Amor a la medida

Capítulo 6

Agradézcanle a Poché este capítulo extra en honor a sus 27 añitos

lindo lunes

Happy Halloween

-Juan Carlos, bienvenidos a la humilde finca Calle-Germán recibió de brazos abiertos a su amigo quien se bajaba de la camioneta que el cafetalero le envió al aeropuerto para recogerlos- ¿Qué tal el viaje?

-Germán, amigo mío, déjame decirte que la finca es todo menos humilde, Joaquín nos hizo el favor de servir de guía de turista y vino señalando por el camino los límites de tus terrenos y ahora entiendo cuando dijiste que café les sobraba-el hombre regordete se abrazó al hombre de campo y al separarse vio cómo su hija se encontraba detrás de él sintiéndose excluida de la conversación del par de adultos- déjame presentarte oficialmente a mi hija María José, hija él es mi amigo Germán Calle.

-Un gusto don Germán -extendió la mano la pelinegra de manera educada para acto seguido ser tomada en brazos por el cafetalero siendo sorprendida por lo afectuoso que se portó con ella.

-Es un placer verte despierta María José, no tienes idea de lo difícil que fueron esas semanas para tu padre- soltó a la chica de la prisión que eran sus brazos y que habían lastimado un poco las costillas de la chica que se comenzó a sobar el área, acción que no pasó desapercibida- lo siento Majo, perdón si te lastimé, pero en verdad me alegro de verte fuera de esa cama.

-Descuide don Germán, solo evite la efusividad que aún no estoy recuperada un 100%-responde la chica colocándose de vuelta junto a su padre.

-Patrón -Joaquín llama la atención de Germán- ¿Dónde coloco las maletas de los invitados?

-Colócalas en el recibidor de la casa y ve a la cabaña de Daniela para avisarle que nuestros invitados ya están aquí para que no se demore-menciona el hombre a sabiendas que su hija sería incapaz de dejar la finca- de ahí te vas por los muchachos para que vengan por su pedazo de torta, ya el fin de semana haremos un festejo como es debido, pero hoy es un día especial.

-Como ordene patrón-toma las maletas- con su permiso señor, señorita- se despide de los Garzón acomodándose el sombrero y entra a la casa grande dejando las maletas en el amplio recibidor para después salir por la puerta trasera, tomar uno de los caballos que estaba en el establo y galopar con dirección a la cabaña de Daniela, sin embargo no fue necesario llegar hasta allá, ya que vio la castaña cabellera galopar junto a José río arriba por lo que se apresuró para alcanzarlos- niña Daniela ¿Qué pasa? El patrón me envió para decirle que sus invitados ya habían llegado.

-Maldición, ahora entiendo el por qué no me contestó el radio debe estar ocupado con los Garzón-dijo más para sí misma- las lluvias con las que amanecimos al parecer hicieron que uno de los arroyos de la sierra creciera en cause, tumbara algunos árboles que ahora obstruyen el paso y están desviando el agua, José y yo vamos para allá a inspeccionar la zona para saber si es necesario poner manos a la obra desde ahora o si podemos esperar hasta mañana.

-Yo creo que lo mejor es esperar a tener mejor luz, pero la patrona quiere revisarlo personalmente-menciona José- pero deberías de avisarle al patrón, así si la señorita hace esperar a sus invitados sabrán que no es un desaire.

-Por favor Joaquín, regresa con mi papá y dile lo que pasa, que si tiene alguna duda me llame al radio-menciona Daniela antes de retomar el camino dejando a Joaquín regresar a la casa grande, lugar donde Germán les hacia un recorrido por toda la casa a los invitados y ahora se encontraban en el atrio degustando las diversas mezclas de café que Daniela tenía para consumo personal de la familia y empleados, además de que las últimas semanas había estado trabajando en un licor que justo hoy estaría probando.