Bullet to the heart ➳ HopeV

➷ septuagésimo cuarto capítulo

Taehyung se había enterado del escándalo que había armado tanto Minjae como Hoseok el mismo día que el incidente ocurrió. No quería saber absolutamente nada de aquel tema, pero las llamadas constantes de su ex esposo y su prometido lo atormentaron aquella tarde por unas cuantas horas, hasta que por fin decidió contestarle a Minjae y bloquear a Hoseok. Las excusas que escuchó de parte de su prometido fueron tal cual: excusas, que solo lo enfermaron más y lo llevaron a pedir un tiempo para pensar las cosas y aclarar su mente, aunque ya todo estuviera completamente claro para él.

De ese día ya habían transcurrido casi un mes. Sí, un mes desde que se enteró que estaba esperando otro bebé y que su compromiso se rompió. Taehyung no quiso salir a dar declaraciones a la prensa por la boda que nunca se llevó a cabo, pero tuvo que hacerlo poco despues de que JongIn diera a entender que el compromiso de su hermano, es decir Minjae, ya no se llevaría a cabo y que los detalles no los daría él; el accionar de la prensa fue deducir que había una tercera persona, lo cual no era tan descabellado, pero finalmente fue la empresa Kim quien sacó un comunicado, confirmando que efectivamente ya no habría boda y dando por finalizado ese tema con un simple: ambas partes siguen en contacto y mantendrán su amistad, algo que era totalmente falso, pues Minjae había salido del país hace varios días atrás, para cumplir con su agenda.

— ¿No crees que ya es tiempo de decirle toda la verdad a Hoseok? — preguntó su madre, como siempre, metiéndose en sus asuntos o eso es lo que procesó la cabeza de Taehyung aquella mañana, mientras el exquisito olor a café entraba por sus fosas nasales, tranquilizando las típicas náuseas matutinas del embarazo. — No creo que ese hombre siga aceptando ver a sus hijos fuera de esta casa o que una niñera sea la que lo reciba cada vez que llegue por los niños.

— Mamá, no es el momento, por favor. — fue lo único que pidió Taehyung, mientras acercaba la taza de cafe a su nariz, tratando de tranquilizar a su lobo, que había estado inquieto más de lo común en esos últimos días, quizás por el tema de la boda, la prensa, el compromiso roto, el tratar de mantenerse escondido de Hoseok, de su familia, aunque esto fuera completamente imposible, y sobre todo, de cualquier paparazzi que quería una foto exclusiva de Kim Taehyung despues de su compromiso roto.

La señora Kim estaba cansada de las respuestas cortas de su hijo, no era la primera vez que abordaba el tema y que le contestaba de aquella forma. Taehyung no se daba cuenta, pero su barriga estaba creciendo demasiado rápido para el gusto de cualquiera y aunque solo se trataba de un cachorro, parecía que este quería darse a notar a toda costa, tanto asi que hasta Hani y Jungkook ya habían preguntado y ya se les habia dado la noticia de que serían hermanos mayores, por lo que los cachorros también estaban expectantes de qué sucedería de ahora en adelante. El único que parecía menos preocupado y hasta desinteresado del tema era el omega, quien justamente albergaba al niño que pronto nacería.

A pesar de tener ya cuatro meses de embarazo y un vientre prominente, Taehyung no se sentía pleno, su lobo quizás sí lo hacia, pero el lado humano no parecía totalmente feliz al verse a un espejo. Este embarazo no era como los anteriores, no había emoción, no había felicidad, no había entusiasmo, ni siquiera aquella desesperación que alguna vez llegó a sentir en sus anteriores embarazos, cuando miraba  su vientre crecer y crecer, y con él las ganas de conocer a sus cachorros, no había nada de eso; hasta pareciera que solo se trataba de una incubadora que estaba cumpliendo su función y eso lo hacía sentirse tan mal, demasiado mal por su pensar. El omega estaba haciendo todo lo posible por emocionarse, pero solo ahora podía entender a Seokjin durante su último embarazo, un embarazo y una bebé que tampoco parecía ser querida, hasta que finalmente estuvo en los brazos de su amigo.

— Quizás solo es necesario que lo tenga en mis brazos. — se dijo a sí mismo, ya estando en la terraza de la casa de su hermano.

Era media tarde y Seokjin lo acompañaba, pero no sabía desde qué hora o en qué momento fue que llegó al hogar de este. Solo sabía que estaba ahí, al lado de su mejor amigo y con la bebé de este, ambos mirando a sus hijos correr por todo el patio y jugando entre ellos.

