eso se impresionó pensando que se excedió con el golpe, notando que al chico le salía sangre por la naríz –como dice el dicho; ojo por ojo, diente por diente... ¿naríz por naríz?–.

——¡Akira! Pero tú tienes la mano muy pesada, ven aquí—. dijo Rubius alejando a la rubia de ellos.

Los compañeros del chico afectado empezaron a gritarle, pero sus compañeros defendían el accionar de Akira declarando que el muchacho se lo merecía por ser el culpable de que uno de ellos esté herido. El escándalo se hizo aún peor, los estudiantes de los salones cercanos salían a mirar lo qué sucedía, parecía que se iba a armar una revuelta entre el alumnado de los dos cursos. Sin embargo, el preceptor Willy salió de la oficina para detener el griterío, dejando en claro que no devolvería el balón y que los que jugaban con él estarían con una amonestación en su registro. Las chicas aprovecharon que el mayor estaba ocupado con aquellos e ingresaron a ver cómo estaba Quackity, quién se encontraba sentado con la nariz tapada para evitar que siguiera sangrando, la enfermera les dijo que estaría bien pero lo mejor sería que se fuera a su casa y que descanse su cabeza.

Nieves se acercó a abrazarlo con cuidado, se notaba en sus ojitos que estuvo llorando por la preocupación, le dió un besito en la frente a su amigo y le dijo que llamarían a su mamá para que se fuera a casa. Con escuchar eso Quackity sintió inquietud, si su mamá sabía de esto vendría hasta aquí escupiendo fuego como un dragón embravecido, no podía imaginar lo que haría al llegar aquí pero era seguro de que se alteraría muchísimo. De repente se dejó de escuchar bullicio alguno afuera, el preceptor entró a la oficina después de manejar la situación y darlo por terminado con varios nombres consigo qué debía agregar en su registro con una amonestación, el mayor miró a los estudiantes que estaban allí y se aproximó a preguntarle a la enfermera cómo estaba el chico, recibiendo la misma explicación que le dijo a los amigos.

——muchacho, tendré que llamar a tu tutor—. dijo después de oír a la enfermera. Willy tenía suerte de que se encargara de 3ra A, ya conocía a los estudiantes y a los padres, lo que significaba que ya sabría lo qué pasaría si llamaba al tutor del chico. ——chicas, regresen a su salón, él estará bien, tú también Rubén—.

El grupo se despidió de Quackity, Nieves volvió a abrazarlo antes de irse, tenía sus ojitos llorosos y, si no fuera porque Rubius se la llevó, se hubiera quedado ahí hasta que viniera Staxx. En la oficina se formó un silencio cuando las chicas y el chico se retiraron, Willy buscó entre sus archivos hasta encontrar la información de su estudiante y ver el número del tutor, procedió a llamar mirando al chico que permanecía sentado y mirando el suelo. El tutor tardó en contestar, al escuchar su voz Willy se quedó un poco distraído y se equivocó al hablar, disculpándose enseguida y comunicándole el accidente esperando a que se pusiera histérico con sus mil preguntas, estaba muy preparado para eso.