—Hija, ¿qué tienes? No has probado nada de la cena —mamá señala mi plato y yo suspiro.—No tengo hambre.
—¿Cómo que no? —papá abre sus ojos asombrado—. Prueba ese filete de vaca, tu abuelo lo mandó para tí porque sabía que te gustaba. Es tu carne favorita.
—¿Que mi abuelo la mandó? —señalo el filete.
—Pues sí, es de esa vaca que no quería hacer nada y tú fuiste allá y resolviste el problema.
—¡¿Esta carne es de Margarita?! —chillo asqueada—. ¡¿Cómo mi abuelo la va a asesinar?!
—No hija, sabes que él no quería hacerlo pero necesitaba...
—¿Y quieren que la coma? Conocí a esa vaca, le busqué el nombre correcto, joder. No tenía hambre y ahora menos —me levanto—. Hasta mañana.
Salgo del comedor y subo a mi habitación.
Mi abuelo asesinó a Margarita. Dios mío, hablé con esa vaca.
—¿Qué te sucede? —Tomy me pregunta cuando llego a mi habitación.
—Mi abuelo asesinó a Margarita.
—¿A Margarita? ¿A esa vaca que ayudamos? —comienza a negar con su cabeza—. Y tan deliciosa que estaba, yo comí toda mi cena, si lo hubiera sabido no...
—Ya da igual, en fin, era una vaca y las personas se comen las vacas —me encojo de hombros.
—Pero no estás así por eso, ¿cierto?
—Pues no, la verdad, y sabes el porqué.
—Sí, todo tiene un nombre.
—Un nombre que no logro sacar de mi cabeza —suspiro y me siento en el suelo junto a él—. Es que es difícil sentir cosas por alguien y tratar de olvidarlo después.
—Eso es imposible, te entiendo.
—¿Me entiendes?
—Sabes que Lulú y yo somos grandes amigos y bueno, no sé si tal vez estoy confundiendo mis sentimientos pero... la extraño, y no de extrañarla como amigo, sino como a alguien que quieres y no la vez porque está haciendo cosas más importantes que visitarte. Conozco a Lulú desde hace muchísimos años y siento algo por ella, no lo negaré.
—Eso lo suponía porque en mi mente tenía creado un ship para ustedes. Cuando no tenía el don pensaba que ustedes estaban juntos.
—Pero no es así —suelta un suspiro de desamor—. Antes de que su metamorfosis se hiciera ella estaba todo el tiempo junto a mí, ahora se la pasa junto a Félix y Fabiana todo el tiempo.
—Extraño a Fabiana también —juego con mis manos mientras hablo—. Ahora igual se la pasa todo el día en el reino. Ya nada es como antes.
—¿Algún día lo será?
—Eso espero, porque perderemos a dos personas demasiado geniales.
—¿A dos?
—Sí, Félix vale verga —rio.
—Félix, ese es otro que... Dios, es un doble cara. Era mi mejor amigo y de la nada ¡Bum! Se le acaba la hipocresía y dice las verdades en la cara de uno. Pensé que lo conocía —golpea el suelo molesto, tomo su mano.
—Jamás terminamos de conocer bien a una persona, cuando menos lo pienses saca una faceta inesperada, la cual te puede hacer daño, y eso es lo que él hizo.
—Nos hizo daño a los dos.
—Por eso no me arrepiento de haberlo lanzado contra la pared.
—Pero él te lanzó al suelo.
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Zoosemiótica✔
Aventura¿Cuál sería tú reacción si de la noche a la mañana pudieras hablar con tu mascota? ¿Qué pensarías al ver en el balcón de tu vecina a un chico demasiado guapo? ¿Qué harías si te enamoraras de él? La vida de Mary cambia en un abrir y cerrar de ojos. T...