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—¿Por que el agua sale negra? —mis manos estaban negras, tal vez la tubería se rompió.

Que asco, voy a vomitar como eso pase.

Me aparte viendo el agua salir limpia y mi mente tuvo una realización, tome el shampoo y vertí un poco en mi mano. No lo podía creer, era negro. ¡Tenía tinte! Me termine de bañar como pude y salí a la planta baja.

—¡Nicky! —salgo de mi habitación con la maños manchadas de negro y un recipiente —¡Nicky Ruiz!, ¡Juro que te voy a matar!

Llegue a la cocina, donde estaba Nicky y Dicky, comiendo de un paquete.

—¿Que paso? —miro desinteresado, luego noto mis manos manchadas de negro.

—Aplicaste tinte en mi shampoo, idiota —le mostré mi cabello ahora negro, sin mechones.

—¿Hiciste eso? Mierda, Dicky, nos va a matar —le susurro, pero obviamente escuche.

—Ah... es que fue Dicky —puse en tarro en la mesa y mire sus manos.

Sus dedos estaban ligeramente manchados de negro.

—Corre —Nick lo empujó.

—¿Por que correría?... —se asustó.

—Te va a tinturar ahora a ti —se ríe Nick y yo voy detrás de él.

—¿Que me va a hacer que? —rodeó la mesa, alejándose de mi.

—Nicky, si no lo detienes tú cabello ya no será chocolate, será negro, negro puro —lo amenace, dejo de comer y soltó el paquete, asustado.

Dicky corrió a la sala y lo seguí, se detuvo al ver la puerta con seguro. Yo sabía que Nick haría lo mismo. Por eso la asegure antes de ir a buscarlo.

—Maldición, nos encerraste —se giró, apoyado en la puerta, y lo jale de la oreja. Nick se comenzó a morder las uñas.

—No debemos llegar lejos, Aurora, no es como que te quede mal —se excusó Dicky.

—Oh, jamás dije que me quedara mal. Comprobemos que tan bien te quedará a ti —Nick se acercó —tráelo —.le dije.

Se intercambiaron miradas, para luego terminar forcejeando. Unos minutos después Dicky estaba sentado, mirando mal a Nick, quien se reía.

—Tendrás el glow up de tu vida, amigo —se siguió burlando.

Le puse una toalla para que no manchara la ropa.

—¿Me piensas ahorcar o que? —desajustó un poco el amarre que hice. Levanté mis hombros.

Me puse unos guantes y empape su cabello. Nick comenzó a grabar, mientras yo masajeaba su cabello, viendo cómo se tornaba de negro los mechones rubios.

Le puse una bolsa en la cabeza.

—Pareces una viejita, lo más chistoso que he visto este año, te amo, sis —apuntó el teléfono hacia mi.

—¿Si, me amas? Pues me amarás más ahora —.le toque el hombro a Dicky —,¿No te molesta que sea el único que esté disfrutando tanto?

Dicky se levanto a por el, no se pudo resistir. Termino sentado también con una bolsa es su cabeza. Tome mi teléfono y comencé a grabar y a tomar fotos.

—Me provocaron y miren los, teniendo una cita de belleza, los best friends for ever —me burle.

Nicky me saco el dedo corazón y Dicky me miro mal, tirándome la bolsa de su cabeza.

Luego de un rato, fuimos al jardín para lavarles el cabello. Tome la manguera y Nicky se inclinó, sacando la cabeza.

—¡Me estás mojando todo! —tocó su espalda —así no, Aurora. Tú y tus juegos pesados.

Una estupidez llamada amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora