Hola humanitos n.n espero sigan teniendo un bello día :) hoy vengo con ánimos de poner algo de acción 😈
PDV: Jazmin
>>Así que... Evangelion.
-No lo elegí yo.
-Pensé que sería ya sabes, por esa gala.
-No, ni siquiera me había cruzado por la mente. Kai me puso ese nombre el día que lo conocí. Dijo que lucía como un ángel pero estaba seguro que podía destruir todo.
-Claro, Kai- masculló moviendo la cabeza. Nos habíamos quedado ahí dentro conversando de varias cosas. Para ahora Yuzu ya sabía que estaba viviendo con Carlo y Pair, que había accedido a entrar a esto para manipular desde adentro y que había terminado siendo aliada del hijo del jefe, y que no estaba segura de qué pasaría después. Y yo sabía de cómo fue que le pidió a Carlo que me echara el ojo para asegurarse que estaba bien y de lo mal que la había pasado en las últimas semanas -. No quiero preguntar de nuevo sobre eo, pero el pensamiento no me deja. ¿Tú y él... Pues...?
-No tengo una relación con él, si es lo que te preocupa. Las cosas no cambiaron desde la última vez que te vi.
-Lo tengo claro, hablaba más de sexo. Es que ambos tienen esa aura sensual y aquellas veces que los vi juntos, pues... Me pareció que eran uno para el otro.
-No importa la impresión que te diéramos o lo que pasara entre nosotros, al final todo resultará una mentira. Por eso estoy aquí.
-¿A ti no te interesa lo que estuve haciendo?
-¿De qué me sirve saberlo? Escucha, que yo te hablara de mis relaciones pasadas fue porque quise y no porque debiera. Si tú no me quieres decir sobre esto del amante enmascarado, no me importa.
-Ah, ese estúpido nombre- bufó echándose contra el respaldo del sofá.
-Ni que lo digas, pensé lo mismo al escucharlo- hubo un silencio en que intercambiamos miradas.
-No tenías que ponerte en juego por mí, este lugar... Es un circo, y no de los buenos.
-No lo hice porque debiera, Yu. Supuse que ya lo habrías entendido.
-Sí, lo entendí con ese traje y tu mensaje. Que no estoy en deuda contigo.
-Ni yo contigo. Es fácil quitarte a los otros diciendo que haces algo por alguien más, porque no entienden el concepto "Porque quiero". La gente piensa que el mundo es un campo de intereses, se piensa que todo se hace para obtener algo. Y así actúan. Por eso el mundo está podrido.
-Tenías todas las razones para odiarme. Y aún así no lo haces. ¿Por qué?
-¿Tú puedes odiarme?- torció los labios como pensando su respuesta.
-Odio que no pueda estar contigo. Eres tan significativa para mí que... No te quiero como mi amante- fruncí el ceño confundida, no esperaba que usara esa palabra para nombrarme.
-¿Amante? Espera, pensé que... Que esto era... Que estaremos juntos otra vez- se quitó la máscara y me tomó la mano, su semblante no me daba buena espina y me puso alerta. El que se expusiera me dejó claro que era algo serio que si honor no le dejaba decir tras una máscara.
-No puedo, Jaz.
-Claro que sí. Renunciemos a todos esos ideales que nos separaron, sólo quiero que vuelva a ser como antes. Tú y yo contra el mundo y...
-Me voy a casar, Jaz- y fue en ese instante cuando todo hizo sentido en el taller. El vestido, el hermetismo, las visitas fuera de mis horarios, lo nerviosa que se puso esa chica de verme. Sentí la sangre abandonarme el cuerpo.
-Nikki...
-Sí, ella- suspiró con pesadez, ¿sentía culpa? Su semblante era diferente por completo -. Por eso le pedí a Satomi que te mantuviera fuera del proyecto del vestido. No imaginé que tendrías que suplir a una de las diseñadoras. Hubo un momento en que me pareció una pésima idea que trabajaran el vestido en tu lugar de trabajo, me incomodaba la idea de que te involucraras en la creación, pero en ningún otro lado habría confiado para mantenerlo en secreto.
En ese momento, lo primero que pensé no fue en el vestido y que me había topado cara a cara con su prometida y que evidentemente estaba nerviosa porque yo era la ex y sin duda creía que sería hostil por ello. Yo estaba ocupada no sabiendo de esto y de haber sabido ni siquiera habría reaccionado mal con ella, sólo me habría puesto a llorar en el baño... No, eso lo pensé tiempo después, el asunto que ocupó mi mente fue lo que le estaba haciendo a esa chica.
-¿Y has estado haciendo esta mierda de contratar prostitutas con todo y que estás comprometido?
-Desde que me comprometí estuve desaparecido, y aunque visité bares, no toqué a nadie... Pero tú... Jaz, eres mi debilidad, no pude... No puedo- me eché el cabello hacia atrás con pesadez y fastidio.
-Más de una vez me engañaron, lo sabes. ¿Sabes cómo me hace sentir ser ahora la tercera en discordia? ¿Qué sentiría Nikki si se entera? Y siendo que estás por casarte, no me importa esa mierda japonesa de que no es infidelidad si no hay amor porque sé lo que hay en tu corazón. Tú me amas, no me puedes sacar de tu ser y por ello pasó esto. ¿O acaso estoy equivocada?
-Jaz, no pensé...
-Exacto, no pensaste- mascullé arrebatándole mi mano y me levanté -. Hanyu, debí haberte hecho este ultimátum hace mucho pero no quería hacerte elegir entre tu pasión por el patinaje y tu amor por mí. Pero hoy sí lo haré porque es totalmente diferente; y lo que decidas, apégate a ello. No sigas lastimando en vano a alguien, y eso te incluye a ti. Es Nikki o soy yo- no pudo hablar entonces. Mi voz estaba cortada pero era dura.
-Jaz, yo...- caminé a la puerta y abrí con la esperanza de que saliera.
-Por favor vete, Hanyu- ordené sin poder mirarlo.
-Pero ni siquiera he hablado.
-Y por ello sé no me elegirías a mí como única opción o tienes miedo de romper lo que hay allá o estás indeciso. Yo jamás titubearía para elegirte, porque te amo y dejé todo atrás por ti y con gusto lo haría de vuelta si tuviese una reciprocidad. Pero nunca más seré segunda opción, de nadie. Y eso lo aprendí de mi tiempo contigo. Así que vete.
-No me voy a ir.
-Como quieras, pero yo sí- mascullé saliendo del cuarto privado.
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Cygnus: El trazo del hielo --- Terminada
FanfictionJazmin es vista por muchos como una chica problema pero es dulce bajo esa fachada. Yuzuru es... Bueno, es él. Luego de conocer a Jaz, la fangirl más extraña que se ha topado por en realidad tratarlo como una persona más y no sólo como su ídolo, Yuzu...