Primos Quinn +18 Joseph Quinn.

Capítulo 02.

Me levanté al parecer muy temprano, Joseph aún dormía, me dirigí a la cocina para prepararme un café, me senté en el sofá y por fin decidí mirar mi celular, el cual estaba repleto de mensajes de mis amigas.

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👑 Reinas 👑

📲 Kate:
Por favor, necesitamos
fotos exclusivas de Joseph 👀

📲 Sophie:
¿Es tan guapo como
en la tv? ☺️

📲 Lanna:
¿Estas viva?

📲 Kate:
Quizás le dio un
paro cardíaco al ver a ese
maravilloso hombre 🤤

📲 Amelia:
Sigo viva Reinas 💅

📲 Lanna:
No me jodas,
¿por que demonios no
nos contestabas? 😤

📲 Amelia:
¡Lo siento! 🥺 Estuve ocupada, desempacando y aprovechando el tiempo con mi querido primo.😌

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Estaban vueltas locas haciendo mil preguntas, incluso me preguntaban sobre su olor, Joe olía a una mezcla de shampoo, jabón, perfume y cigarro, podría describir su olor como "varonil".

Estaba estirada en el sofá, con el teléfono en mis manos, sentí pasos desde la habitación de Joe, mis ojos se abrieron como plato al verlo caminar desnudo, directo hacia la cocina, claramente no me había visto, tomó un vaso y se sirvió agua, me quedé inmóvil, viendo su espalda y su trasero, el cual estaba bastante bien formado, no sabía si hablar o no, decidí toser para hacerme presente, Joe se volteó sorprendido.

Joseph: ¡Demonios! - tapó su entrepierna con ambas manos - ¡Pecas lo siento, me olvidé que estabas aquí! - sus mejillas se enrojecieron instantáneamente, tal como las mías.

Amelia: No te preocupes, no vi nada - tapé mi cara con ambas manos.

Lo sentí correr hacia la habitación, al cabo de unos minutos volvió a salir, ahora vestido.

Joseph: Lo siento, de verdad lo siento - rascaba su barba nervioso, aún con sus mejillas enrojecidas.

Amelia: No conocía esta faceta exhibicionista primito - bromee para distender la situación.

Joseph: Ja ja, muy graciosa - rodó sus ojos - estoy acostumbrado a estar solo, no recordé que estabas aquí, me tomará un poco de tiempo acostumbrarme, pero definitivamente esto, no volverá a pasar, lo juro - alzó una mano para reforzar su juramento.

Amelia: Me parece justo, no quiero tener que ver tu pálido trasero otra vez - Joe alzó ambas cejas y reímos a carcajadas.

Joseph: Ve a bañarte, iremos a tomar desayuno.

Amelia: ¿Saldrás a la calle? - pregunté sorprendida - ¿no te traerá problemas?

Joseph: Conozco un lugar bastante tranquilo, además en Londres la gente es bastante, educada y respetuosa, aquí puedo salir sin tanta preocupación.