Xiang Shen no pronunció ninguna palabra, aunque casi lo hace por la repentina aparición, pudo detener su lengua a tiempo. Su corazón dio un vuelco al darse cuenta de que este joven podría no ser su ex discípulo, y es que Xin Yuan jamás demostró ser un demonio. ¿Habría sido poseído su cuerpo? Quería preguntar demasiadas cosas, pero era inútil. Además de tener trabada la lengua y las palabras, decir su identidad o preguntar sobre asuntos personales lo podían dejar mal parado.
Todo se veía normal en el hombre, su piel pálida y joven, su cabello negro, la mirada afilada, amable y carialegre. Todo se veía natural, a excepción de esa energía. Xiang Shen prestó más atención y se atrevió a analizar las venas espirituales del cuerpo ajeno, ya que estaba siendo tomado por el otro, no era mala idea y tampoco sería sospechoso.
«Como pensé, por sus meridianos solo circula energía demoníaca, su núcleo y nivel de cultivo ahora es muy elevado, quién sabe cuanto y qué tipo de entrenamiento ha realizado para llegar a este nivel, asumo que ha sido... algo muy difícil y repleto de obstáculos. Lo mejor será ocultar mi identidad hasta que averigüe qué ha pasado con él».
—¿Uh? —sonrió Xin Yuan—. Veo que te has dado cuenta de mi energía, ¿es por eso que no dices nada? ¿Me temes?
Xiang Shen bajó su mentón, sin dejar de fijar su mirada en la otra persona.
—¿Qué buscas? —preguntó, casi atragantándose con su propia saliva—. ¿Tienes algo que ver con esto? ¿Por qué no sueltas mi cintura y mano para hablar?
—Voy en busca de una bestia que pasó por aquí. Creo que está cazando, y por lo que veo... —Analizó el cielo y los laterales de la ciudad—. La barrera que protegía la ciudad se consumió hace largo rato. Supongo que los soldados están ocupados en otros asuntos, no vendrán hasta que esa bestia haya matado a unos cuantos.
—Así que vienes a ayudar... —observó—. ¿Había una barrera protegiendo esta ciudad?
—¿No lo sabías? Hace ya tiempo que hay una, algunos dicen que es un dios quien la crea, otros dicen que es Xiang Feng. Sea lo que sea, ha desaparecido. ¿Y tú qué haces? ¿No se supone que no deben hacer magia los habitantes de este lugar?
—No es asunto tuyo... Si me disculpas, tengo que ir tras eso. Puedes irte a casa, los asuntos humanos no deberían mezclarse con los de los demonios.
—Oh... Lo siento, no me iré. —Sonrió el demonio—. No solo vengo en busca de esa cosa. En realidad, estoy buscando al compañero de esto —expresó con sus comisuras elevadas hacia arriba, mostrando con sus manos un objeto muy similar al que llevaba Xiang Shen—. Es un artefacto de recuerdos, veo que tienes uno ahí escondido, ¿ves cómo reaccionan? Hace mucho que estaba buscando a su compañero, y mira qué sorpresa, me ha servido dar la vuelta y visitar la montaña Xiang.
—¿Q-qué q-quieres? ¿Pretendes robármelo?
—Por supuesto que no —dijo tras una carcajada. El "abrazo" que sostenía la cadera de Xiang Shen se presionó más contra él—. Podemos llegar a un trato sin necesidad de pelearnos por él.
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Grulla Negra《Hēi Hè》
FantasyDespués de una muerte trágica en un pasado dudoso, Xiāng Shén renace en un nuevo cuerpo. Ligado a su alma, viajó un artefacto de recuerdos que él mismo creó antes de morir. Movido por el deseo de recuperar el tiempo perdido y olvidado, comienza un...