Más de media noche | Tom Hiddleston

CAPITULO 25

ANNE

El sabor del vino se hace presente en mi boca cuando bebo de la copa, con delicadeza la dejo sobre la mesa para después tomar los cubiertos con los que tomo un trozo de carne.

Miro a Mads quien me dedica una sonrisa que devuelvo, me invitó a cenar y no pude negarme, bueno, podía, pero en este mes me ha hecho varias invitaciones que había rechazado por falta de "tiempo", pero en realidad no tenía ánimos, no tenía cabeza para pensar en nada pero hoy acepté su invitación y ahora estamos en su casa.

Si, en su casa, no especificó cuándo dijo a dónde me llevaría a cenar, solo dijo que me invitaba, y ahora estamos en su casa, es linda, muy al estilo Londres, es elegante.

—Tu casa es muy linda— comento —Muy elegante, muy tu— sonríe.

—Me gusta este estilo, me da tranquilidad.

—Me imagino, ¿seguro que tu hijo no vendrá?

—Tranquila, no permitiría que pases por ninguna situación incómoda— lo miro a los ojos —Él vive con su madre, solo viene los fines de semana pero este se lo pasará en una cabaña con sus amigos.

—¿No fue difícil decidir con quien se quedaría?

—No, mi ex esposa y yo quedamos en buenos términos, en realidad nos divorciamos por que ya no éramos los mismos, ya no había esa química de pareja y para no arruinar lo que ahora es nuestra amistad, decidimos terminar a tiempo.

Eso es muy maduro.

—Debe de ser una gran mujer.

—Lo es, y dime, ¿tu cómo estás con el papá de tu hija?— desvío la mirada.

—Pues no tan bien— suelto una risa de nervios.

—Lamentó si mi pregunta te incomodó.

—No, no es Que...— lo miro —Mads, yo seré sincera contigo, mi vida últimamente no se basa en sinceridad y se que tú pretendes algo conmigo.

—Eso es correcto— respiro hondo.

—El papá de Lucille es Thomas Hiddleston— su expresión es la misma, no de sorpresa, solo me mira.

—Definitivamente no me lo esperaba— suelto una risa.

—Bueno tu expresión no me dice que estás sorprendido ni nada.

—Considero que las expresiones pueden ofender o hacer sentir mal a las personas cuando hablan de un tema serio— bebe de su copa —¿Quieres seguir contándome?

—Bueno...el y yo tuvimos algo hace años cuando mi papá lo estaba divorciando y de eso salió Lucille— pienso unos segundos —Y yo no le dije, lo supo hace poco, después de casi cinco años.

—Entiendo.

—Soy esa, la que no le dijo al papá de su hija que tiene una hija y yo entiendo si tu ya no quieres...

—Anne, yo no soy nadie para juzgarte, lo que hayas hecho, fue tu decisión, tus razones tuviste y bueno, a veces las personas nos equivocamos, es nuestra naturaleza— sonrío —Así aprendemos lecciones de vida.

—¿Lo crees?

—Estoy seguro— miro mi plato.

—La cena esta muy buena— cambio de tema —No sabía que cocinabas.

—Tengo mucho tiempo libre, me gusta aprender y hacer cosas, ¿quieres más?— niego.

—Estoy llena, ¿te ayudo con los platos?

—No lo permitiría jamás, ven— se pone de pie.

Lo sigo, vamos a la sala en donde me siento a observar como pone música en un toca discos y luego me da más vino.