Il Casino Che Siamo

Capítulo 38

Andrea

Tú puedes, Andrea. Solo actúa como si nada ha pasado, como si no lo hubieras conocido, como si no es el hombre de tu vida, como si no lo quisieras besar como loca a cada nada.

Si, Andrea. ignóralo

No puedo, simplemente no puedo pasar por alto al hombre que esa sentado frente a su auto con varios chicos, no lo veo bien, aunque siga pareciendo el guapo e imponente Gian que hace babear a todas.

Ha pasado una semana desde que discutimos y me fui de la mansión, siendo mangoneada por Samantha.

Levanta la mirada como si sintiera la mía sobre él, tengo que decirle, sí. Tengo que decirle que nada de lo que dije ayer era cierto, que sé que no es culpable de nada, que lo amo con todo mi corazón y que nunca lo culparía de ninguna de mis desgracias.

Si le preguntaria el porque me oculto que sabía quién era mi padre, pero ya me lo imagino, siempre me quiere proteger de todo como si fuera de cristal.

-Díselo, Andrea. Tú puedes - Me doy ánimos preparándome para ir y decirle todo, aunque me arrepienta después - Vamos, Andrea. Te va a entender.

-¿A quién vamos a entender? - No, por favor, no. Ruego en mi mente cuando Igor se me aparece desde atrás rodeándome la cintura y recostando su cabeza en mi hombro- La niña no ira a contarle a su príncipe azul lo que hablamos hace una semana ¿o sí?

Siento la mirada de Gian, penetrante en mí y lucho para no voltear.

-Suéltame, por favor - Dice - Ese no era el trato.

-Las cosas cambian - Dice - y tu no eres la que decide que se va hacer o no. Hay viene tu principito. Ten cuidado con lo que haces o intentas porque no me importaría volarle los sesos en esta maldita universidad.

-No, por favor - Digo rápidamente - No hare nada, pero ya suéltame.

-Shhhh - Me acerca más a él y levanto la cabeza cuando siento su presencia.

-¿Por esto fue, Andrea? - Cuestiona y me quedo en silencio -¡¿Por este pedazo de mierda me dejaste?!

Grita lleno de colera.

-¿Querías que estuviera con los dos o que cosa? - Habla Igor detrás de mí - Es mi novia, debes superarlo.

Trata de írsele encima, pero me le atravieso para que no valla a armar un revuelco aquí. Baja su vista hacia mi observándome con decepción.

-¿En serio estas con este? - No contesto - ¡Contéstame, Andrea! ¿por esto me dejaste?

Mira hacia Igor como si fuera poca cosa y lo es, pero no puedo darle la razón.

-Si, Andrea, contéstale - Se acerca Igor a mi oído.

-Si - Digo simplemente - Por favor no lo hagas más difícil.

-Mentirosa - Dice envolviendo una mano alrededor de la mía, llevándome hacia el - Mírame y dime que me dejaste por él y que lo amas - Susurra solo para los dos -Dime que lo amas como me amas a mí, dime que te hace sentir como lo hago yo, Andrea.

Quiero gritarle que no, que el es el único hombre en mi vida y el único que me hace sentir así, como ahora. Sin pensarlo mirada se desvía a sus labios y al parecer se da cuenta porque se saborea a forma de provocarme.

Idiota.

-Vámonos - Dice sorprendiéndome, y mi mente me grita que sí, pero no puedo, no cuando lo único que puede ocurrir es una tragedia de la que me voy a arrepentir toda la vida.

-suéltala - Me toma Igor de mi otra mano y volteo hacia el viendo una advertencia clara en sus ojos - Aprende a respetar las novias ajenas- dice.

Gian se le va encima con su puño viajando hacia la cara de Igor quien termina cayendo al suelo.