Taehyung estaba retraído, olvidaba muchas cosas y hasta parecía que nunca estaba presente, a pesar de sí estar físicamente. Para nadie era sorpresa que ese embarazo le estaba chocando demasiado, pero tampoco había algo que pudieran hacer, pues el omega había decidido seguir adelante sin que Hoseok se diera cuenta, tal como lo había hecho con Jungkook y en aquella decisión no podían intervenir.

— No murmures, sabes que odio que lo hagas. — habló Seokjin, mirando de reojo a su mejor amigo, mientras trataba de tranquilizar a la bebé, quien recién había despertado de su siesta y al parecer de mal humor, pues de inmediato había comenzado a llorar, llamando la atención de su madre.

Taehyung solo pudo salir de su trance cuando oyó a la pequeña llorar, como si su instinto estuviera preparándose nuevamente para estar atento al llamado de su nuevo cachorro. Lo odió tanto, su instinto, pero a la vez se tranquilizó pues por lo menos había algo de esperanza en que no sería una mala madre.

— Quizás todo sea diferente cuando el bebé nazca. — dijo esta vez en voz alta, tratando de auto convencerse de que así sería, cuando lo único que sentia era temor; sí, temor por lo que sucedería con ese nuevo bebé y por sobre todo, en como esconderlo de su padre una vez que nazca, ya que para su mala suerte no podía escapar de Hoseok o irse a otro país, como antes ya lo había hecho.

— Yo en tu lugar, estaría mucho más preocupado por el nacimiento. — le recordó Seokjin, mientras veía a su hija cerrar sus pequeños ojitos. — No podrás conciliar el sueño hasta dentro de un año o dos.

Taehyung sabía perfectamente a qué se refería su mejor amigo y estaba más que claro que no solo era por el sueño. En realidad todos a su alrededor estaban preocupados por el nacimiento de ese bebé, en qué sucederá una vez que el niño o niña estuviera ahí, en los brazos de su madre; no sabían si es que Hoseok se daría cuenta de que tenía otro hijo más o quizás pasaría desapercibido por él, tal y como sucedió con Jungkook. Los más atentos eran Minho y SeoJoon, que hasta el momento ya habían consultado con varios abogados sobre el caso y si en caso saldrían perdiendo al no decir nada sobre ese bebé al padre alfa.

— No pensé que volvería a hacer todo esto y mucho menos a esta edad. — admitió el pelicastaño, mientras miraba su gran vientre, el cual no parecía de cuatro meses, sino de un poco más de cinco. No recordaba haber tenido el vientre tan prominente con sus antiguos embarazos, por lo que siempre que podía le consultaba al doctor si era normal o si en caso estaba esperando dos cachorros en vez de uno, lo cual ya habían descartado desde la primera cita prenatal a la que asistió.

Seokjin rio bajito, tratando de no despertar a su pequeña. — Tampoco es como estés tan viejo para tener hijos. — trató de consolarlo, aunque a decir verdad, ambos tenian niños, estaban en sus 30s y lo que menos querían era tener otro bebé más, cuando ya habían avanzado tanto con sus pequeños. Sin embargo, la vida se había encargado de darles la contra y jugar con ellos.

— No me digas que ya no piensas tener más hijos. — preguntó Taehyung, más por molestar que por recibir una respuesta, pues el pelicastaño sabía claramente que lo que menos quería su mejor amigo era tener otro bebé, mucho menos cuando su última hija tenía apenas unos meses de nacida.

Seokjin negó de inmediato con la cabeza, entre un tanto asustado por la pregunta. — Ya le dije a tu hermano que he cerrado la fabrica y felizmente él me entiende. — aclaró.

Taehyung rió y asintió, volviendo su vista hacia el gran jardín de la casa, como si hubiera algo de interesante en ese lugar. Realmente no había mucho qué pudiera hablar con su mejor amigo, muchas veces solo iba para tener un poco de compañia y permitir que sus hijos jueguen con sus primos y de esa manera desestresarse de todo lo que estaba agobiando su mente todos los días desde que se enteró de que tendría un tercer bebé.

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Sé que me estoy tardando, pero les juro que ya estamos a unos capítulos de la final. Hagan sus apuestas y que no incluya el si Tae y HoSeok se quedaran juntos, porque creo que eso no sucederá :)

Cualquier error será modificado más adelante. Besos