Le había dicho a su padre que eso era una locura, ahora comprendía de donde había sacado Valentino su estupidez, Richard estaba en medio de la pista a merced de las balas, no comprendía que ganaba con un acto tan estúpido, ahora tenía que evitar que lo mataran a él y también a su hermana, además de haber perdido de vista al latino y a Valentino. No entendía como es que se hacían llamar una organización, cuando todos hacían lo que les daba la gana.
- Los hombres llegaran en quince minutos.
- Esperemos soportar tanto.
Mikhail apuntó a la pista y Jiang se llevó una mano al rostro frustrado, los latinos eran demasiado pasionales, ahora tenían que esperar en las sombras a que Richard montara una buena distracción en lo que sus hombres llegaban.
- Al menos encontré algo de información, ya sé quién los dejó entrar y les dio la instrucción de cómo hacerlo.
- ¿Santino?
- No, pero será él quien responda por su hijo, podremos reclamar el control de Italia por esto.
Había sido tan obvio que la salida de Santino era por sus propios intereses que no podía creer que Dominik no lo viera venir, de seguro estaba cegado de agradecimiento o solo quería quitárselo de encima por ese patético enamoramiento que el italiano le profesaba.
Si esta era una venganza por ello Mikha la aprovecharía para tomar el control de su territorio.
- Mikhail, tu hermana.
Jiang apuntó a lo alto de un poste en el centro de la carpa y Mikha pudo ver el cuerpo de Antonella en una jaula, podrían llamarlo desalmado incluso sin sentimientos, pero no permitiría que una mujer saliera herida por una pelea entre hombres. Mikhail tenía una debilidad y esa eran las mujeres, su madre había sido una mujer fuerte e independiente que siempre cuido de las más débiles, le enseño que las mujeres y los niños siempre deberían ser su prioridad, que no había ser más preciado y valioso que una mujer, así que cuando se enteró de la existencia de Antonella se prometió cuidar de ella como no pudo hacerlo con su propia madre. Podría matar hombres a sangre fría, pero no podía ponerle una mano encima a una mujer sin su consentimiento.
- Govnó, diles a los hombres que se den prisa, los quiero aquí ahora.
- Como digas, Xiōngdì.
- Espera, mira eso.
Sobre uno de los postes para trapecistas el Diablo y su esposo vigilaban agazapados con un arma, no alcanzaba a verse desde donde el hombre gordo estaba parado a menos que se asomaran para tirar, parecían esperar el momento justo, tenían que proporcionárselo
Estaba a punto de sugerir un plan cuando el hombre gordo silbó y un montón de hombres salió de la carpa trasera, si se movían ahora serían carne de cañón al igual que Richard, el tiempo estaba en su contra.
Su padre seguía provocando a ese hombre mientras Mikhail se sentía importante, no podía quitar los ojos de su hermana
Se escuchó un rugido que estremeció a todos, los hombres miraban a todos lados con sus armas listas. Mikhail y Long se tiraron al piso para que no los vieran o una bala perdida les atravesara el pecho, esos hombres gastaban demasiadas balas, tenían una pésima puntería, era más probable morir por una bala perdida que por un tiro certero.
- Esto se pone peor.
El hombre gordo tomó a Dominik del cabello y le apuntó con una pistola, Mikhail miró a su padre a punto de perder el control apretando el bastón de Dima tratando de avanzar, cuando ese hombre dijo algo que hizo hervir su sangre.
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Amor Ilegal Libro 1
RomanceRichard Brooks está desaparecido y el rumbo de la organización esta en riesgo. Su hijo Valentino es el legitimo heredero de su cargo, pero es sólo un niño, asi que su hermana Antonella Brooks y su padre Domink Biagio toman el control para mantenerlo...