—No estás actualizando las redes sociales como deberías.
Alzó la mirada cuando escuchó a Nathalie hablarle. Ese día estaba más estresada de lo normal, y Marinette sabía que era por su culpa.
Para Nathalie, la puntualidad lo era todo, y ella se había permitido diez minutos más en su desayuno de asquerosos copos de avena, logrando que llegaran tarde al programa de radio matinal en el que iba a participar.
—He estado subiendo fotos de mi gata —se excusó—. Las he mantenido activas.
—Ese es el problema. Tienes que promocionar la marca Agreste, y eso quiere decir subir fotos de las prendas que dejamos a tu disposición, no de tu mascota. ¿No has entendido el objetivo de todo esto?
—Lo he entendido perfectamente. Pero creía que tenía libertad en mis propias redes sociales.
—Lamentablemente, no es el caso.
Marinette se contuvo de lanzar un grito de frustración. Odiaba el control que intentaban imponer en todos los aspectos de su vida.
—¿Adrien también ha vivido así? —preguntó sin poder evitarlo.
Por un momento pensó que Nathalie no la había escuchado, pero entonces esta la miró con algo de extrañeza.
—¿Qué quieres decir con eso?
—Obligado a hacer dieta, realizando entrevistas que no quiere, siendo controlado incluso por subir una fotografía de su gato... ¿Siempre ha vivido así?
—El señor Agreste ha intentado educarlo como ha podido, todo por el bien de Adrien. No siempre estoy de acuerdo con sus métodos, pero no entra en mi jurisdicción opinar.
—Parece que te has aprendido ese discurso de memoria —murmuró Marinette, sintiendo algo parecido a la culpa en su interior.
Llegaron hasta el edificio de la radio en cuestión de minutos, impidiéndoles hablar más del tema. Marinette se vio abordada por un par de guardias de seguridad que la obligaron a moverse lo más rápido posible, pues una multitud de fans había comenzado a agruparse en la puerta de entrada.
La entrevista comenzó con preguntas sencillas acerca de su cambio de vida. Igual que le pasaba a Nathalie, ella también tenía aquel discurso memorizado, por lo que fue fácil responderlas.
Durante la segunda mitad, el periodista se dedicó a leer preguntas que los fans habían ido mandando al Instagram del programa. Preguntas desde ¿prefieres a Chat Noir o a Adrien? Hasta ¿Ya has planeado cómo interrumpir la boda de Adrien?
Ante la última Marinette se quedó sin habla. Podía imaginarse a Alya sonriendo malignamente esperando su respuesta, quizá incluso había sido la responsable de aquel ataque. Sacudió la cabeza para concentrarse y buscar una respuesta adecuada.
—Tengo que aclarar que aquello solo fue una broma —respondió nerviosamente—. No pretendo interrumpir ninguna boda ni secuestrar al novio.
—Nadie ha dicho nada de secuestrar a Adrien, Marinette. —Sintió que se ponía roja. Agradeció que nadie más pudiera verla—. Tranquila, todos confiamos en que harás lo correcto, nadie va a juzgarte. —Le guiñó un ojo—. El usuario marichatCanonAlways quiere saber si habrías respondido un sí si Adrien te hubiera pedido matrimonio. Vaya, esta es muy buena. ¿Qué habrías respondido, Marinette?
Aunque la pregunta solo la hacía querer dejar de existir, fingió sentirse perfectamente bien antes de responder con la verdad.
—Si me lo hubiera pedido dentro de la casa, habría dicho que sí. Las cosas han cambiado ahora. Además, Adrien va a casarse con otra.
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¿Quién quiere casarse con un modelo? AU Adrinette
FanfictionEl concurso del año ha llegado, esta vez con la participación de Adrien Agreste, que tendrá que convivir durante unos meses con cuatro pretendientas totalmente diferentes que se disputarán su amor. ¿Quién será la favorita de Adrien? ¿Triunfará el am...