𝐁𝐀𝐁𝐘 𝐁𝐎𝐘 +18 | Pablo Gavi

XI

Sira gritaba riendo y yo me metí en el papel lo mejor que pude.

De pronto recordé a mi yo de 15 años en las pasarelas y me autoimité.

Mi amiga me miraba sonriendo mientras se atiborraba a chocolate.

Llegué hasta el final de su habitación y giré para posicionarme tal y como lo hacía en las pasarelas.

Empecé a andar y cuando llegué hasta ella me reí.

– Esto se te da demasiado bien.

– Lo sé.– admití.– Pero me sentía agobiada y supe que tenía que dejarlo.

– ¿Por qué no pruebas el modelaje aquí? El otro día me enteré de que van a hacer una pequeña pasarela para la marca de Intimissimi para la sección de verano.

– Nunca modelo en ropa interior.

– Maddie. Deberías, tienes un cuerpo de escándalo y creo que cierto futbolista se moriría viendo esas fotos en la revista.

La miré riendo.

Podría pensármelo.

¿Cómo había acabado allí? Nunca lo sabría.

Sira me acompañó para ofrecerme para modelar y me cogieron y aquí estoy ahora.

Nos habíamos enterado de que era una pasarela con actos benéficos y que se celebraría durante toda la noche.

Las maquilladoras intentaban maquillarme. Digo intentaban porque las escuchaba decir que no había mucho que retocar.

Me sentía orgullosa de la genética que había heredado.

– 5 minutos.– avisó un chico entrando al backstage.

Se escuchaba la música por los altavoces y todas las modelos nos levantamos para colocarnos por filas.

Mis compañeras iban entrando al escenario y yo me removí nerviosa.
Hacía bastante tiempo que no lo hacía y estaba a punto de darme algo.

Me miré el bikini, siendo sincera era precioso. Aunque no estaba acostumbrada a modelar medio desnuda.

Vi a mi compañera de delante salir y supe enseguida que me tocaba.

Solté todo el aire que pude y cuando la vi entrar salí cegándome con las luces que había y lo larga que era la pasarela.

Andaba despacio pero con pasos firmes y me movía al ritmo de la música pero sin llegar a marcar el ritmo al completo.

Cuando llegué hasta el final de la pasarela vi a todos los chicos allí aplaudiéndome y a Sira levantar sus pulgares.

Me quité la pequeña tela que me cubría y me giré posando y sonriendo para las cámaras.

Volví a girarme y mis ojos se toparon con los de él, que me miraba fijamente.

Estaba muy guapo. Demasiado.

Sonreí y le guiñé el ojo para darme de nuevo la vuelta dejándole así unas vistas de mi culo y entonces volví a andar hacia donde estaba.

Cuando entré al Backstage mis compañeras me felicitaron y esperé a que el presentador nos dejara entrar de nuevo y poder hacer una reverencia.

Cuando acabó salí terminando de abrocharme la mini falda y Sira se tiró a mis brazos y me apretó muy fuerte.

– Que puta diva.– soltó y yo reí abrazándola.

Los chicos me abrazaron y Gavi me miró y simplemente asintió.